Edson fue creciendo en cuerpo y más rápido aún en mente. Disfrutaba mucho de ir al colegio, aprender, hacer travesuras, nuevos amigos, explorar mil lugares en tantas aventuras con sus fieles amiguitos.
Yurimaguas fue pareciéndole cada vez más interesante fue internándose en la selva pura, bella y profunda para visitar las chacras de amigos, vecinos y amigos de don Julián; también iba aprendiendo a comer y a conocer los deliciosos potajes selváticos, a comer diversas carnes del monte,exóticas frutas, en fin...pronto se vió en otro colegio.había terminado transición y pasó a la Primaria en el Colegio Pre Vocacional de Varones Nro. 151, su maestro era don Manuel Seopa, un personaje muy paciente, divertido,tenía una grán vocación para enseñar y su entrega por los niños se veía reflejada en la inmensidad de afecto que prodigaba a sus pupilos y estos engreidos correspondían a tanto afecto con su rápido y motivador cumplimiento de tareas.
Con él era fácil el aprender, Edson era como siempre inquieto, inteligente pero...a ésto hay que agregar que Don Manuel fue atrayéndolo hacia las artes en franca, sutil e inócua competencia con el niño Magno Pinedo- hijo del Director del Colegio,¿en qué consistía el
reto?,pues...simplemente a salir dentro del aula y las ceremonias escolares a cantar, recitar, actuar y todo lo que podía hacer un niño en la edad de la curiosidad y motivación por aprender.Esto lógicamente no afectaba a ningún niño, por cuanto era un aula donde la mayoría tenía un grán entusiasmo por la educación con el grán Manuel Seopa.
El tiempo fue pasando y la primaria fue
desarrollándose de lo mejor, Edson iba aprediendo a jugar trompo, canicas, también a hacer trabajos manuales usando una madera muy especial "la topa" o palo de balsa, era muy grande pero demasiado liviano y suave,excelente para moldearlo con cortes usando navaja de afeitar, cuchillo y vidrios, lo que Edson y sus compañeros hacían era maravilloso: aviones, barcos, casitas, animales, etc, etc., en esto sí Edson tenía dificultades porque al parecer no manejaba de manera diestra la mano, el mejor era Rubén, artista paciente y creativo, sus modelos eran tan lindos y diversos que todos admiraban a él y sus bellos trabajos, el maestro Seopa no dudaba nunca en ponerle la mejor nota,¡veinte!...y, todos deseaban imitarlo.