eso es lo que siento, sentado frente al escritorio. puede que sea esos espacios en que las palabras no salen de mi adentro, puede ser, pero, ¿qué es lo que me impulsa a escribirte?, ¿es que tengo algo que decirte ahora, ahora en que mi alma está calma como esos lagos en la cima de una montaña?... si mis padres me vieran, no podrían entender estas ganas de escribirte, esas ganas de tocarte con mis ojos a los tuyos. ellos siempre desearon que fuera exitoso, que tuviera propiedades, mujer, hijos, empleados, y ese tipo de cosas... pero, he fracasado para ellos. nunca me ha gustado tener algo para acumular riqueza, eso me hace daño al alma, es como comer mierda, así como los perros, sabiendo que eso no me alimenta, aunque los demás juren lo bien que sabe ese plato de mierda.

me gustaría contarte lo mucho que sueño despierto, que deseo estar en una playa junto a mi soledad. sentir la brisa de un verano, escuchar la olas, sentir la arena húmeda entrar por las uñas de mis pies... correr un poco, asustando a muchas gaviotas. eso me gustaría hacer, pero, ahora estoy ya mayor, los años pesan demasiado, y mi juventud se ha apagado así como la vela en una tormenta. pero, sueño, eso no se me va, es decir, sueño y siento que eso me alimenta, también medito una hora al día, me ayuda a limpiar, alimentar mis mas altos sentimientos... pero, entiendo que no puedes entender esto, es algo íntimo, muy de mi corazón, de mi soledad, de esa vida que tengo dentro, y que nadie mas que yo puede conocer.

ya te dejo, pero no tanto como para decirte que escribo porque te amo, tan solo basta que seas un ser humano, hombre, mujer, niño, anciano, homosexual, no importa estilos de vida cuando uno está vacío, enmascarado por esta pantalla virtual que me hace decir siempre la verdad, aunque nunca me conozcas, y eso es lo mejor cuando ya no tengo palabras y estoy vacío de dolor, dudas y ansiedades... puede que eso sea lo mejor para esta vida, es decir, ser simple, un simple ser humano, sin mirar mas allá de lo que sus sueños le pintan mientras duerme despierto...


san isidro, abril de 2007