¿Nunca has tenido la sensación de que algo que vives ya lo viviste antes?
Es como si vieses una película repetida pero que no recuerdas su nombre. Es extraño y difícil de explicar.
Siempre me ocurre esto cuando paso por una calle del pueblo viejo o colonial, mas aun al pasar frente a una casa, cuyo balcón me luce tan conocido y me causa tanta tristeza.
Al pasar el tiempo decidí no pensar mas en esta extraña sensación, total las explicaciones que me daban me parecían absurdas hasta hacen unas noches atrás.
Aun no se porque te cuento esto, creo que porque necesito que otra persona, en este caso tu, mi adorado lector, comparta un poco de esta locura y así no volverme loca. Perdona si abuso de ti, pero como amigo se que me leerás.
Hacen unas noches atrás empezó esta locura, soñé con la calle y casa en cuestión, pero esta vez yo vivía en ella.
Era en mi sueño una dama de los años 1800 o algo así, vivía allí con mi familia, mis padres y dos hermanos. Era de una clase social acomodada y al parecer muy rígidos y religiosos.
En mi sueño me sentí triste, con una inmensa tristeza como deben sentir los carentes de libertad. Claro como joven actual cuestione ese sentimiento, por que a pesar de estar soñando y ser yo aquella joven de mi sueño, mi conciencia o mi ser actual permanecía como espectador y critico de lo que soñaba.
Como te decía era una sensación horrible aquella otra yo era esclava de sus mayores y su corazón estaba prisionero entre el deber y no se que otra cosa, aun no conocía el motivo. Era extraordinario, amigo, aquel sueño era como si fuese espectadora y actriz al mismo tiempo.
Cada noche desde ese día soñaba con la misma historia, era como si viajase al pasado y como comprenderás estaba intrigada en conocer la historia y el porque de aquel dolor de mi otro yo.
Al tercer día me soñé sentada en un balcón, perdida la mirada en la calle y haciendo creer que leía un libro, por cierto religioso.
Si no me equivocaba el misterio de esa tristeza lo sabría pronto. Sentía como el temor la mantenía tensa y como la angustia o deseo de ver alguien la mantenía allí. Al poco rato vi acercarse un joven y al pasar frente a su balcón levanto su rostro, Rayos! Que mirada, cuanto amor en ella y a la vez cuanto dolor. Sentí como se agitaba mi corazón , podía escuchar sus latidos, era como si mil Ángeles me elevaran y nada mas existía, solo aquella mirada y su amor.
Entendí que algo se interponía entre ella o yo, ya no se, y el amor de aquel joven.
Soy una mujer de esta época y esto me confundió, ¿que podía impedir su amor?
Como comprenderás amigo tenia que despertar y muchas veces quedaba deseosa de volver a dormir para poder saber que pasaría, ya no me preocupaba los sueños repetidos, saber el porque carecía de importancia. Solo necesita saber mas y mas de aquella mujer que de alguna forma era como yo misma.
Así siguieron mis sueños, poco a poco descubrí el porque de tanta desdicha, ella rica heredera y el un humilde empleado de su padre, los padres soñaban con príncipes para ella y jamás permitirían ese amor.
La verdad amigo, que esa no podía ser yo, su docilidad me cansaba y hasta trataba que me escuchara y le gritaba, cobarde, pero nada, era una simple espectadora.
Hacen dos noches tuve el ultimo sueño y la verdad amigo que no se porque me dio tanto miedo, yo que me considero valiente desperté y no quise seguir soñando. Veras amigo el porque de mi miedo.
Como todas las noches soñé el mismo balcón,
La misma tristeza y el mismo pasar del joven, pero esta vez se detuvo y un papel le entrego.
En este decía: Esta noche a las 10:00 PM.
No me asusto esto, al contrario, pensé por fin hacen algo. Lo que me tiene así, es que la madre vio esto y fue a decirle al padre, este en su soberbia va a esperar al joven y cargo con el un arma. Yo como espectadora lo se, pero como la joven no. Tengo miedo amigo de volver a soñar se que algo terrible pasara.
Si, es lo que piensas, tengo dos noches que no me atrevo dormirme y me siento tan cansada.
Amigo, no se que seria sin ti, si no me leyeses tal vez ya estaría loca, es tan extraño todo esto, pero contártelo me hace sentir que no estoy sola, porque tu estas conmigo. Ahora te dejare un rato, necesito descansar, No me dormiré, solo
descansare un rato.
Perdona, Amigo, se que han pasado muchos días
No creas que te he olvidado, estoy muy enferma,
Amigo, cometí el error mas grande de mi vida...
Si amigo, me dormí y esta vez mi curiosidad pudo mas que mi temor.
Como imaginaba algo terrible ocurriría, soñé
Que salí silenciosamente a la calle, allí, en el callejón, esperaba mi amado, como le grite a mi otro yo, como le decía que la vigilaban, pero como te imaginaras no podía escucharme. Allí entre las sombras el padre esperaba y al unirnos entre risas y besos y decidir huir, el salió.
Ay!, amigo que horror tan grande, lo llamo ladrón, amenazo su vida y por mas que suplique disparo. Corrí a su encuentro, abrace a mi amado, no podía perderlo, era mi vida.
Oí el disparo, vi la sangre, sentí que mi corazón latía como loco caballo y que la noche mas negra caía entre los dos, lo escuche decir que me amaba, que sin mi no era nada y una luz cegadora cubrió su cara. Todo fue silencio, ya no oí el latir de nuestros pecho, el tiempo se detuvo y me vi correr en un túnel de luz y viajar por el espacio, sola, triste y perdida.
Desperté entonces amigo y desde ese día caí enferma y los médicos no encuentran cura para mi mal.
Ay! Amigo estoy muriendo, por eso sin que nadie sepa quise que supieras que no te he olvidado,
Amigo, ya no volveré a escribirte, fue terrible mi sueño, perdí a mi amado.
Pero mas terrible fue, que quien murió esa noche no fue el, fui yo. Soñé mi muerte, traspase el limite entre la vida y la muerte y esta amigo me reconoció, como la dama del callejón.