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Categoría: Misterios

LA MUJER

La vi salir del teatro, y ya más cerca, no era como la imaginaba, era más vieja... Parecía ser de aquellas que ya no les importa nada en especial y se entretienen en algún trabajo para no recordar; de aquellas que visitan alguna iglesia para purificarse y asegurarse un espacio en el cielo...
Cogí a la jovencita en mi brazo y la saqué del coche, y caminamos juntos persiguiendo a la mujer. No quería acercarme a la vieja demasiado, pero la tenía asida a mis ojos, ya que después de tantas horas y días y meses de, buscarla y encontrarla y seguirla, ya casi hasta conocía el sonido de sus pasos que la arrastraban hasta llegar a su casa, ubicada en un edificio en medio de la ciudad, en la zona bohemia de París, el bunquer de los artistas...
Siempre caminando con la joven, recordaba la primera vez que ella entró a mi oficina. Me contó que venía de muy lejos, desde el otro lado del mundo; me dijo que necesitaba encontrar a un ser muy querido; yo la escuchaba, como hago con todos mis clientes, y, con la experiencia que tengo, me di cuenta de su penetrante sinceridad... Me mostró una foto de la mujer que buscaba y algunos detalles interesantes.
Así empecé la búsqueda que duró cerca de un año de ininterrumpido de trabajo; lo cierto es que mis honorarios son altos, pero siempre he sido en algunos casos muy sentimental, y por eso, el dinero con el pasar del tiempo pasó a ser algo secundario... El mismo hecho de encontrar a la mujer me apasionaba. Principalmente porque no era cualquier persona. A medida que me adentraba en el caso, me enteraba que aquella mujer era un verdadero misterio. Sí señor. Encontré datos de ella regados por diferentes países, y en cada uno con diferentes nombres; parecía como si estuviera escapando, o persiguiendo a algo, o alguien...
Fue una suerte cuando un día, paseando por el centro de París creí reconocerla caminado por la calle con un libro bajo el brazo en dirección al Conservatorio de Arte; siguiendo aquel presentimiento, la seguí a cierta distancia, y descubrí que era la persona a quien buscaba... Averigüe en el Centro, su actual nombre y actividad, pues la información que conseguí, a través de mis colegas en los diferentes países era que hizo de todo; desde cortesana en Italia, monja en España, cantante en Alemania... hasta empresaria en Portugal. Y ahora en París era profesora de piano en el Conservatorio por más de dos años... En verdad era un personaje muy interesante que motivaba mi curiosidad personal.
Algo en la mirada de la joven que tenía a mi lado me inquietaba, pues a todas las preguntas que le hice, ella eludía todas las respuestas; por ello, dejé de insistirle pues no era mi incumbencia... Había veces en que pensaba que era su hija, sobrina, o hija de algún conocido; en fin, para no angustiarme más, dejé de hacer conjeturas...
Ya estabamos cerca del edificio en donde vivía la mujer, y esperamos a que entrara; la vimos saludando al portero y luego subió a su piso, que era el 4to. Yo, ya había conversado previamente con el portero, y después de mostrarle mis credenciales, junto a unos cuantos francos, me dio el pase libre para que cuando llegue el momento de entrar, no hubiera ningún problema de enfrentar a la vieja con la joven...
Entramos y subimos al piso de la mujer. Tocamos el timbre y escuchamos su voz preguntando: “¿Quién es?”; Le respondí que era un agente de la policía y que deseaba conversar con ella un momento...
Apenas abrió la puerta, la joven se le puso al frente, y quedaron las dos pegadas como rocas a través de sus ojos, increíblemente no se soltaban las miradas, era como si una fuerza pasara a través de sus ojos... Produciéndose un silencio sobrenatural. Les comencé a hablar, pero ninguna parecía escucharme... De pronto, la mujer pegó un grito aterrador, cayendo al suelo como si el alma se le escapase, dejando como un trapo viejo a sus carnes... Mientras la jovencita, indolente, la seguía mirando, como si le estuviera succionando la vida con los ojos...
Me acerqué a levantar a la mujer, y cuando la quise despertar, me di cuenta que estaba muerta...
Volteé para decirle a la joven que pidiera ayuda, pero ella... ante mis ojos, comenzó a esfumarse...

Joe 26/09/03
Datos del Cuento
  • Autor: joe
  • Código: 4588
  • Fecha: 29-09-2003
  • Categoría: Misterios
  • Media: 5.49
  • Votos: 37
  • Envios: 4
  • Lecturas: 2788
  • Valoración:
  •  
Comentarios


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2 comentarios. Página 1 de 1
Yordana
invitado-Yordana 21-07-2005 00:00:00

Hace tiempo que no leia, aquí, algo que de verdad entrara en la categoría de un buen cuento, que invitara a terminar de leerlo. Se inicia con una acción y tiene un final inesperado;eso es un cuento que atrapa, acompañado de un interesante relato en el desarrollo del mismo. Unos mínimos errores, según lo que aprendí en un taller de cuentos al que asistí; pero en general muy bueno. FELICITACIONES.

sandra solis
invitado-sandra solis 20-07-2005 00:00:00

simplemente megusto mucho tu cuento, pero le falto algo asi como saber porque la buscaba o para que pero como quiera esta super tu cuento

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