Tan sólo con pensar que me marcho y quizás no vuelva a tener esa mirada que transmite la esencia de mil sonrisas, un escalofrío recorre mi cuerpo.... No quisiera que esto se convirtiera en una carta de despedida, tan sólo en una escrito de cariño hacia la persona que día a día, palabra tras palabra, me ha robado el corazón... Cuando cada noche, cierro los ojitos y me dispongo a dormir, tu imagen da vueltas en mi cabecita y me gustaría poder entrar en esa fantasía y darte el mas sincero y caluroso de los abrazos...pero me es imposible...me consuela saber que, tras pasar la noche, quizás el día me regale un dulce beso de tus labios, pero pensar, q estaré lejos y no podré hacerlo me parte el alma en mil pedazos. ¡Cuánto me gustaría oír de tu boca ciertas palabras que sé que nunca dirás! ¡Cómo quisiera que huyeras conmigo y dejaras atrás el oscuro pasado para dar lugar a un mundo de color y de ilusión junto a mí!...Ahora mi vida aquí muere para comenzar otra algo más lejos de aquí, entre nuevas personas, desconocidas, que quizás un día se conviertan en grandes recuerdos, o sigan junto a mí hasta que este juego al que dicen vida, termine...pero el futuro es así, no sabemos lo que vendrá después para alejarse de nosotros en menos de un suspiro...Quizás esté loca por querer salir de estas cuatro paredes y correr hasta que me fallen las piernas...pero es lo que realmente ahora necesito y nunca oí a nadie decir que seguir los impulsos fuera delito...Así que, esto es todo... me marcho lejos para olvidar los daños, pero siempre recordaré los buenos momentos...siempre estarás en mi pensamiento, en mi corazón....si algún día decides ir en mi busca...sigue mis huellas...pisaré con todas mis fuerzas para que queden marcadas en el camino y quizás así, puedas llegar a mí...Siempre te estaré esperando y, no dudes, en que e recibiré con los dos brazos bien abiertos.... Te quiero.... Un beso...