¡Hola Jesus!
¿Como estas? Oh...perdona no se como pude hacerte esa pregunta, creo que olvide que en ti todo marcha bien, que todo es alegria y felicidad.
No se por que hoy senti deseos de verte y quize pasar a saludarte, hacia algo de tiempo que no nos veiamos. Como ves yo he cambiado mucho, ya no soy la misma que tu conocistes y que se anido en tus brazos una vez.
Jesus perdona mi pregunta, pero ¿porque tus ojos no tienen el brillo de antes? Ahora que los veo frente a frente los noto muy tristes, no tienen la alegria que solian tener cuando acostumbrabamos caminar juntos por la orilla del mar y observar su inmensidad...
Recuerdas aquellas horas que pasabamos en silencio con los pensamientos abiertos a los sueños, cuando esperabamos que callere la tarde y el sol se ocultase lentamente tras las dulces nubes...Aun recuerdo aquella noche que sentados en la arena tratabamos de contar estrellas mientras mas contabamos mas aparecian, pero todo era alegria.
Me encantaba escuchar el mar y ver como las olas chocaban en las rocas una y otra vez. Que divertido era todo eso ahora que lo pienso parece tan especial hace mucho tiempo que no disfruto de una tarde asi. No puedo creer que yo sea otra que haya renunciado a tantas cosas. Las que ahora tengo no pueden ser comparadas con las que una vez contigo tube. No hay nada en este mundo que pueda ser comparado o mejor que tu inmenso amor y tu compañia. Yo todavia no he encontrado a nadie que pueda remplazar tu dulce compañia.
¡Oh Jesus! Podras perdonarme por haberte abandonado. Crees que todavia no sea tarde para ir juntos a ver como el sol se oculta y volver a caminar por la orilla del mar como antes...
Gracias Jesus por esa hermosa sonrisa y por permitirme ver el brillo de tus ojos como antes...
Gracias Jesus, gracias...