Cuando llega el verano en la parte del mundo donde hace calor los niños se preparan para ir a la playa o a la sierra de vacaciones y las hadas se preparan para acomparñarlos en sus juegos y velar por ellos.

Las hadas no vienen todas del mismo lugar, algunas vienen del país del hielo y son las que están nadando junto a los niños y cuidando de que no se ahoguen; dentro de las piscinas tienen el color azul del agua y nadie las vé, pero algunas veces las delatan las burbujitas que hacen al estornudar ya que les molesta muchisimo el olor del cloro. Las que se bañan con los niños en el mar tienen un tono verdoso y adoptan formas de algas, conchas nacaradas, he incluso caballitos de mar.

Las hadas que vienen de las montañas y los valles floridos están en el campo, el campo es para ellas como su segunda casa, están entre árboles y flores y los insectos y los pájaros son sus aliados. Por eso niños cuando estéis en el campo, no hagaís daño a las libelúlas, ni a las mariquitas, y tampoco a los pájaros porque son los ayudantes de las hadas, podeís jugar con ellos pero nunca les hagaís daño porque no querreís poner tristes a las hadas ¿verdad?.

Cuando las hadas están tristes lloran tanto que a veces aún en verano llueve torrencialmente y puede haber inundaciones.

En las noches de verano si mirais al cielo vereis que hay más estrellas que nunca y es que las hadas suben al cielo a dormir junto a las estrellas y su luz se duplica al reflejarse en ellas.

Y...COLORIN COLORADO ESTE CUENTO SE HA ACABADO.