Ciertamente,
te ensalsas,
presumes tu lado cierto,
vienes a mi como un cuento,
me levantas y te asombras,
soy tu obra,
que mas da si ahora estoy en ti y tu lo sabes.
Tu cuerpo es como la caricia divina,
de una tarde de primavera cuando el sol se ha puesto en tu pradera,
tus besos humedos tal cual una gota caida del cielo,
me dan a veces,
frio y otras aliento en ese mar del olvido,
pero entonces,
donde hay bruma,
estas ahi y me despiertas,
tan solo para hubicar tu pezon alado a mi costado y tu mejilla rumorosa, y tus labios en mi vientre y los mios en tu sexo,
que duerme sobre mis brazos,
tus lienzos largos que son dos pares de obras vivas,
azules y tu vientre,
es la voz del mar encendido donde no hay olvido, estàs tu.
Soy yo, machista
y con ninguno te comparto,
soy asì inperceptible y sin embargo,
el baño esta mas ansioso que mis manos,
que liquidas rondan en ti tallando a tu espalda y entonces levantamos la copa,
estas mojada,ludica y
sencillamente primorosa,
tus piernas se hacen huellas en las mias y me dices al oido,
sì,
eres tu y no hay màs oportunidades y te preguntas,
¿què màs pruebas hay de amor en esta hora?,
¿y tu risa,
dònde estarà pensando cuando se abre?, ¿y tu cuerpo en que estarà viajando cuando sueña?,
¿y tu amor aquièn darselo sino a mi?