Esta es la historia de una niña,que buscando el amor se hizo mujer.
María, nuestra pequeña niña, nacio en un pueblo pesquero, era una pequeña flor, un alma bella y pura.
Desde muy joven, vivía con su padre en una pequeña cabaña, desde la cual se veía el horizonte, un horizonte embriagado en agua, en un mar en tempestad,desde alli María divisaba los barcos,
los admiraba, pero nunca penso que su corazón llegaría en uno.
Sí, os hablo de ese amor, que cuando llega deja su huella en el alma y nunca se olvida.
Ese fue Pedro, un joven alto, moreno, su piel curtida por el mar, brillaba. Sus ojos fueron el gran abismo que perdió a María, esa pena que nunca cambiaría por nada.
Una mañana temprano, María en el horizonte, oteo una pequeña embarcacion pesquera, al ver que se dirigía hacia puerto, la muchacha se acercó al pueblo para comprar algo de pescado para comer.
Cual fué su sorpresa, cuando llegó al puerto y vió a Pedro, en una décima de segundo, quedo prendada, sus ojos brillaban como nunca, su vida dio un vuelco.
Apartir de ese día, fiel a su cita, pasaba por el puerto buscando la pequeña barca, buscandolo a él.
Solo cruzaron miradas, nunca hubo palabras de amor, pero su corazón sabia que este existia, su alma gritaba de dolor cuando no lo tenía cerca, se encontraba perdida.
María disfrutaba de esos pequeños momentos, de esos encuentros.
Pero una mañana, Pedro no apareció, y María,sola y desolada, lo esperaba cada mañana.
Transcurrieron tres dias, hasta que en el pequeño arrecife aparecio el bello cuerpo inerte de Pedro.
María sumida en la desolación, una noche marchó a pasear al arrecife y entregó su cuerpo al mar, a ese mismo mar que un día le robó el amor, a su gran amor, Pedro.
Esta es la historia de amor de María y Pedro, un amor puro, un amor perdido.