Amor, a mi mente viene la visión cautivante de tu sonrisa fresca y libre que acelera nuevamente el latido de mi corazón, desbordando una noche más, mis ansias y deseos de besar tu piel como cada noche que transcurre en estos días de sencibilidad intentando llenar unas líneas con mágia, con sentimiento, seamos como el relato del hechizo de la luna, aquel que cuenta que el amor y la ternura juntó a dos enamorados condenandolos a vivir juntos hasta la eternidad.

Nuestras dos almas seguirán buscándose, atrayéndose, encontrándose, amandose, para vencer el dolor para ser dos y uno solo en plena libertad.

Dedicada a Jorge Espinoza