Preguntas . Preguntas .. Preguntas …

Que interesante cuestión…………………

Vivimos haciendo (y haciéndonos preguntas), cada hecho de nuestra vida nace, crece o muere con una pregunta, ………… igual que nosotros.

Desde el primer atisbo de razón que ilumina nuestra mente hasta el último suspiro que realizamos, vivimos preguntándonos algo.

Comenzamos con cosas como

“¿ que es esto tan extraño que me meten en la boca, y me alimenta ?”

hasta cosas como
“¿ será ésta mi última expiración? ”
“¿ me extrañarán? ”
“¿ existirá el cielo o el infierno ? “
“¿ quién se probará mi ropa? ”.

Preguntamos cuestiones banales como
“¿ que hora es? ”
“¿ hará calor? ”
“¿ me pongo el saco rojo o la remera verde ?”.

Preguntamos cosas estúpidas como
“¿ qué gusto tiene la sal?
“¿ hace calor ?

O preguntamos cuestiones que solo a nuestros ojos son importantes:
“¿ te puedo volver a llamar?”
“¿ puedo tomar tu mano?”

Y tantas otras que para el resto del mundo pasan por ignoradas y casi diría, tomadas con un dejo de asco salvo que la pregunten ellos mismos.

Otras veces transformamos una simple pregunta y la retorcemos, la modificamos, la presuponemos y la transformamos en cosas como
“¿ le caí bien ?”
“¿ me querrá ?”
“¿ seré muy pesado ?”
“¿ porqué no llama ?”
“¿ que hice mál ?”
etc

En donde no realizamos la pregunta en forma impersonal, sinó que yá le ponemos un poco de negatividad a la pregunta, cosa de ir presuponiendo que la respuesta, de antemano, viene mál., ya le vamos dando un poco de leña a la máquina de las “malas ondas”, por las dudas.

Pero somos injustos, esa forma retorcida de preguntar la usamos cuando yá casi de antemano conocemos la respuesta negativa a la yá negativa pregunta que nació de una negativa situación que propició esta actual actitud negativa. ( o nó ?).

Tenemos el mal hábito de no hacer (en la mayoría de los casos) preguntas directas, esas que solo pueden ser respondidas por sí o por nó, o por una respuesta que es clara, sin dobles intenciones y no hay duda del contenido de la frase.

En vez de eso, pasamos la mayor parte de nuestras vidas tirando tiros por elevación para ver si preguntando de otra forma, o con largas introducciones podemos llegar a lo mismo que nos hubiera sido mas fácil preguntar, de frente, de forma clara y franca, esperando con los ojos, los oídos y la mente bien abiertos, la respuesta que sonará como un cachetazo, pero que será exacta.

Podemos pasar toda una vida de angustia e incertidumbre, sufriendo porque no nos atrevimos, atrevemos o atreveremos a hacer la pregunta directa, exacta, la que se “clava” e-x-a-c-t-a-m-e-n-t-e donde debe “clavarse”.

Cuando nos preguntan cosas como: “Como me queda el pulover?” respondemos mas o menos así (en la mayoría de los casos) bueno en realidad es distinto a tus anteriores 300 puloveres grises, no te queda mal pero te hace…, parece como ….., el color es un poco ….., le sobra......., le falta......., te hace más .............., te hace menos ............, no te parece sí en ves de …… ………………………….. siempre es lo mismo, decir de frente “te queda como el culo” es tan difícil ?, si a la larga la persona que está preguntando se va a dar cuenta que estamos dando miles de vueltas para no decirle la verdad, por mas dura que esta sea, y si nos preguntó quizás sea porque le interesa nuestra opinión..

“Me contratarán?” …….. “bueno en esta momento la empresa no va a tomar ninguna decisión, pero esperamos que en un plazo prudencial el Directorio acceda a revisar a los postulantes y dentro de ellos quizás tenga la posibilidad de ser elegido / a para el cargo de .........”, en ves de llenarle la cabeza con vanos ideales y amargas y tediosas esperas no es mas fácil “ la verdad que es un inútil para ese puesto”.

Que distinto sería el mundo, un mundo donde solo la verdad (la dura, como dicen) moviera toda nuestras vidas, acciones y actitudes, que decir la verdad no sea una cosa que se exija bajo juramento, que sea simple, franca y diáfana.

Sé qué es utópico nadie, hoy por hoy, soporta 100 % de verdad tanto el decirla como el recibirla, es un mundo este, donde la mentira forma parte de la vida diaria y a en ella estamos esclavizados.

Lo cómico es la definición sobre la palabra preguntar que dice la Real Academia Española “Demandar e interrogar o hacer preguntas a uno para que diga y responda lo que sabe sobre un asunto”

Demandar e interrogar, es una cuestión totalmente autoritaria y nada tiene que ver con el clamor, la súplica o la entonación que lleva la pregunta la cual suena a nuestros oídos más como un ruego que como el de una declamación ordenatíva de resultados.

“Que diga o responda lo que sabe…” acá presupone que uno debe decir la verdad sobre lo que sabe, que interesante, en ningún momento dice “que diga lo que cree saber o que mienta si la situación o las ganas de quien lo dice así lo amerite”.

Pero el tiempo nos cambia, ese maldito reloj llamado vida, y uno ya no pregunta tanto, (será esa la famosa experiencia de la que tanto hablan) y comienza a usar las respuestas que ya tiene atesoradas, buenas y malas; quizás sea eso una ventaja o una desventaja, quien lo sabe si no hay nadie a quien preguntarle.

Uno se pasa muchos años buscando respuestas, y uno no se pregunta nunca si en realidad está haciendo bien las preguntas.

A veces comete la torpeza de preguntarle a un tercero / a, cuando en realidad lo que estamos haciendo es tratar de deslindar la responsabilidad que solo es nuestra, del dueño / a de la pregunta.

Si la respuesta de este tercero / a no nos satisface hacemos lo contrario, total el problema es nuestro y en realidad perdimos el tiempo preguntándole algo a alguien que no sabe lo que nos contesta y si su respuesta es parecida a lo que en realidad queremos entonces seguimos ese consejo, y si nos sale mal le echamos la culpa diciendo “hice lo que vos me dijiste y mirá lo que me pasó”; entonces, .............. porqué lo hacemos ? y no una vez, cientos, miles de veces

O acaso tratamos de deslindar responsabilidades en terceros cuando las cosas no nos salen como queríamos ????

Preguntas . Preguntas .. Preguntas …
Preguntas . Preguntas .. Preguntas …
Preguntas . Preguntas .. Preguntas …
Preguntas . Preguntas .. Preguntas …

Y más preguntas

Es un eterno ciclo interminable, es ir recorriendo el punto de un gigantesco signo de interrogación, dando vueltas y vueltas y vueltas, sin principio ni fin, solo un viaje eterno que desemboca en la próxima pregunta.

Que es la Vida? Que es la Muerte?
Quien Soy? Que Soy?
Adonde voy? Cual es mi lugar en este Mundo?
Qué?
Quién?
Como?
Cuanto?
Porqué?
Para qué?,

Preguntas . Preguntas .. Preguntas … ............................ solo preguntas.

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