Mi relación con Elisa había mejorado milagrosamente, ya no discutíamos y teníamos planes a futuro como comprar una casa más grande con piscina cuando gane el juicio, soñar con ver a Martita nadando sin avergonzarse ante sus amigos.
Elisa se volvió más comunicativa y su única curiosidad a satisfacer era saber que sucedió la noche del accidente, pero mi silencio hacia que desistiera en esperar mi respuesta. Era un secreto que no revelaría.
Como decirle a la madre de mi hija que intente matarla en ese accidente, algo tan nefasto como cortar los frenos con la mala suerte que ella salió ilesa.
¿Motivos? Sus celos, eran insoportables. Nuestra vida parecía una tragedia griega y pensé que se mataría esa noche pero lo único que conseguí fue que el coche quedara destruido.
Nada resulto como lo planeé, salimos todos ilesos. Apenas unos pocos moretones y el seguro no quiso pagarme los daños por lo tanto fingir invalidez fue la solución a mis problemas financieros ya que me declare en quiebra. Fue una desgracia con suerte el haber chocado contra el gerente del banco, el tipo venia de una fiesta con su amante no quería líos pagaría lo que sea por mi silencio.
Pero siempre en la vida hay imponderables que te arruinan la existencia. El inspector del seguro sospecho de todo cuando descubrió los frenos cortados. Todo terminó en una investigación y de imaginarme contando billetes pase a la cruel realidad de fingir en esta silla de ruedas.
El teléfono me saco de mis pensamientos, no atenderé deben ser los tontos de siempre tratando de darme el pésame.
Pucha aún no descifro el punto en la ventana y el tiempo se acaba.
Ay Elisa no eras tan tonta como creí, uf me dejaste una tarea difícil.
Que tarde gris en este Buenos Aires. Aun sus amorosas palabras retumban en mis oídos.
-Querido empecemos de nuevo, busca un trabajo olvida ya el juicio. Salgamos de esta miseria que nos alejo como pareja.
- No amor, no puedo dejar todo a esta altura de los acontecimientos, ya falta poco no te impacientes, por favor. El abogado llamará ya verás.
- Pero…¿Y si no llama querido que harás?
- Llamará amor, él llamará. No olvides que es el primer interesado en cobrar sus honorarios.
A partir de ese día Elisa no hablo más del asunto pero su actitud cambió. Consiguió un trabajo como traductora en una multinacional, me compró ropa, regalos, me mimaba todo el tiempo hasta tuvimos relaciones sexuales varias veces después de mucho tiempo.
El recuperar mi virilidad me hizo mucho más confiado, es increíble el poder de convicción que tiene una mujer en el sexo sobre todo si es la propia.
Se podría decir que con Elisa estábamos reorganizando nuestras vidas hasta era feliz a pesar de que dependía económicamente de ella y en el afán de cambiar la historia empezó mi obsesión por llamar al abogado todos los días por supuesto sin respuesta.
Una tarde mientras me afeitaba me descubrí una mancha en la piel, no le di importancia hasta que pasaban los días y ya tenia el cuerpo lleno de manchas combinado con un fuerte dolor estomacal.
De urgencia me llevaron a la guardia de un hospital público y después de hacerme varios estudios y análisis de sangre el diagnóstico fue lapidario. Envenenamiento por una sustancia desconocida derivada del talio.
Horas estuve tirado con fuertes dolores en la camilla del hospital hasta que el médico me reviso y lo abrume a preguntas entre el dolor y mi curiosidad por saber.
-¿Puede ser un veneno para las ratas lo que me enveneno doctor? –Pregunte con miedo-
- Es poco probable el talio no se usa en este tipo de venenos desde el 1900. Generalmente el envenenamiento por talio son frecuentes si usted trabajara en industria pero por cuestiones obvias no comprendo como llego a su organismo.
¿Moriré doctor? ¿Cuándo? ¿Cuánto me queda? Sé que son preguntas tontas que habrá escuchado cientos de veces pero yo quiero saber.
- No hay una certeza exacta en lapsos de tiempos a corto o largo plazo, pero si podemos mejorar su calidad de vida, al menos tratar que nos sufra y el resto amigo mío no esta en mis manos ni de la ciencia, sino de la fe que usted tenga.- Lo dijo de manera poco convincente que ni él lo creía.
- ¿Cómo logro mejorar mi calidad de vida? Doctor no quiero sufrir.
- No sufrirá si encuentra la forma de saber como llego el talio a su organismo, como lo ingirió, que cantidades, que proporciones y de ahí determinaremos el antídoto. Pero tampoco hay una certeza si así mejorará o empeorará. Puede mejorar su calidad de vida con buenos tratamientos, son costosos y aquí en este hospital no tenemos ni los medios económicos ni la tecnología amigo.