Desde que lo conocí, le fuí tomando cariño. Era muy dulce, casi un niño y me nacían ganas de protegerlo.
Me fuí volviendo su confidente. Cada historia de su vida me la fué contando. Sus secretos, algunos sueños, sus actitudes infantiles y su rostro ingenuo, hicieron que mi cariño hacia él fuera creciendo hasta el infinito.
Cada vez que tenía un problema recurría a mí. Si necesitaba llorar también. Si alguna chica le gustaba o si lo asaltaba una duda, ahí estaba yo para cuidarlo, aconsejarlo, mimarlo, consolarlo.
Una de las tantas noches que pasamos juntos,leyendo, mateando, durmiendo, jugando o simplemente hablando, de unos de nuestros juegos surgió un beso. Sin decir nada más que" tenía ganas de hacerlo" como explicación.
Luego de ese beso surgieron otros, se mezclaron con el tiempo con caricias y terminamos haciendo el amor. Siempre en silencio, sin explicaciones.
Aunque me moría de ganas por pedírselas y al notar que no tenía ganas de darmelas, nunca pregunté nada. Los encuentros continuaron. Siempre en secreto. Nadie debía saberlo. Era nuestro secreto, creo. Tan secreto que nunca nos dijimos nada acerca de lo que pasaba en esos momentos. Era como si no sucedieran.
Y él seguía contándome sus problemas, de su novia a la que no lograba querer lo suficiente. Y así entre sus confesiones, surgió una ilusión y nació en mí un gran amor hacia él.
Aún lo escucho hablar de ella casi con indiferencia y siento que miente. Presiento que la quiere y que soy yo la que no significa nada para él.Me cuenta acerca de sus conquistas y aventuras.Intento dejar de verlo, invento excusas para terminar con esta situación , pero no puedo hacerlo.
Nuestros encuentros continúan, mi amor aún continúa creciendo y no logro poder decírselo.
Me sigo ilusionando por su sonrisa, por su manera de verme, por sus besos, sus caricias, su manera de hablarme. Pero sufro muchísimo por sus confidencias y este eterno silencio.
Es como si no se diera cuenta que lo quiero y que me lastima. Es como si lo hiciera a propósito para probarme o quizás es sólo cobardía, esperando que sea yo la que ponga fin a todo esto.
Sigo sufriendo por esta supuesta relación, por la incertudumbre de no saber sus sentimientos hacia mí. Tengo miedo de perderlo por eso elegí la opción de seguir ocultándole mis sentimientos y ofrecerle todo lo que tengo de manera incondicional.