A cazar va el lince,
a cazar como solía,
va cruzando los senderos,
y va por todos los terrenos.
largo camino que lleva recorrido,
y el que le queda por recorrer,
canta la canción su estomago,
de que es hora de comer.
cría de conejo que ve a lo lejos,
piensa, con esto almorzar podré,
iré volando hacia ella,
y después me la comeré.
llega el lince a donde esta su víctima
más vale comerse a una cría,
yo que soy lince,
que pasar hambre un día.
puedo comerte,
no puedes contra mí luchar,
eres pequeño
y te voy a devorar.
salto tras salto
brinco por brinco,
sale corriendo el joven conejo,
con tanto ahinco.
Queda el lince solo,
solo y descompuesto,
de cazador,
ha perdido supuesto.
ved que si se es pequeño,
igual uno puede triunfar,
con ahinco
puede al grande ganar.
Así suele ocurrir a veces, al mejor cazador se le va la presa...Bonita fábula, bien enfocada, con moraleja incluida. FELICITACIONES en mayúsculas. Por cierto, bienvenida a éste interesante género. Cordial saludo... Alejandro.