Cuando terminó de bajar las escaleras, el muchacho vio frente a él una enorme escuela pero antes de poder hacer nada una criatura delgada y alta le dijo que era bienvenido al Instituto Dielista de Entrenadores y seguidores, el muchacho le pregunto a que se referia y la criatura le dijo:
-es una especie de supervivencia entre nosotros, si se entran en duelo una de las criaturas con otra la que pierda será un seguidor del entrenador pero una criatura que tenga dos o mas seguidores no podrá ser seguidor a menos que él lo rechace y le diga adiós a sus seguidores, por lo que veo eres nuevo ¿verdad?
-es que yo... soy un humano,... no pertenesco aqui -explicó el muchacho.
-ya veo, asi que eres humano, pues dejame decirte que la única forma de regresar a tu mundo es siendo el mejor entrenador del mundo.
-pero como?...
-el encargado de los terrenos de donde acabas de venir te dara dos huevos para que los cuides y los conviertas en tus seguidores.
continuara