El espiritismo, ¿nos beneficia o nos perjudica?

(Relato Religioso para adultos. 83).

Personas de todo el mundo recurren al espiritísmo, ¿por qué despierta tanto interés el espiritísmo?. ¿Es peligroso?. De ser así, ¿cómo puede protegerse una persona?.

Se ha definido espiritísmo como “la creencia de que una parte de los seres humanos que es espiritual sobrevive a la muerte del cuerpo físico y puede comunicarse con los vivos, normalmente a través de un médium”. Algunas formas de espiritísmo son consultar a un médium, preguntar a los muertos o buscar agϋeros. También lo es la popular adivinación, medio por el que se intenta averiguar el futuro o adentrarse en lo desconocido con la ayuda de los espíritus. Otras formas de adivinación son la astrología, la quirománcia, consultar una bola de cristal, interpretar sueños y leer las cartas del tarot.

En 1998, un libro sobre cómo comunicarse con los muertos se hizo tan popular en Estados Unidos que enseguida encabezó la lista de éxitos de ventas del periódico The New York Times. Hace algunos años, en Moscú, los psíquicos y las sesiones de espiritísmo causaron furor entre los politicos y los hombres de negocios, quienes pagaban altas sumas de dinero por sus consultas. En Brasil, las telenovelas de temas espiritístas atraen a un gran número de espectadores. Para muchos africanos y asiáticos, la práctica del espiritísmo es algo tan común como hacer trueques en el mercado. ¿Por qué recurre tantas personas al espiritísmo?. Mucha gente acude a los espíritus en busca de consuelo tras la muerte de un ser querido. Quizás reciban a través de los médium cierta información especial que parezca provenir de los muertos, lo que les convence de que la persona amada está viva y de que comunicarse con ella les ayudará a sobrellevar su pérdida. A otros los atrae el espiritísmo porque han oído que los espíritus pueden ayudarlos a encontrar la curación de sus enfermedades, escapar de la pobreza, triunfar en el amor, resolver problemas matrimoniales o conseguir empleo. Pero también hay gente que recurre al espiritísmo por simple curiosidad.

Por último, millones de personas practican el espiritísmo porque se les ha enseñado que este es, según un experto en el tema, “una religión suplementaria, paralela al cristianismo”. La situación religiosa brasileña es un buen ejemplo de tal coexistencia. Brasil tiene el índice más alto de población católica del mundo, pero como señala el escritor Sol Biderman, “millones de fieles encienden velas en más de un altar sin advertir ninguna incompatibilidad”. De hecho, el semanario brasileño ‘Veja’ informa de que el 80% de los que frecuentan los centros espiritístas de Brasil son católicos bautizados que también asisten a misa. Es más, incluso algunos clérigos participan en sesiones espiritístas. Así pues, es comprensible que muchos creyentes piensen que Dios aprueba el que se acuda a los espíritus en busca de consuelo y guía. Pero, ¿Dios lo aprueba realmente?.

Si le han enseñado que algunas formas de espiritísmo sirven para comunicarse con los buenos espíritus, quizás se sorprenda saber lo que la Biblia dice al respecto. Advierte, por ejemplo: “No se vuelvan médium espiritístas y no consulten a pronosticadores profesionales de acontecimientos, para hacerse ‘inmundos’ por medio de ellos”. [Levítico capítulo 19, versículo 31, también puede consultar 20:6 y 27]. De hecho, la Biblia asegura que quienes practícan espiritísmo son “algo detestable a Jehová”. [Deuteronomio 18:11,12]. ¿Por qué?. Un examen cuidadoso de lo que las Escrituras dicen sobre uno de los principales rasgos del espiritísmo, la supuesta comunicación con los muertos, nos dará la respuesta. Veamos:

¿Hay vida después de la muerte?. Al contrario de lo que mucha gente cree, la Palabra de Dios, la Biblia, enseña que es imposible comunicarse con los seres queridos que han muerto. ¿Por qué?. Pues bien, para hablar con los muertos, estos han de estar en realidad vivos, algo de ellos debe sobrevivir a la muerte. Algunas personas sostienen que el alma sigue viviendo cuando el cuerpo humano muere. ¿Es eso verdad?. El relato bíblico de la creación del hombre dice: “Jehová Dios procedió a formar al hombre del polvo del suelo y a soplar en sus narices el aliento de vida y el hombre vino a ser alma viviente”. [Génesis 2:7]. ¿No enseñan a caso estas palabras que el ser mismo es un alma y que no tiene un alma inmortal que sobrevive a la muerte del cuerpo?. De hecho, las Escrituras aseveran: “El alma que peca.., ella misma morirá”. [Ezequiel 18:4]. “Los vivos tienen conciencia de que morirán, pero en cuanto a los muertos, ellos no tienen conciencia de nada en absoluto.., no hay trabajo ni formación de proyectos ni conocimiento ni sabiduría en el Seol”, el sepulcro común de la humanidad. [Eclesiastés 9:5, 10]. De modo que según la Biblia, el alma no es algo que sigue viviendo tras la muerte del cuerpo y, por lo tanto, algo con lo que  podemos comunicarnos los vivos.

He aquí dos ejemplos de biblístas respetados que han llegado a la conclusión de que el alma muere. El teólogo canadiense Clark H. Pinnock observó: “Este concepto (de que el alma humana es inmortal) ha influido en la teología por muchísimo tiempo, pero no es bíblico. La Biblia no enseña que el alma sea inmortal por naturaleza”. Así mismo, el investigador británico John R. W. Scott indicó: “La inmortalidad del alma, y por tanto su indestructibilidad, es un concepto griego, no bíblico”. (Para más detalles puede consultar también el relato bíblico titulado “Vida después de la muerte”).

No obstante, la gente recibe mensajes y oye voces y ve “fantasmas” que parecen provenir de los muertos. ¿De quiénes proceden realmente?. ¿Quiénes hablan?. La Biblia narra que un espíritu invisible utilizó una serpiente, de forma parecida a como un ventrílocuo emplea un muñeco, para comunicarse con la primera mujer, Eva, e inducirla a rebelarse contra Dios. [Génesis 3:1 al 5]. En las Escrituras se denomina a este espíritu, o ángel, “la serpiente original, el que es llamado Diablo y Satanás, que está extraviando a toda la tierra habitada”. [Revelación o Apocalipsis 12:9]. Dicho ser, Satanás, incitó a otros ángeles a rebelarse con él. [Judas verso 6]. De modo que estos ángeles maléficos, a los que se llama demonios, son enemigos de Dios. La Biblia muestra que los demonios pueden influir en el ser humano. [Lucas 8:26 al 34]. Así pues, no es de extrañar que la Ley d Dios diga: “No debe hallarse en tí nadie.., que consulte a un médium espiritísta o a un pronosticador profesional de sucesos ni nadie que consulte a los muertos. Porque todo el que hace estas cosas es algo detestable a Jehová”. [Deuteronomio 18:10 al 12]. Estos espíritus demoníacos son los que están realmente detras el espiritísmo. Entonces, es muy peligroso usar el espiritísmo. ¿Cuánto peligro corren los que pasan por alto esa ley de la Biblia y consultan cualquier forma de espiritísmo como indicamos al principio de este relato?.

La experiencia de un rey del antiguo Israel llamado Saúl nos da la respuesta. Debido al temor que sentía por sus enemigos, el rey Saúl acudió a una médium espiritísta y le pidió que se comunicase con el profeta Samuel, ya fallecido. Al escuchar la descripción que la médium le dio del anciano, Saúl supuso que se trataba de Samuel. El mensaje que recibió fue que el pueblo de Israel caería en manos de sus enemigos y que él y sus hijos estarían con “Samuel”, es decir, morirían. [1 Samuel 28:4 al 19]. ¿Cuál fue la reacción de Dios ante la decisión de Saúl de consultar a una médium?. Las Escrituras relatan: “Murió Saúl por su infidelidad.., y también por preguntar a una médium espiritísta para inquirir”. [1 Crónicas 10:13]. !Qué precio tan alto tuvo que pagar!.

De manera similar, las personas que acuden a los espíritus en la actualidad corren un grave peligro, pues la Biblia advierte que “los que practican espiritísmo” sufrirán “la muerte segunda”, es decir, la destrucción eterna. [Revelación 21:8 y 22:15]. Asi pues, evitar todas las practicas espiritístas es, evidentemente, el proceder más sabio y el que puede salvarnos la vida.

¿Que puede hacer la persona que esté relacionada con el espiritísmo?. Es necesario que tome medidas de inmediato para protegerse y proteger a los suyos de los espíritus malignos, los demonios. ¿Cuáles medidas?. Para ilustrarlo, ¿cómo defendería su hogar y a su familia de las ratas?. Después de eliminarlas de su casa, se desharía de lo que pudiera atraerlas. Sellaría las grietas y reforzaría las paredes a fin de frenar la invasion. Y si esta persistiese, quizás acudiría a las autoriades locales en busca de ayuda.

La persona puede oponerse a los espítus malvados y liberarse de la esclavitud a ellos de forma parecida. Observe el ejemplo de los cristianos de Efeso del siglo primero, quienes, antes de hacerse creyentes, practicaban el espiritísmo. Una vez que decidieron abandonar dicha práctica, tomaron tres medidas como en el ejemplo de las ratas, para protegerse del ataque de los espíritus inicuos.

La Primera medida, la Biblia relata: “Buen número de los que habían practicado artes mágicas juntaron sus libros y  los quemaron delante de todos”. [Hechos 19:19]. Lo que hicieron estos nuevos cristianos sirve de ejemplo para quienes deseen hoy oponerse a los espíritus malvados. La persona debe ‘deshacerse de todo lo que esté relacionado con el espiritísmo’. Pudiera tratarse de libros, revistas, historietas, videocintas, carteles, información extraída de páginas electrónicas y grabaciones musicales con un trasfondo espiritísta, además de amuletos u otros artículos que se llevan como “protección”. [Lea Deuteronomio 7:25 y 26, 1 Corintios 10:21].

Algunos años después que aquellos cristianos de Efesos hubieron destruído sus libros de magia, el apóstol Pablo escribió: “Tenemos una lucha.., contra las fuerzas espirituales inícuas”. [Efesios 6:12]. Los demonios no se habían rendido. Todavía estaban intentando ganarles terreno. Por ese motivo veamos la Segunda medida. Pablo exhortó a los efesios: “Pónganse la armadura completa que proviene de Dios para que puedan estar firmes contra las artimañas del Diablo”. [Efesios 6:11]. Su consejo sigue siendo válido hoy. Como la persona que intenta mantener limpia su casa de ratas, los cristianos debemos reforzar las defensas o “paredes” a fin de permanecer fuera del alcance de los espíritus demoníacos y sus maleficios. ¿Qué implica ésto?. “Sobre todo, -recalca Pablo-, tomen el escudo grande de la fe, con el cual podrán apagar todos los proyectiles encendidos de inicuo”. [Efesios 6:16]. ¿Cómo podemos fortalecer la fe?. Perseverando en un estudio de la Biblia. Haciendo esto, así como la firmeza de las pared depende mayormente de lo fuerte que sea su fundamento, la firmeza de la fe depende principalmente de lo fuerte que sea su base. El conocimiento exacto de la Palabra de Dios ayuda a fortalecer la fe. “La fe sigue a lo oído. A su vez, lo oído es mediante la palabra acerca del Cristo” [Romanos 10:17]. Puede sentirse libre de solicitar a cualquier testigo de Jehová un curso bíblico gratuito, que podrá recibir a la hora y en el lugar que más le convenga. El estudio fortalecerá su fe y usted se convertirá en un baluarte que le servirá de escudo protector contra la influencia de los espíritus inicuos. [Salmo 91:4, 1 Juan 5:5.]

¿Qué tercera medida tuvieron que adoptar los cristianos de Efeso?. Pablo les escribió a sus hermanos y les dijo qué debían de hacer: “Con toda forma de oración y ruego, (ocúpense) en orar en toda ocasión en espíritu. Y con ese fin, manténganse despiertos con toda constancia y con ruego a favor de todos los santos”. [Efesios 6:18]. Sin duda, ‘orar intensa y constantemente’ a Jehová Dios, por medio de Jesucristo, pidiéndole su protección constituye, como en el pasado, una medida decisiva y necesaria para protegernos de los malos espíritus. Es reconfortante saber que Jehová contestará sus oraciones y lo protegerá proporcionándole, entre otras cosas, el apoyo de sus ángeles. [Salmo 34:7, 91:2, 3, 11, 14 y 145:19]. Por lo tanto es de suma importancia seguir pidiéndole a Dios: “Líbranos del inicuo”. [Mateo 6:13, 1 Juan 5:18,19.

Recuerde las tres medidas para evitar cualquier forma de espiritísmo: 1) Deshágase de todo lo que esté relacionado con el espiritísmo. 2) Persevere en un estudio de la Biblia y esté dispuesto a solicitarlo a cualquier testigo de Jehová que conozca o vea en su área. 3) Ore intensamente y con frecuencia a Dios por su ayuda y protección. Usted puede lograrlo y es fundamental que después de conocer a Jehová Dios y la verdad bíblica, confíe plenamente en él, se someta a su autoridad y obedezca sus mandamientos. Si lo hace, Dios lo protegerá simpre que recurra a él por ayuda, empleando su nombre personal en sus oraciones y estrará muy agradecido a Dios por haber encontrado la verdad que lo libertó de la esclavitud.- Juan 8:32.