Acabamos de añadir un vagón más al tren de nuestra vida. El tren corre inexorable hacía su destino.
Miramos a través de las ventanilla para disfrutar del paisaje, a veces es aburrido pero el tren sigue adelante, no se detiene, hablamos con los que comparten el viaje con nosotros o nos callamos.
A veces el tren va muy rápido y otras muy lento,depende de la estación en que debamos bajarnos para hacer un alto en el camino, depende de si buscamos o esperamos algo.
Pero aun dependiendo del maquinista que nos lleva a nuestro destino en nosotros está hacer el trayecto alegre o triste.
Alegremosnos de añadir un vagón más al tren de nuestras vidas.
Yo soy la que me meto en el vagon contigo y rompe a tocar Joan que voy a bailar quema quema con Joaquín. Muy hermosa la forma de hacer llegar el mensaje en este cuento. A veces va tan rápido. Este es el tren de la vida. En cada vagón quedan sueños, vivencias, hechos, gestas que acompañan a sus tripulantes. También quedan recuerdos de los que se bajaron en alguna estación.