¿Cómo soy?
Soy como tu me quieras ver.
Pongo el alma en cada palabra,
demuestro mi alegría con saltos y
mi tristeza con pesadumbre.
De sentimientos magnánimos.
Llena de verdades no dichas y mentiras
que ahora me gritan en el corazón.
Creo que lo que ocurre sólo una vez,
es como si no sucediera munca.
Pienso que el amor puede surgir de una sola metáfora.
Se que lo más importante ante un sueño,
no es tenerlo, sino realizarlo.
He sufrido el desdén de un amor herido,
y mi conrazón enfermó por aquella locura.
Soy extrema en todo lo que hago:
cuando leo, cuando pienso, cuando amo, cuando me arrepiento...
Estoy segura que lo primero de la vida,
no es el honor ni la virtud, sino la agudeza y
la inteligencia práctica.
Siento que no existe mayor pobreza que la de
quienes se averguenzan de ella.
Carezco de agilidad verbal para responder
adecuadamente con una ironía o un desplante.
En ocasiones he podido sentir como la tierra que
me ha visto nacer y me mantiene, se derrumba
a mis pies.
Y como escribió alguién; el tedio es una mano muerta blanda e informe sobre mi ánimo,
un largo sueño sin argumento, una nada implacable.
¿Cómo soy?.
Soy como tu quieras que sea.
¿Cómo soy? Tú te preguntas. Dices: ¡cómo él quiere que seas!. Si las dos cosas tú juntas, eres, justo, lo que deseas.