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Categoría: Religiosos

El profesor ateo

" Dice el necio en su corazón; No hay Dios. Se han corrompido,hacen obras abominables; No hay quien haga el bien"

SALMO: 14:1



María Magdalena caminaba con una sonrisa a piel de labios por la orilla del lago que estaba detrás de su casa. Era un valle impresionante, rodeado de pequeñas montañan que hacían fila, una detrás de la otra. Su padre había comprado aquellas tierras en su juventud, cuando era un hombre fuerte y saludable. Recordaba las palabras que él le dijo en su último cumpleaños:

___Mira, Magda... nunca vendas este lugar... es un regalo de nuestro Dios... se lo pedí en muchas ocasiones cuando pasaba cerca...Mira Dios, tú dices que todo lo que se te pida en nombre de tu hijo con fe, tu responderás...

El viejo no sabía, cuántas veces se detuvo frente a la enorme ceiba... y debajo de esta clamó y reclamó en aquel lugar...Cuando ya su fe le fallaba y pensaba que todo había sido inútil, apareció el dinero y aquella reliquia pasó a sus manos...

Todos los fines de semana Magdalena visitaba a sus padres. Estudiaba en la Universidad de Puerto Rico, brillante, estudiosa... sería una extraodinaria doctora... Siempre le decía a su padre:

___Estudiaré y haré todo lo posible por curarte el asma que tanto te ha atormentado...

Ahora recordaba que el viejo se había muerto antes de que terminara su carrera. Aquello era un paraíso, allí sentía paz interna, escuchaba a los pájaros cantar, disfrutaba de la lluvia, del arcoiris, de las noches estrelladas y en las mañanas podía correr la ladera y encontrar fresas frescas y deliciosas.

En la gran roca, que estaba bajo el flamboyán, meditaba... recobraba la fe perdida cuando miraba el espectáculo de la naturaleza y escuchaba la voz de su padre y de su madre hablándole, con tanta pasión de Jesús,... era como si lo conocieran de toda la vida... a veces lloraban y reían leyendo las historias de la Biblia.

Era tan distinto allí, sentía que era una nueva criatura, respiraba alegría y recobraba su fe en su Creador... No entendía por qué, qué daño le había hecho Jesucristo al profesor de filosofía... aquel hombre no pasaban cinco minutos cuando empezaba a ridiculizar a los alumnos que tenían creencias en un ser inteligente llamado Dios y la emprendía contra "aquel maldito libro negro que tantas tragedias había causado a la humanidad"... y aquellas palabras despectivas en inglés:" God is dead", "la religión es el opio de las naciones", " yo tengo un primo hermano... el mono"... soy producto de la evolución y no de la creación mientras trataba de enseñar los residuos del rabo del mono que tenía al terminar la columna vertebral...como prueba que el ser humano todavía está evolucionando...

Mientras recordaba pensativa en aquel hermoso atardecer sobre la gran roca reía, cantaba, lloraba... necesitaba de sus viejos...

Pero aquella imagen del profesor y sus burlas le comían su fe como una rata devora los papeles... cada pensamiento, cada idea sobre Dios era malchitada por las continuas burlas y afirmaciones de aquel ateo sin conciencia... en fin, decía...

" Con su insistencia a la negación me ha empujado a buscar más de cerca su presencia"
y concluía que aquel hombrecito, sí, creía en Dios... cría en la negación... también exiten los números positivos y negativos...así que Dios tenía dos formas de existencia, la afirmación y la negación y ningún ser humano podía escapar de Él...

Estaba tan feliz... recordaba aquella ocasión en que el pedante instructor llegó vestido de negro, hasta se había pintado el cabello del mismo color, porque sus canas habían desaparecido...se sorprendió que les diera los buenos días... y en forma sarcástica les dijera:

___¡Dios los bendiga en esta tan preciosa mañana!

Recordaba cuando, con autoridad , ordenó que se cerrarán las puertas y ordenó que apagaran las luces del salón. Una inmensa oscuridad se apoderó de la sala y sólo se escuchaba la risa irónica de aquel ser despreciable y aquel desafío que hizo temblar a Magdalena y a todos los cristianos y no cristianos que estaban allí reunidos...

___¡Si es cierto que ese Dios de ustedes es tan poderoso y ustedes tienen tanta fe...¡vamos, pidánle que haga que las luces vuelvan a iluminar el salón¡

El silencio secuestró al grupo, que al escuchar aquellas palabras quedó desconcertado...

Pasaron unos minutos... ¡silencio!, de pronto aquel lugar quedó iluminado...la cara del profesor no tenía expresión... estaba mudo...
no dijo nada... Fue cuando una de las alumnas se levantó... caminó lentamente hasta el escritorio del profesor y expresó:

___¿Sabe profesor?... Dios me dijo...
¡Levántate, camina y prende esas bombillas!

Ah, también me dijo que me diera de baja de su clase porque usted es un necio...


Fin


POSTDATA

Fórmula para determinar la existencia de Dios dejada por la joven sobre el escritorio del profesor.


Dios= (+ x -)(-) o (-x-)(-)
(+)) (-)
existencia no existencia

Note mi amado profesor: Qué el factor común en ambas expresiones es negativo. Por lo tanto la mayor afirmación de Dios es su negación...

y otra cosita: ¡Esta ecuación me la entregó un ángel cuando usted ordenó apagar las luces...

Firma: Jesucristo y Carolina
Datos del Cuento
  • Categoría: Religiosos
  • Media: 5.08
  • Votos: 61
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Comentarios


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2 comentarios. Página 1 de 1
alejandra
invitado-alejandra 10-01-2004 00:00:00

es un cuento muy lindo, y a la vez realista, cuantas veces nos encontramos con personas que deseean desmoronar nuestra fe y nunca lo van a lograr porque el jamas nos deja y siempre se encuentra a nuestro lado para ayudarnos a salir adelante en los momentos más dificiles de nuestra vida. por ultimo hay una frase que dice: en ves de etiqueterte como cristiano, testigo o budista, comportate como lo haria cristo, jeova o buda

luis jesus
invitado-luis jesus 16-10-2003 00:00:00

respetuósamente le digo que en efecto ese profesor era ateo y necio, o sólo necio, como usted prefiera. También supondrá que otra persona pueda escribir un cuento justo al revés de éste. Y que ateo, etimológicamente, es negación de dios. Hasta aquí de acuerdo, pero lo que ocurre es que asímismo existen unas personas que no son ateas en sentido literal, sino que símplemente son conscientes de que dios es un hermosísimo personaje de ficción,( necesario tal vez, o no.) De todos modos le ruego que vea mi comentario con la bondad que pretendí al enviárselo. Un saludo cordial.

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