Habia pasado solo un año desde que Julieta habia terminado sus estudios en el instituto y que habia sucedido el incidente del teatro, del que no habia tenido idea. ya cursaba estudios en un curso corto de sociologia pues al fin habia comenzado su practicas en el despacho particular de su "padre" ya hacia unos 5 meses. ahora estudiaba en la universidad del valle de Mexico y andaba por el segundo bimestre. una vez, le pidieron un trabajo para investigar los nucleos sociales y las razias; para ello, habia tenido que ponerse de acuerdo con un compañero; Rodrigo Suarez para ayudarle con las grabaciones en sondeo y el transporte a los barrios bajos de la ciudad. para evitar problemas pues los suburbios de un tiempo a esa fecha, 1987, se caracterizaban por los delincuentes juveniles a las 7 de la noche en pleno ajetreo y los asaltos a mano armada. asi, en cosa de dos semanas ella y su compañero se encontraban en la Tepalcates: ya antes habian pasado por La merced, tepito y otras zonas revueltas de la metropoli viciosa, cumpliendo con exito sus entrevistas para su trabajo de investigacion. antes de que se diera tal evento y en ese punto pero aun a unos metros del hecho mas ajenos a ello, la familia natural hacia sus labores vespertinas; Doña Juana habia salido al mercado y regresaria en unas horas, las chicas se hallaban en sus libros, cada una en su nivel; Maria en sus tareas de prepa y su hermana menor en las de secundaria. sus sobrinitos de Juana se hallaban con ellos y hacia unas horas que jugaban con los juguetes y golosinas del momento; siendo unos chiquillos de once y diez años. de vez en vez molestaban a sus primas con bromas infantiles o chascarrillos, cosa que ellas no ponian atencion muy vana. el padre, como siempre se habia ido temprano al trabajo. asi, llego Juana y al depositar las bolsas de mandado en la mesa del comedor regaño a Fabian, uno de sus sobrinitos que vio corria desaforado por el patio y molestando a algunos vecinos con su alharaca:
- ¡fabian, no grites, escuincle! ¡ya ves que los vecinos no quieren que hagas ruidos! una cosa es jugar y otra fastidiar a los demas.
- perdon, tia Juana. es que anselmo luego luego quiere que juguemos a la ametralladora y el hace mucho ruido primero.- con esta breve afirmacion del chico se calma el alboroto y Juana les dice que mejor la ayuden a acomodar el mandado. los niños acceden. despues de ayudarle, los niños regresan a sus juegos y ella torna a cocinar para cuando llegue el marido y a ver la novela de las seis; faltando para ello 4 horas. en eso, llega Lucilda y pregunta:
- mama, ¿has visto mi libro de geografia? es que tengo que salir ahorita en la tarde con unas compañeras a un trabajo de la miss de geografia y tengo que irme rapido.
- umm. no se. quizas ha de estar en la bodega; ya ves que tu padre luego les dice que dejen las cosas que no guarden alla. seguro ahi ha de estar.
- gracias.- con esto, la chica va hacia el cuarto; un lugar pequño pero bien ventilado y siempre entreabierto por estar al fondo de la casa pobre donde viven. ella sigue en sus labores. al cabo de dos segundos viene Maria:
- mama.- susurra.
- ¿que quieres, Maria?
- quiero preguntarte algo, que espero no te moleste.- dice, un poco indecisa y algo vacilante.
- ¿que es? dimelo. sabes que a mi no me gusta andarme con misterios.
- es.¿usted y papa, tuvieron una hija antes? es que, por accidente encontre un acta de nacimiento donde estaba que tu y papa habian tenido una hija que le pusieron josefa, solo por lo civil pues no la bautizaron y.
- sabes que esa hija que tuvimos fallecio de pequeña. ya se los habia contado-. corta tajante su madre-. ademas, para que hurgas donde no debes.
- pero es que. quizas ella aun viva. porque don Mateo el de las carnes me dijo que cuando el tenia su puesto en la merced y apenas los conocia a ustedes, una mujer anciana que ya ha de haber pasado a la gloria le vino con una niña casi recien nacida y que como el ya era casado, le recomendo una casa de cuna que era propiedad de la iglesia del rumbo. y que ahi la mando. por eso, queria disipar mis dudas acerca de eso.- callo, al faltarle valor para continuar lo que habia sabido cierto dia, al charlar con ese amable y conocido carnicero que les fiaba cuando compraban cerca de la merced, en los dias de año nuevo. Juana casi se pone azul violeta por el relato y permanecio callada. asi paso cosa de 28 segundos cuando ella, con un nudo en garganta le dijo:
- posiblemente te podria regañar por oir chismes asi, hija. pero quizas. quizas tenga razon el señor. uando, en realidad perdimos a tu hermanita nosotros ya no quisimos saber mas ni dar el ultimo esfuerzo. al no dar una, la policia retiro el cartel al cumplirse los 3 años de desaparicion y nosotros nos volvimos a donde conociamos. mas ahora, ¿que podemos hacer ya? ella quizas se encuentre en mejor posicion o igual de pobretona que nosotros. te pido Maria, que no volvamos a tocar el asunto ¿queda claro?-. dijo, en un tono entre pasivo y algo sacado del sollozo. la chica al saber lo que trataba y para no apesadumbrabr a su madre decidio callar y ayudarle un poco al guisado apra el que faltaban unas hioras en cocerse. luego la atmosfera volvio a lo normal. despues de cocinar Juana observaba la novela, que esta vez habia comenzado algo temprano, su hija juana habia salido a una tienda comercial por las compras y se hallaba viendo la television; importandole solo lo que seria de la villana que habia envenenado a su marido para quedarse con su negocio y ahora andaba sospechosa de todos: en eso, oyo un breve toquido en la puerta color bermejo de fierro y una voz de muejr joven, no podia ser su hija pues haci apoco que habia salido a tienda:
- buenas, venimos a un sondeo.- decia la voz de fuera. ".¿quien sera? seguro son los evangelicos que quieren vender sus libros. abrire y les dire que no frieguen." dice para sus adentros juana, calzandose sus chanclas y avanzando ritmica hacia la puerta. no sabe aun que el destino le ha de jugar una verdad. pero abre:
- buenas tardes, señorita. ¿que desea?-. le dice a una joven de tal vez unos veinte años; morena y trajeada. que viene con un muchacho algo mayor que ella con barba moteada.
- hola. disculpe no soy de aqui. me llamo Julieta Jimenez Baena para servilre. por un trabajo de mi escuela necesitamos un sondeo o una entrevista para que me entienda. a personas de esta colonia: es una investigacion que no es a fin de hurgar su vida personal.- dice la muchacha, entrecortada y de subito. el chico se prepara a grabar la entrevista y no pone atencion al dialogo. juana responde:
- ¿sera rapido el interrogatorio, mujer? porque a mi esposo no le gustan los fuereños y ya ve.- asegura ella.
- no. solo es cuestion de segundos. incluso para no hacerlo a la antigua permitame darle un cuestionario como censo para llenarlo; despues le hare preguntas.- ald ecir esto le extiende un formato amarillo con unas treinta preguntas, parecidas al censo. con eso, entran. a juana de nuevo le llega el recuerdo del teatro y el comentario de su hija maria le depsiertan sospechas: parece ser la misma chica que vieron por accidente en el teatro. y esa acta, descubierta por descuido. ¡podia ser ella! asi, penso en recuperar la calma y afrontarla en el momento; le preguntaria a la chica como indiscrecion en que barrio vivia, si era cerca de la merced, donde antes se habia perdido aquel retoño que recordaba perder por su juventud maternal y un descuido breve. si. pero por ahora y ante el caso omiso de ella y el chico, debia escribir esas preguntas breves. y asi estaba. cerca del ojo del huracan. (continuara) no se pierdan el ultimo episodio de esta breve pero veridica historia.