Aquí estoy, como una imagen en el papel,
sin cambios, mudo, con una sola expresión,
tratando de entender a otros, sin entenderme,
con la facilidad de hacer ajeno mi error,
involucrado en cuestiones sordas,
por decisiones de apresurada ambición.
Influenciado por el enojo y locura de mi razón,
creyéndome en derecho de reclamar.
Tentado permanentemente a mirar el error,
con la fácil solución de mi conveniencia,
oprimiendo así situaciones infelices,
que generan desdichas y turbio corazón.
Rodeado de amigos falsos,
inflados en imágenes ostentosas de gran dominio.
Siendo solo, representantes de la miseria,
apareciéndose en todo momento,
en forma inoportuna,y como sombras de muerte,
entran en mi alma transformándola,
en espejo de la maldad e indolencia.
¿Amigo orgullo, porque me enseñas a odiar,
ayudas a afligir a mis amigos,
cegándome en la altivez del conocimiento,
demostrándome una seguridad que es locura?
En banda vienes, con tus capitanes;
hipocresía, vanidad y malicia,
tratando de someter mi alma,
a una rebelión desmedida y sin salida.
Tu estratega, la insensibilidad,
domina mi alma y descontrola mi cuerpo,
cargando mi mente, con consejos sin sentimientos,
apoyados por las conspiraciones
de malicia e hipocresía,
alentado por palabras huecas de vanidad.
¿Busque yo a estos amigos o vinieron solos?
Los amigos malos, vienen solos,
como sombras de muerte,
Aparecen aprovechándose de nuestra necesidad,
abrazándonos y ensalzándonos en el error.
¿Amigo mío, amigo verdadero, dónde estás?
Orgullo, hipocresía, insensibilidad,
malicia y vanidad,
con sus miles, me tienen rodeado,
y me han encerrado en la prisión de la necedad.
¿Dónde estás humildad? ¡aparece verdad!
¡Amor, muestra tu luz y resplandece!
Ya que mi alma esta encerrada;
en el infierno de la incredulidad y la incertidumbre.
Tráeme a los constructores; fe y esperanza,
para que ellos limpien el camino
y marquen un sendero,
que limite y descubra a los malos amigos,
aquellos que por conveniencia,
generan división y destrucción.
En esta batalla contra ti orgullo,
he cometido el error
de usar a hipocresía e insensibilidad,
a lo cual fui herido con el dolor de la traición,
lo mismo varias veces al usar malicia y vanidad,
ya que son tus aliados,
pesando sobre mi, sufrimiento y desprecio.
Orgullo, tu que tan alabado eres por soberbia,
con tus miles de malicia y vanidad,
se que odias a paciencia y benignidad,
y con estos haré que te debilites, hasta fracasar.
Para atacarte, no dañare los cuerpos que usurpas,
ni trastornaré las mentes que dominas,
sino que arremeteré a tu alma, tu propia alma,
allí donde tu te crees seguro,
usando el frágil escudo de la hipocresía,
según tu propia locura,
de la cual estas convencido.
Desenvainare la espada de luz,
cuyos filos son verdad y amor,
formare un escudo de esperanza,
recubierto con fe,
para soportar tus ataques,
y con la mirada firme,
empuñare el estandarte de salvación,
y seguiré adelante, cayendo,pero levantándome,
hasta que haya logrado por completo,
desterrarte de mi corazón.-