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Ya empiezo a estar en ese momento. Ese momento en el que todo lo que se piensa, se habla y se siente, figura en tiempo pasado.
Pero estoy contento, aunque ya no tenga casi nada, con todo lo que tuve.
Me acuerdo de Ana. Cómo la quise. Tanto como me fue posible. Nadie hubiera podido más.
No había para mí otra tierra santa que la que sus zapatos llevaran.
Nunca nos resignamos a vivir por la superficie de las cosas como hace el viento en el desierto. No nos vivimos el uno al otro con un navegar cutáneo, quedándonos en la epidermis de la vida.
Fuimos al adentro de la sangre, al bombeo arrogante del corazón. Construimos escaleras al Olimpo y nos divertimos expulsando a los dioses de sus tronos, como dos iconoclastas de insolente adolescencia. Teñimos el paisaje con nuestra propia pintura, con las manos, con el pelo, con la lengua, con el pecho, con el alma, embadurnados de libertad ilimitada.
Sabíamos que podíamos morir en cualquier momento y no teníamos miedo.
Sabíamos que estábamos naciendo constantemente en cada segundo, en cada risa, en cada beso, en cada batalla, en cada pasión.
Quién le pondría freno a un cometa. Quién ataría a un sueño. Quién habría capaz de borrarnos y decir que no existimos ella y yo en ese tiempo.
Y ahora ya estoy en éste, convertido a fuerza de vaciar, en un envase de escasísimo contenido, con más ratos tristes que contentos. Pero gracias a Ana retengo la facultad de vivir intensamente igual lo dulce que lo amargo. Se trata de no pasar por encima de las cosas.
Se ha de bucear en todo y sentir, sentir, sentir. Que no se puede estar un poco vivo o un poco muerto. Si se está triste se ha de ser el más triste del mundo, y si alegre, el más elegre.
Ana me dijo que para sentir a medias tintas, es preferible ver la tele.
Por cierto, dónde estará ella en este momento, después de tanto años.... Tal vez frente a un ordenador sonriendo, si es que se acuerda de mí.
Me encantó, me gusto el principio... Me encantó me gustó la historia. Me encantó me gustaron estas tres frases;-Quién le pondría freno a una cometa, quien ataría a un sueño. -Quién habría capaz de borrarnos y decir que no existimos, ella y yo en ese tiempo. "Y por supuesto el final" donde el piensa en Ana...Y se pregunta si se acordará de él imaginandosela sonriendo, en frente del ordenador"me encanta este final". Un saludo de lucy-a