¡Este es un niño violento!-vociferó la maestra mientras con la cara distorcionada por la ira tomaba con fuerza al pequeño del brazo y lo jalaba en presencia del Director...los demás chicos gritaban, Juanito en el suelo, sangraba dela nariz abatido por los golpes del acusado y aún llorando....el Director, con ojos desorbitados contemplaba la escena no dando crédito a tanta maldad en un alma tan pequeña...¿como podía suceder eso en su escuela? ¿que diría el inspector de zona?..."llamemos a los padres del rijoso, maestra y démosle un castigo ejemplar"-dijo por fin el Director-. La maestra tironeo al niño y con la regla de madera que usaba en su clase, asestó tres duros golpes al menor en las nalgas...el niño no lloró, dentro de su almita, de su corazoncito crecía otro tipo de dolor, de coraje, de impotencia...todos lo llamaban el niño violento, sí, pero ¿acaso alguien se detuvo alguna vez para preguntarle por que sentía tanto rencor hacia los demás? ¿era violencia defender a puñetazos el honor de su padre a quien desde hacia años no veía pero que el niño creía bueno cuando los demás lo llamaban "teporocho"? ¿era violencia defender el honor golpenado a los mocosos engendros de aquellos hombres libinidosos que deseaban con toda lujuria poseer las carnes de su madre sola, joven,bonita y abandonada? ¿era vioelncia sentir hambre cuando sus compañeritos llegaban con la panza llena y preferían tirar el lunch que darle una probadita a él que ni habia cenado ni desayunado porque mami habia llegado tarde y salido temprano a trabajar? De pronto el aliento fétido del Director hablando cerca de su cara hizo reaccionar al niño...¡te vas expulsado ahora mismo! le grito y abrió la puerta de la escuela que parecia mas bien Lecumberri que un centro de enseñanza...el aire fresco de la mañana golpeo su cara, el calorcito rico del sol lo confortó, caminó por el campo, lejos del bullicio del pueblo, lejos de la burla y el odio de sus compañeros y maestros... alli, entre el pasto, los arboles y las flores se sentía agusto...aqui estoy en paz (pensó) aqui esta Dios...a lo lejos oyo la voz dulce de su madre que lo llamaba, habia pedido permiso para salir del taller al recibir el recado del Director y al no encontrarlo en la escuela lo busco en el campo...alli entre el aire, el sol y las flores madre e hijo se fundieron en una abrazo enorme, interminable,profundo y sincero, sin palabras, solo con el latir de dos corazones que tenían la fuerza de cambiar ese mundo de violencia en un mundo deamor...