otro día más, me levanto para apagar mi despertador, y pienso "que flojera, de nuevo a la escuela, otro día más a soportar a los maestros y a sus tareas estúpidas" que flojera me da vivir. la tristeza me consume lentamente. con ganas de seguir acostada abajo de mis sábanas, sin querer moverme, con miedo de moverme. sin querer saber de nadie, teniendo miedo de salir de éstas cuatro paredes, de mi cuarto, de mi templo en el cual deseaba estar muerta, para no sentir nada, ni sentirme a mi misma, duraba horas asi, queriendo estar muerta. entro a la regadera, el agua tibia cae sobre mi cara, no puedo reaccionar. llego a la escuela, rodeada de adolescentes inmaduros estúpidos que se sienten adultos sólo porque saben fumar. cruzo la nube de humo de las decenas de cigarros encendidos, que parece una capa helada de niebla que sólo me amarga más, helada, como lo era todo lo demás. llego a mi pupitre, y aun no puedo lograr una sonrisa en mi rostro, aunque sea finjida. estoy harta de todo, del mundo, pero sobre todo de mí. quisiera salirme (aunque suene estupido e imposible) de mi misma, descansar aunque sea unos minutos de mi misma, flotar lo mas lejos que pueda y respirar aire nuevo, en el que no esté yo. tomando en cuenta de que ésta fantasia era un poco imposible, me siento en mi pupitre y bajo la cabeza para intentar dormir aunque sea 3 minutitos, antes de que llege el profesor. el ruido de mis demás compañeros hacen inútil mi intento de dormir, subo la cabeza y la luz del sol que entra por la puerta dilata mis pupilas, pero más aun, mis pupilas se dilatan al ver a la cosa más hermosa que había visto. unos ojos grandes, oscuros, profundos, al verlos sentía como me perdía en la oscuridad de ellos, en el misterio de su profundidad, sentí un vértigo al sentirme succionada por ésa belleza de ojos que estaba mirando, esos ojos en los que pierdes la noción del tiempo, la razón, la memoria, y a ti mismo. mis deseos de dormir habían desaparecido. no quería dormir jamás, prefería ver a éste chavo de mi salón que antes no notaba tanto, prefería verlo todo el dia, en vez de soñarlo, mi mente no tenía la capacidad de guardar ésa imagen tan hermosa, esos ojos, ésa sonrisa. éste muchacho era algo serio, no era ningún galan, no era el cuero del salón. no muchas muchachas del salón lo notaban. no era popular ni muy platicador. yo sentía cierto parecido con él, ambos siempre estabamos serios y mirando hacia el vacio, ambos teniamos un gran gusto hacia el rock, y ambos pareciamos estar tristes. mis deseos de morirme habían desaparecido. mi única motivación era verlo todos los días. tal vez si nunca hubiera volteado a verlo, a ver sus ojos y perderme en ellos...tal vez yo no estaría aquí ahora, tal vez ya hubiera cometido una estupidez y me hubiera suicidado. no conozco la razón por la cual estoy tan enamorada de éste muchacho, tampoco conozco la razón por la que siento esto tan intenso por él, sólo se una cosa, que éste muchacho con el simple hecho de tener los ojos mas hermosos del mundo y esa forma de ser tan misteriosa, con éste simple hecho, me salvó la vida, y él ni siquiera lo sabe............
ME ENCANTO TU ANEGDOTA....CASI TODOS LOS ADOLECENTES ME IMAGINO NOS SENTIMOS HACI SOLOS...SIN GANAS DE SEGUIR EL DIA A DIA...SIN GANAS DE ENFRENTAR.....EN TU CASO YA NO AHI UN BASI PUESTO K YA TIENES EL X K DE TU VIDA :D... Y COMO DICE EL SR. DEL 4 COMENTARIO HACERCATELE KIEN KTA Y ALLA QUIMICA ENTRE LOS DOS MUCHAS VECES LOS HOMBRES SON MUY TIMIDOS HASI SEAN LOS MAS DESMADROSOS DEL SALON....