En la prisión, ubicada en la isla de Ellesmere, la más septentrional de todas las islas del archipiélago ártico canadiense, viven aquellos criminales, que el mundo por sus grandes pecados ha desterrado a sus confines, tal vez con el animo de olvidar y de proteger a la sociedad de estas bestias que representan lo mas oprobioso de la especie humana. Estos delincuentes están custodiados por un grupo no menos despreciable de guardianes que por sus faltas cometidas, son enviados como castigo a cumplir la misión de cuidar a estos reos.
Ser condenado a la prisión de Ellesmere, representa perder la condición de ser humano, las familias de estas pobres almas son obligadas a borrar de un solo tajo su historia, las fotografías, los recuerdos, los nombres, incluso hasta su identidad es borrada, no se nombran nunca mas, esperando que el olvido con su manto implacable desaparezca de la mente de todos la existencia de estos entes que son referidos por los pocos que se atreven a mentarlos como los imperdonables. Nos preguntamos todos porque simplemente la sociedad no los ejecuta y soluciona de esta forma este problema; la sociedad simplemente no se permite aliviar de alguna forma el sufrimiento de estos infelices con una muerte rápida, puesto que la máxima ley sobre la que se apoya todo el edificio jurídico, exige el respeto de la vida de cualquier ser humano, así este haya perdido esta condición al ser enviado a la prisión de Ellesmere.
La isla de Ellesmere, por su ubicación padece de uno de los climas mas agrestes del mundo, en donde la temperatura la mayor parte del año esta bajo cero grados centígrados lo que la convierte en una tumba blanca y helada, los presos reciben una ración diaria de comida que apenas suple las necesidades caloríficas básicas del día, fenómeno que hace que la mayoría de los reos parezcan cadáveres, con una palidez y falta de energía. La vida de los reos transcurre en confinamientos continuo en celdas de 10 metros cuadrados, espacio en donde se duerme, come, trabaja y se sueña con recuerdos de una vida ya finalizada.
Los encuentros colectivos de los reos se reducían a una salida al patio a la semana a hacer algún tipo de actividad física, en un patio cubierto en donde se aprovechaba para intercambiar elementos del mercado negro como algún recorte de periódicos o revistas viejas, elementos que son completamente prohibidos por el ministerio de justicia mundial; puesto que así como el mundo se olvida de los imperdonables, este quiere que cualquier información del mundo existente no llegue a los confinados en la isla. No es raro hallar entre los imperdonables personajes que detuvieron su tiempo el día en que fueron enviados a la prisión del olvido, nombre con el que se conoce informalmente a la prisión de la isla de Ellesmere.
La prisión del olvido se creo hacia el año 2.145 por el ministerio de justicia mundial, como medida de contrarrestar los altos índices criminales que azotan al orden social, hoy en día después de 30 años de funcionamiento la prisión cuenta una población de 500.000 reos y unas 500 personas entre guardias y directivos, la mayoría de los reos son de sexo masculino, sin embargo el número de mujeres imperdonables es superior a las 200.000, la vida de un reo se reduce a satisfacer las necesidades básicas, alimento, abrigo y descanso, no hay manifestaciones diferentes a las anteriores, la labor de la prisión se encaminaba a acabar con todo lo humano de estos infelices, reducir las manifestaciones de los imperdonables a las necesidades básicas y por eso las condiciones de cobijo, descanso y alimento estaban diseñadas para alcanzar apenas los umbrales de satisfacción, los imperdonables, se alimentaban apenas lo necesario para no morir de hambre y para estar pensando casi todo el tiempo en comida, lo mismo sucede con el descanso y con el abrigo, en resumen los imperdonables nunca podrán pensar en otra cosa que no sea en estas tres necesidades, para un desgraciado de estos, lo estético, lo místico, lo fraterno no existe, simplemente su mente no se detiene a pensar en estos aspectos.
La prisión Ellesmere, es una mole de concreto compuesta por diez bloques de 50 pisos de alto cada uno en la distribución de un panóptico, en donde los guardianes observaban día y noche a los 500.000 criminales confinados en ella, los dejaban descansar apenas lo necesario, les reducían el frio apenas lo necesario, los alimentaban lo necesario, solo con el inhumano fin de deshumanizar a estos seres.
Los guardianes de estos reos se turnan en 3 turnos de 8 horas diarias, vigilan que los reos trabajen 19 horas diarias en tareas que no demandan ningún tipo de actividad intelectual, como ensamblar piezas fáciles e inservibles para maquinas descontinuadas ya, actividad que busca llenar de monotonía el mayor tiempo posible de los reos, el trabajo es repetitivo, tedioso y desesperante, no se permite a nadie variar el proceso, esto hace que los días sean iguales, la comida es una y la misma todos los días, el sabor agregado artificialmente incorporado a una mescla balanceada entre carbohidratos, proteínas, grasa y minerales que apenas permitía sobre vivir, que debe ser ingerida en 30 minutos, ni uno menos, ni uno mas y se servía a la misma hora todos los días.
Las celdas son grises como los uniformes, paredes, utensilios, la luz era blanca, esta encendida las 24 horas motivo por el cual no se sabe si era de día o de noche, en el sonido ambiente estaba encubierto por un monótono silbido que no modulaba su frecuencia, esta prohibido adornar o cambiar cualquier elemento del mobiliario de la celda, los castigos se encaminan hacia la reducción del bienestar, es decir reducción de comida, descanso o abrigo, motivo por el cual a veces los reos se hacen castigar para cambiar la rutina, sin embargo la maléfica mente que diseño la prisión del olvido, calculo esto y diseño los castigo iguales y con el tiempo el reo se dan cuenta que el castigo también llevaba a la monotonía y los imperdonables ya no buscan los castigos, cuando se descubre a un preso leyendo algún recorte de periódico o revista este es destruido en el acto y en presencia del imperdonable para que vea con sus propios ojos como su tesoro se pierde irremediablemente.
Los suicidios en la prisión del olvido no están permitidos, pero hay una ley tasita del cuerpo de guardia de no evitarlos, parece ser la única concesión que se hace a quienes deciden acabar con esa vida vacía, los guardias se hacen los de la vista gorda frente a los suicidas, razón por el cual el índice de suicidios es muy elevado.
Los imperdonables se identifican con un número, por que así como la idea es borrar a estos desgraciados de la memoria colectiva de la humanidad, al llegar a la prisión del olvido el pasado del imperdonable, su identidad, su vida, su pasado se cubre bajo un número que lo identifica entre 500.000 seres más, sin pasado, sin presente y mucho menos futuro.
Cuando los guardianes evidenciaban que algún reo sueña, ya sea por palabras que se pronunciaban o movimientos involuntarios, lo despiertan con un sonido, interrumpiendo el sueño, en la prisión del olvido estaba prohibido soñar; los imperdonables, aprenden de alguna forma, a evadir lo anterior soñando sin pronunciar palabras, reír, llorar o moverse.
A la edad de los 10 años los niños y niñas son sometidos a una prueba de personalidad y otra que mide la inteligencia, ambas desarrollada por el equipo de psicólogos y psicómetras del ministerio de justicia, dichos instrumentos miden elementos como la autonomía, independencia, creatividad, acatamiento de normas tipo de inteligencia y coeficiente; si el niño o niña puntúan bajo en estos elementos, son promovido a seguir en el proceso de formación de ciudadanos del mundo, si por el contrario puntúan alto en estos factores, de inmediato son retirado del sistema educativo, puesto en observación por un año, analizado su historial familiar y si en este año no cambiaban estas tendencias, entonces es retirado del proceso de ciudadanía y es deportado a la prisión del olvido en donde el mundo se olvidaba de el y el germen de la independencia, la creatividad, el ser diferente a los demás se extirpaba de raíz, pues el mundo de hoy demandaba de ciudadanos que piensen igual, actúen igual, se comporten igual y que acaten sin cuestionamiento alguno las normas que los dirigentes del mundo han diseñado para el mantenimiento del estatuó quo, tan necesario para el mantenimiento del orden establecido y el buen funcionamiento del orden social y político.
En este mundo los sujetos autónomos, con ideas propias, creativos, autónomos son una amenaza, la mas grande al orden social, los artistas, los espíritus libres y creadores, los libres pensadores deben ser eliminados de inmediato de la fas de la tierra, el mundo recuerda que por sujetos como estos la sociedad y el establecimiento había tenido crisis en el pasado, crisis que son una amenaza y que buscan hacer cambios profundos en el orden social, cambios que no estaba permitido ahora que los dirigentes mundiales han entendido lo peligros y subversivo que puede resultar una idea innovadora o revolucionarla. La humanidad no puede darse el lujo de repetir errores del pasado, no pueden existir más genios como Sócrates, Platón, Heráclito, Parmenides, Jesucristo, Leonardo da Vinci, Marx y otros más que pensaron en el cambio. El mundo del año 2.175 es un mundo uniforme para todos y por eso solo hay cabida para los hombres y mujeres que acatan lo establecido como borregos.