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El Circulo Amoroso

Todo sucedió una mañana de junio: ambas jovenes se encontraban en la casa de sus padres.  pues dicho sea de paso,  Julieta ya no era precisamente una señorita  sin compromisos. hacia solo medio año que ella y su novio esteban habian contraído nupcias por lo civil, y ahora se hallaban en visperas de nupcias religiosas para septiembre.  este evento habia sido la sensacion del momento en el liceo durante unas 2 semanas, aun mas porque sus amigas habian acudido a este breve preambulo de bodas y ahora ansiaban asistir a la segunda parte. mientras en las aulas ya no veian a julieta como "una mas" sino mas bien como una joven mujer casada.  esto le alegraba a la mujercilla. Esteban, tras darle infinitas pruebas de amor típicas de los novios y ademas ( claro, julieta jamas se lo comento a  sus padres)  consumir el acto sexual unas ocasiones en el departamento que esteban alquilara tras ser ascendido en su puesto al fin se lo había propuesto. aunque aun no estaba seguro de como vivirian al estar juntos, pues el apenas ganaba un sueldo mínimo y ella  acababa de renunciar a su empleo en la tienda, tras anunciarle la propietaria que cambiaría de domicilio.  así, ella estaba por terminar sus estudios universitarios. esa era la cuestion que tanto les preocupaba a todos. aunque a julieta le inquietaba un tanto el que ella se casara y por ende, debia dejar a su hermana a que le siguieran criando sus padres y familiares. pese a que adelaida se bastaba a si misma y poseia cierto instinto de cautela, julieta temia que su hermana menor por su ingenuidad mezclado con su preñez terminara engañada por un tipo mayor, quizas un chico algo mas maduro.  pero  sus padres la habian persuadido de que por ahora su matrimonio era lo mas importante y debia endosar sus asuntos con el, su conyugue. ese dia, julieta se hallaba haciendo unos trabajos que le habian pedido en la universidad, mas ese dia no le tocaba recibir catedra. adelaida se hallaba  en su cuarto, charlando por telefono con una de sus compañeras:  ese dia debia acudir al instituto en la tarde.  cuando termino el arduo y  laborioso trabajo escolar, julieta suspiro: miro su reloj de pulsera, serian casi las once del dia. esteban habia salido a temprana hora hacia el trabajo; pues como ya estaban tecnicamente casados se hallaba cohabitando con ellos. aunque le habia prometido que llegaria en la tarde para ir al centro, pues debian checar costos en cuanto al vestido de novias u otros articulos de boda.   para despedir su epoca de novios, irian a un restaurante en la noche para cenar de manera romantica:  esteban estaba muy ansioso y apenas podia charlar con ella. pues como sorpresa de viaje de bodas, el muchacho planeaba decirle en la cena que pensaba pasar con ella la luna de miel en  Río de Janeiro, Brasil. haciendo ahorros para los viáticos y  procurando ser mas eficiente en su labor, queria sorprenderla. mas aun seguía siendo un secreto. " en cuanto lo sepa, se va a olvidar de sus ataduras a la familia y los recovecos que puedan darse". piensa esteban, entusiasmado porque llegue el dia, asi como algo inquieto. bueno, sigamos el relato:  al saber que ese dia estaria atareada con esteban u otros asuntos, no podria llevar  el proyecto a la escuela. pues este estaba encargado para el dia siguiente, y quizas aun seguiria ocupada. asi, penso que quizas adelaida, sabiendo ya en que lugar se ubicaba el liceo a donde acudia julieta a tomar cursos, decidio entregarle el proyecto para que ella acudiera y se lo diera  al profesor efrain, pues los profesores no variaban  en turnos o sucedia raras veces.  asi, era una pequeña tarea que le encargara a su hermana menor, para adquirir  responsabilidades.  asi, llamo a Adelaida:

- Liz, Liz!!. ven!!- ( a veces julieta le llamaba por su segundo nombre, que la joven raras veces oía de Familia y amigos: indicaba también que su hermana se hallaba de humor)  la joven acudio al breve llamado, en cuestion de segundos; no se hallaba haciendo nada en su habitacion, salvo mirar por la ventana. o bien, a ratos parecía leer Lagrimas y Risas, una historieta muy prestigiosa en su salón. cuando la chica acudio, julieta le entrego el documento:

- toma este documento: lo necesitan para mañana y no se si podre acudir. asi que te encargo  vayas a la universidad, pidas permiso.  para que se lo entregues  al catedratico... al maestro efrain. entendido?- adelaida, quien en ese momento solo queria salir para desaburrise del tedio matutino, y quedando algo cercana la universidad al instituto, asintio con la cabeza y tomo el proyecto. tras despedirse de julieta,  la jovencita se dirigio hacia el liceo universitario: aunque en ocasiones habia acompañado a su hermana, no habia entrado jamas, no habia pasado del aula de visitas. asi, el hecho de  encontrase con personas mayores, unos aun mas adultos  que julieta, le hacia sentir algo de desconcierto con un dejo de aventura. ¿ que ocurriria si a algun muchacho mayor del colegio le daba por cortejarla? o bien, ¿como es que de nuevo sentia aquella oscura pasion, ese sentimiento prohibido; ahora que se encontraria con su amor platonico? quien resultaba ser el maduro catedratico. sin saber incluso, que julieta ya habia consumado el acto sexual con este. que su tan mentado novio, ahora su  joven esposo, no habia sido el primero con quien habia fornicado. justo despues de que ella se quedara para  explicarle unos detalles, casi 5 dias despues. ese dia, julieta ya estaba por salir del aula para ver a la asesora mercedes, de la clase de codigos penales para un asunto acerca de una exposicion. cuando efrain advirtiendo que debia actuar, levanto una mano ordenandole que se quedara para unos detalles que debia tratar con ella:

 

- señorita Huitron.... no se retire aun. debo hablar con usted, en privado.- julieta, aunque sabiendo  que actuaba algo temerosa y con recelo ante el, similar a su hermana ante los mayores que le eran desconocidos pues ella era una adolescente que aun podia perdonarsele una cohibicion, o bien, algun comportamiento rebelde, mientras ella como adulta ya debia encarar a todo el mundo. asi, solo acerto a asentir la cabeza de forma mecanica y se dirigio con paso lento hacia el hombre. cuando se hubo acercado, efrain le propuso que acudieran a tomar un cafe; que el queria "tratar" algo muy privado. esta acepto, ahora adivinando de que iba el asunto. asi, tras tomar un cafe, el le propuso que fueran amantes, al menos hasta que se separara de alicia su mujer. a la que sorpresivamente le habia pedido el divorcio, que esta habia aceptado de buen grado, sin rodeos y de una manera rapida e indiferente.  asi, el divorcio entraria en vigencia a comienzos de abril, segun le habian avisado los abogados y el notario. luego de aclarar y disponer ciertos terminos como amantes temporales efrain le propuso que fueran a  un departamento de soltero propiedad de Don Anselmo Frias, adminsitrativo del lugar y amigo  de infancia.  ubicado a las afueras de cuernavaca, a 2 km de la entrada a la region. julieta, no queriendo ser ridicula  ni aun verse como una joven  chapada a la antigua o solo antipatica opto por aceptar al hombre como su amante. el contrato estaria disponible  por unos 10 meses. segun ella cuando este le pidio su opinion acerca del enlace pasional, queria escapar al comienzo de dicha relacion, a lo cual quizas efrain hubiera aceptado sin mas. seguirian siendo solo educando y pupilo.  mas reconocio que ella tambien tenia cierta atraccion hacia el tipo y tras unos minutos de meditar dijo que si. esa noche no la habia olvidado del todo: estar entre los brazos inertes pero fuertes y calidos del hombre la excitaron, el probar aquel nectar sexual de un hombre entrado en años ahora le hacia sentirse en el quinto cielo. cuando hubieron terminado el coito entre susurros, desvario y gemidos de pasion ella termino dormitando a su lado, el abrazado a su figura joven, femenina, pequeña y desnuda. efrain reconocio que su cuerpo no era perfecto pero era aceptable, digno de chupar y gozar. mientras ella aun sentia en su pecho la sensacion de aquel imponente, rudo y enorme cuerpo de un tipo que bien podia ser su padre. habia tenido incluso desde sus inicios en el colegio, pequeñas experiencias de sexo, breves encuentros libidos:  primero  habia sido   con Julio, un chico de 19 años que era su compañero de exposiciones y apenas le conocia; ella contaria unos 23. esa primera  vez le parecio toda una sensacion en su momento.  aunque el chico no habia hecho mas que refregarse  excitado, montado sobre ella, o viceversa. cada que lo recordaba le causaba gracia. luego, sucedio con otros dos chicos,a quienes aun recordaba solo sus rostros. mucho despues llego esteban, pero el no le habia pedido por principio el acto. ahora, ya no sentia esto como una experiencia juvenil, amorfa. esto era nuevo, algo que sus padres si llegaran a saber la verdad negarian inmediatamente con la cabeza; que quizas provocaria que le retiraran el saludo por un tiempo o bien que la mandaran lejos. pero como nadie lo sabia excepto sus compañeras de andanza, se sintio a salvo. como casi siempre, pues su padres le habian dicho que lo ocurriera dentro y fuera del liceo era cosa suya. que ella ya podia arreglar su vida. eso habia provocado que rara vez les pidiera consejo.  aunque le daban consejo, otras veces ( la mayoria)  sacaban a relucir la frase con tono aprehensivo, o solo monotono: " ya eres una mujer adulta, con deberes: no necesitamos protegerte mucho".  asi, ella ya se habia resignado a esa consigna, en parte porque tenian razon, en parte porque sus intereses los consideraba de un adulto. asi, esto era lo que adelaida ignoraba. la chica entro al aula ante las miradas curiosas y recelosas del grupo en turno. efrain alzo la cabeza: se hallaba revisando un proyecto que debía dar con unos alumnos la próxima semana.  al mirar aquella cara joven, semi - infantil y temerosa acertó a decir:

- ah! tu debes ser la hermana de julieta, adelaida. en que puedo servirte?- esta se acerco unos pasos, entrego el proyecto y con una vocecita un poco insegura,  apenas audible para el hombre, afirmo:

 

- vengo para entregarle este... escrito. julieta me aseguro que usted lo necesitaba.- efrain, sabiendo como se sentia la chiquilla y un poco divertido con su actitud temerosa opto por tranquilizarle, sonriente casi:

- bien. gracias, adelaida. lo tomare en cuenta.  puedes retirarte a tu casa, si quieres. - ella dijo que debia marcharse, hizo una reverencia y se retiro  con el prefecto. los estudiantes una vez terminada la situacion regresaron a su labor. a excepcion de enrique, un alumno que se hallaba cercano a efrain:

- oiga, profe: se trata de  Elizabeth adelaida, la hermana de julieta. ¿como le habrán dejado entrar? la chiquilla se veía algo temerosa ante usted. se nota que apenas si se conocen como hermanas. creo que se trata de su media hermana.

 

- si enrique; me  acabo de enterar.- afirmo este, con un gesto al estudiante con la mano de " dejalo, no me interesa por ahora"- en fin,  la chiquilla sigue en la  mocedad.   si su hermana  ya es un adulto, no es raro que apenas si se conozcan.  en fin, no es mi asunto por ahora.- asi, la clase siguio su ritmo. mientras adelaida planeaba ahora como inventar pretextos para acudir diario o quizas, un dia expresarle lo que sentia. asi serian amantes incondicionales. le habian fascinado ese mostacho, el cabello negro que brillaba una vez posada la mirada sobre este, sus ojos oscuros. no sabia que le fascinaba en definitiva del profesor de julieta. si, era cierto. habia muchos señores de su  mismo rango, edad, tipo: que ella solo habia visto en la escuela o sin llamarle la atencion en la calle. que incluso  solo le veian como una chiquilla inexperta  y algo malcriada.  asi, ignoraba porque su pecho joven albergaba dicha sensacion.  con este  razonamiento, siguio trabando planes en su mente mientras se dirigia hacia su casa. la emocion era tal que no tenia ganas de asistir al instituto. en fin, ya se las arreglaria con sus padres si estos se enteraran de su desercion y le llegaran a reprender.   pero opto siempre por asistir a la escuela y torno sus pasos hacia la parada del autobus. mas seguia en pose dudosa. mientras tanto de lejos, un hombre maduro le miraba a traves del cristal del aula en  la que hacia unos pocos minutos habia entrado la jovencita. Era efrain, ni mas ni menos. sin saber como ni cuando, ahora le atraia la chica jovenzuela: rubia, pequeña y quizas con un encanto femenino, dulce y candido aun; que las chicas a quienes les daba catedra no poseían ya, lógicamente. en resumen, al hombre le habia fascinado su cuerpo en formación; pequeño,  firme, amorfo y mediano. de las jovencitas en fase de probarlo todo o casi todo...  asi, sonrió breve, con una expresión pastosa en el rostro y continuo con su labor de educando. ¿ seria este el comienzo de un circulo amoroso; el arribo de julieta al Triangulo de las Bermudas?   o mas bien, el comienzo de una historia de odio, pasion y crimen.  tal vez quizas. continuara. dkma.

 

 

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