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Categoría: Hechos Reales

Amor sincero...

¿Alguna vez han visto el rostro lleno de ilusión e inocencia de un niño pidiendo un abrazo o simplemente amor...? Son capaces de hacer lo que sea por que se les tenga en cuenta, lloran, gritan hacen berrinches, etc.

Hoy vi la película Inteligencia Artificial y me conmovió mucho... se trata de un niño androide que se le da la capacidad de amar incondicionalmente a la persona que lo programe. Pero por ser diferente no es aceptado dentro de la sociedad y todo lo que hace parece indicar que es peligroso, por lo que el padre decide deshacerse de el, esto equivaldría a su destrucción. La madre encargada de llevarla al sitio no puede mas con su cargo de conciencia y lo abandona en el camino, cerca de un bosque desértico.

Desde allí él conoce lo que es la crueldad humana... personas que se regocijan al ver las “carnicerías” que eran un evento donde destruyen a los androides viejos... El por suerte siempre logra escapar y su única fuente de energía o motor que lo hacía salir adelante era el amor que sentía hacia su madre. Recordaba el cuento de Pinoccho y su ilusión era encontrar al hada madrina y pedirle que lo vuelva un niño de carne y hueso, para poder volver al lado de su madre, para recibir un beso un abrazo...

Me sentí triste por que la película enfoca la cara cruel de las personas... el no aceptar a ninguna otra especie que no sea igual a la nuestra o se amolde a nuestras costumbres o nos traiga beneficios...

Cuando tengan tiempo, vean detenidamente a su mascota (si la tienen) y se percatarán que tienen un brillo, una inocencia similar a los niños solo desean un par de palmaditas, una palabra cariñosa... Cuando son bebes los consentimos en todo, pero cuando crecen y empiezan a malograr las cosas, nos limitamos a regañarlos. Les gritamos, decimos que son unos malcriados y los vamos dejando de lado, hasta que se vuelven un estorbo y muchos dueños irresponsables los regalan o abandonan. Pasa algo parecido con los niños, a los cuales se los ignora por que fastidian, no dejan trabajar, por que llegan en un momento inoportuno... Cuando estén frente a este tipo de situaciones, paren un poquito su rutina y reflexionen, que ellos solo quieren un poco de atención, observen como les brilla los ojos cuando los cargamos o jugamos con ellos.

Las llamadas carnicerías me hicieron recordar a todas las crueldades y egoísmos que albergamos... Todos... sin excepción alguna lo cometemos... Muchos creerán que nunca han hecho algo malo, pero no es así. Los humanos para sobrevivir sacrificamos a muchas otras especies. En el mundo de la Veterinaria, vivimos esto en carne propia... ¿Quién no come carne o algún derivado animal? Acuérdense siempre, que para mantener la especie humana, se sacrifican muchas vidas día a día. Los criamos, los alimentamos y los cuidamos solo para destinarlos a morir. ¿Alguna vez han estado en una Camal (Matadero)? ¿Han presenciado la matanza? Es un hecho simplemente cruel y prefiero no describirlo...

No estoy diciendo que dejemos de consumir carne, simplemente que seamos conscientes y demos gracias a todas las vidas que sacrificamos. Aprovechen al máximo ese regalo que la naturaleza nos da... A pesar de todo lo que le quitamos, ella no pide “nada” a cambio... Estemos agradecidos entonces y seamos conscientes que gracias a una inmensidad de vidas salimos adelante y la mejor forma de agradecer es amando... dando amor en lugar de odio, bendiciendo en lugar de maldiciendo al prójimo, a la naturaleza, al los animales y sobre todo a los niños. Ellos son tan inocentes y puros, tiene algo que nosotros vamos perdiendo con el pasar de los años. No destruyamos sus ilusiones por el simple hecho de que estamos ocupados.

Se darán cuenta que al dar amor sincero, sin esperar nada a cambio, recibirán amor y paz... que muchas veces es la única forma de llenar los vacíos de nuestra vida. Es la única arma que acaba con guerras sin derramar sangre... es la única manera de alimentar a nuestros hijos para que crezcan con un espíritu sano y fuerte...

En el libro Adonay escrito por Jorge Adoum escribe: “El alma es una luz y el cuerpo es el velo que lo opaca, pero si el velo es transparente el hombre puede alumbrarse y alumbrar a los demás” y la única manera de quitarse el velo me parece que es con el AMOR...


Kitsutani Kian Hernán
26 / 09 / 01
Datos del Cuento
  • Categoría: Hechos Reales
  • Media: 5
  • Votos: 33
  • Envios: 2
  • Lecturas: 2660
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