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El Gallinero del Patio

EL GALLINERO DEL PATIO.
(Cuentos para mis Hijas.-5)

En los pueblos y ciudades pequeñas de cualquier pais de hispano-america, siempre vamos a encontrar crias de animales domesticos. Tal vez puedas encontar cerditos, conejitos, palomas, pajaritos en jaulas, patos que estan alrededor de canales, rios o lagunas. Tambien encontraras, perros, gatos, incluso caballos que estan, o bien tirando de carretones o carretas transportando gente o cosas, e incluso los puedes ver tan simplemente como para que puedas alquilarlos y darte un recorrido a caballo por las cercanias de la ciudad, por sus campos verdes y florecientes, para disfrutar un hermoso dia campestre en compañia de todos tus familiares y amigos.
Cuando yo tenia unos 8 o 9 años, en casa, mis padres no tenian ningun tipo de animalito, pero siempre a mi me llamo mucho la atencion el canto del gallo del patio de mi vecino, desde cerca de las cinco de la mañana comenzaba a cantar anunciando el amanecer de un nuevo dia, era de una raza de España y tenia un plumaje muy vistoso, lleno de coloridas y alegres plumas. Pues bien, un dia paso un Señor en bicicleta con una canasta de pollitos recien nacidos, todos muy amarillitos y piando a cada segundo. Los estaba vendiendo a veinte centavos cada uno. De la emocion de ver a los pollitos tan pequeñitos y tan vivitos, fui corriendo donde estaba mi papa y le dije:
- "Papa,papa,.. comprame dos pollitos para hacer una cria de pollos en el patio de casa. Quieres?".
Mi padre se sonrio al ver el entusiamo que yo tenia en ese instante y se dirigio al vendedor de pollitos, tenian tan solo una semana de nacidos en una incubadora. Por tan solo cuarenta centavos, comenzamos nuestro gallinero del patio.
Tuve que aprender que darle de comer a esos pollitos tan recien nacidos. Ponerle agua limpia todos los dias, cambiarlos para debajo de una sombra de un arbol para que estuviran fuera del calor del Sol. Al principio le dabamos maiz partido y arroz en grano, pero segun fueron creciendo, como era usanza en nuestro pueblo, les echabamos lo que quedaba de la comida para ellos en las tardes para que se fueran a dormir con el buche lleno, de todas formas tambien en las mañanas le poniamos maiz entero para su alimento de principio del dia.
Yo pensaba que uno iba a ser gallinita y el otro un gallito, por eso bautice a uno con el nombre de Tita y al otro lo llame Tito, pero no sucedio asi, ambos pollitos llegaron a ser gallinas, por eso tuve que cambiarle el nombre del segundo pollito por el de Tati. Este pollito despues que crecio y llego al tamaño de una gallina normal, desarrollo un plumaje bien hermoso, casi toda blanca y con plumas grises por distintas partes de su cuerpo, Tita, al contrario era toda color almendra y en la cola como un tono mas obscuro llegando casi al color marron. Para ese entonces, ya mi padre habia construido un cajon bien alto para que durmieran dentro de un cuarto de desahogo que habia en el patio y les hizo espacio para que no pasaran la noche a la interperie del clima y tambien para que se refugiaran en ese lugar de los animales salvajes que cazaban a los domesticos.
Cuando empezaron a poner huevos, fue tremenda algarabia de ver a las gallinas cacareando como dando el aviso de que habian logrado su primer huevito para descendencia de pollitos entre ellas. Los primeros huevitos que pusiernon ambas fueron un plato predilecto en el desayuno como huevo frito o en revoltillo, o como en una tortilla muy deliciosa que hacia mi mama, que le agregaba jamon, cebolla bien picadita y queso por encima, cuando casi ya estaba hecha.Mm,. deliciosa..! Hasta que en una ocasion, mi madre al abrir un huevo para freirlo en el desayuno me llamo y dijo:
- "Mira hijo, tuves ese puntito blanco que hay al lado de la yema del huevo?."
- "Si, mama, lo puedo ver, que es?."
- "Bueno a eso se le llama miaja, quiere decir eso que el gallo español del patio de al lado es el esposo de la gallinita y vamos a tener pollitos si les dejamos lo proximos huevos en su nido hasta que saquen los politos en unos cuantos dias. Quieres hacerlo asi?."
- "O si, claro, si eso es lo que yo deseo mucho, tener nuestra propia cria de gallinas en nuestro patio!."
Cuando llego mi padre del trabajo, el fue y entonces separo los huevos unos para la derecha y otros para la izquierda, porque las dos gallinitas como se habian criado juntas, tenian el mismo nidal para poner los huevos y despues de eso, a los pocos dias, se echaron las dos sobre los huevos, una al lado de la otra. Solo salian del nido para tomar agua y comer en las tardes. Entre las dos tenian mas de veinticuatro huevos,..! Pudieran nacer muchos pollitos.!
Todos los dias en las tardes cada vez que las galinitas salian a comer yo iba muy apresurado a ver si ya habia salido algun pollito de los huevos, pero tuve que tener paciencia pues despues de las tres semanas fue que empazaron a aparecer los pollitos. Eso fue en una mañana, yo no tenia clases en la escuela, era sabado, cuando mire para el patio, ya la Tati estaba fuera de su nido cacareando en tono muy bajo alrededor de ella. -"Eh, que le estara pasando a la gallina?" pense para mis adentros. Me vesti rapidamente y sali a ver que le ocurria. Cuan grande seria mi sorpresa.! ya tenia a su lado cerca de diez pollitos todos amarillitos algunos blanquitos de los mas bonitos y hermosos. Enseguida entre a la casa gritando le conte a mi mama lo que habia visto en breves instantes anteriores. Entonces me abrace a ella y le comente: "Ya tenemos cria de pollos, nuestro gallinero del patio."
Ella emocionada, me respondio: "No hijo, ese no es nuestro gallinero, ese es tu gallinero, porque por ti fue que tu papa compro esos dos pollitos y mira lo que has logrado. Ven vamos a tomarles una foto."
Dicho y hecho. Mi mama tomo su camara de fotografia y fuimos tras la gallina para sacar la primera foto de nuestra cria de pollitos. Pero otra gran sorpresa llegariamos a tener entonces. Cuando llegamos al nidal, Tita tambien estaba fuera del nido como con otros nueve o diez pollitos piando a todo su alrededor. Sin demora alguna mi madre tomo las fotos, pusimos las dos gallinas juntas una al lado del otro rodeadas de la veintena de pollitos y siguio tomandoles fotos. Entonces, nos acordamos de los huevos que quedaban en el nido y hacia alli nos dirigimos. Otros tres mas estaban rompiendo el cascaron con su diminuto pico, pero como cerca de cinco o seis no lograron nada, se habian echado a perder. Aun me recuerdo el numero de la primera sacada de pollitos de Tita y Tati: veinticuatro pollitos nacidos en el patio de mi casa!.
Ese fue uno de los dias mas recordados por mi, aun lo tengo grabado en mi mente y parece ser que fue ayer, nunca se me borrara esa emocion de niño que tuve al criar mis dos pollitos y comenzar a lograr nuestra cria de pollos en el patio de casa.
Al pasar el tiempo los pollos se fueron reproduciendo, la cria fue aumentando. El gallinero hubo que hacerlo mas grande, teniamos huevos frescos a diario, se hizo costumbre de todo domingo en la tarde cuando la familia estabamos todos en casa, comer pollo al horno, en salsa, fricase, con arroz, que mi madre hacia un arroz con pollo de "chuparse los dedos", en fin, se hizo una cria tan inmensa que cuando mi mama salia a darles la comida en la tarde, ella solo tenia que tocar con la cuchara el cardero del arroz que habia quedado y se le enracimaban toda la cria a su alrededor que despues para salirse de entre ellos, casi no podia caminar por la cantidad tan grande que la rodeabam por completo.
Esta ha sido una de las mayores satizfacciones personales que he logrado tener en mi vida. Despues, con el tiempo, creci, me gardue en los estudios, me case, me mude de ciudad, de pais, y ahora no estoy ni cerca del gallinero del patio en la casa de mis padres, pero el recuerdo imborrabale del tiempo vivido jugando y criando a Tita y Tati, permanecera en mi mente para siempre.
Toda esta historia, te puede demostrar, que aun en las cosas mas pequeñas por las cuales tu te decidas a hacer en tu vida, si las haces bien, con amor y con sinceridad, Dios recompensara tus ezfuerzos y de por seguro lo lograras, al igual que yo pude lograr desde siendo un niño el gallinero del patio.
Datos del Cuento
  • Categoría: Infantiles
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