Este era un judío que le llegó una citación de Hacienda y se fue a hablar con su asesor. ¿Cómo crees que debo ir vestido para la ocasión? le preguntó al asesor y éste le contestó, ponte el traje más viejo y arrugado que tengas,los zapatos más desgastados, no te afeites en un par de días y despeinado.
Salió, no muy convencido, del consejo que le acababa de dar el asesor y por ello buscó al rabino para contrastar opinión. Al escuchar el problema le contestó ponte el mejor traje,los mejores gemelos, limpio y aseado. El personaje en cuestión se quedó sin palabras y le comentó al rabino, acabo de venir de hablar con mi asesor y me ha dicho justamente lo contrario a lo que el rabino le contestó:"esto era una mujer que iba a casarse y le pregutna a su madre, mamá ¿cómo he de vestirme para mi noche de bodas? y su madre le dijo ponte la ropa interior más ásperas con más botones, lazos y tupida que encuentres, enseña muy poco. La hija salió a buscar a su mejor amiga le preguntó lo mismo y le contestó ponte lo más pequeño, transparente y suave que encuentres."
El judío le dice al rabino, pero bueno, ¿eso que tiene que ver conmigo? a lo que el rabino le contestó, amigo mío lo que quiero que entienda es que se ponga lo que se ponga follar igual se lo van a follar.