Existe una confusión de términos, siempre se ha creído que dos almas gemelas son aquellas que nacen para amarse; sin embargo se equivocan, las almas gemelas no son más que almas hermanas. Son seres que tienen tanto en común, tanto... que se repelen, como dos electrones ambos de carga negativa.
Se parecen mucho en su forma de ser, opinan igual, detestan lo mismo... y si se desprecian así mismos, también sentirán lo mismo por su alma gemela. En otras palabras están constituidos con la misma energía del cosmos. Son como moléculas de una misma materia.

Mientras que los verdaderos amantes son las almas complementarias; valga la redundancia pero se viven complementando la una a la otra. Parecen dos átomos que se acercan para lograr mantener su estado neutral, que es el estado más estable en la naturaleza. Con un déficit de alguna necesidad, la otra que está en exceso le ofrece lo que pueda dar, para que ambas finalmente estén en equilibrio. Y así como en el caso de los átomos, el amor, haciendo el papel de electrón, salta de un lado a otro fluyendo así electricidad; esa que atraviesa nuestra alma y la desnuda; esa que provoca arritmias en nuestros corazones y que por desgracia nos hace sentir mal, pero que también nos hace sentir vivos.

¿Ahora comprenden cómo los seres fuimos hechos de tal forma, que sólo nos sentimos felices al respetar los principios físicos con que se rige el Universo? El amor consiste en entregar sin pensar en recibir nada a cambio.

Aclaratoria: Todo esto está visto desde el punto de vista de una estudiante de ingeniería eléctrica.