Paso los minutos mirando el telefono, esperando escuchar su sonido, esperando tus palabras.
Ya está terminando otro día, y me vuelvo a mi cama triste y cansada, hoy tampoco tuve noticias de tí.
Hoy por primera vez me he planteado la decisión de seguir hacia delante sin tí, de dejarte en el camino, aunque sepa que con ello dejo parte de mí.
Los recuerdos que hace meses eran los que me mantenían la esperanza, hoy se han convertido en cristales rotos bajo mis pies, en espinas clavadas en mi piel. Estoy cruzando la barrera de la esperanza, y comienzo a pensar que no volverás a mí.
Yo, que en mi mente había vivido tantas cosas contigo, que soñaba con algún día realizarlas, yo ,sigo sóla.
Pienso una y otra vez sí estarás con ella, si tus manos se posarán en su cuerpo, sí en algún momento te acuerdas de mí; y llego a la conclusión de que pensar en tí, eso que en otro tiempo fué algo agradable, torna en tristeza, en desolación.
Tus recuerdos me arrancan la piel a tiras, dejando mi corazón desnudo y desvalido ante tanto desamor.
Sería imposible intentar olvidar tu risa, tu dulce sabor.
Sería imposible pretender creer que nunca te amé, que fuistes sólo un capricho.
Podría vivir sin tí, pero no estaría viva.
Podría soñar sin tí, pero serían pesadillas.
Podría amar sin tí, pero mis manos lucirían vacías.
Corto pero intenso :) De esos relatos que o bien salen de los tópicos, o bien surgen del corazón. Un beso, VET