¿En qué está pensando?¡Sabe, no me interesa lo qué usted piense de este relato que voy a contar. Siempre he sido un hombre vertical, uno sincero que no tiene por qué esconderse detrás de una mentira. Me cansé de lo mismo, me cansé de esta vida rutinaria que siempre me ha mostrado la misma cara.¡Nunca he sido feliz!, pero creo que a usted tampoco le importa, a nadie le importa el sufrimientos de los demás, se alegran de los fracasos, de lo malo que a uno le ocurre.
Uno puede haber sido bueno toda la vida y por un error rápido viene la condena, el desprecio. Por eso no creo en la humanidad, no creo en los consejos, no me importa lo que los demás piensen de mí. Vine al mundo con todas la de perder y aquí estoy tadavía.
Mire, lo voy a decir algunas cosas de mi vida, no para que sienta lástima por mí, sino para pueda comprender por qué soy como soy. Siempre me agradó la afirmación de Unamuno:"yo soy yo y mis circunstancias".
Nací enfermizo, padecía de asma y el maldito doctor un día le dijo a mi madre:"llévese a ese muchacho a su casa, a fin de cuenta sólo vivirá unos días más".¡Ese infeliz que destrozó el corazón de mi madre murió pocos días después en un acciddente de auto! Mi madre no hizo caso y puso todo su empeño para que conservara la vida, es lo único que no le perdono, hubiera sido mejor que muriera a tener que vivir este tormento que me ha estado devorando por cincuenta años.
Usted sabe lo que es tratar de sobrevivir noche tras noche a un ataque de asma, es como si sacara un pez de la pecera.
Claro, perdone mi estilo, pero si no quiere seguir leyendo, no me importa, al fin y al cabo debo contar esta historia. Me perdona, debo poner un cd y prepararme una copa de vino. El día está un poco frío.
¡Ah! se me olvidaba presentarle a mi mujer!, hace tres días que no me dirige la palabra. Permanece inmóvil mirándome como si yo fuera un momstruo.
"La dulce dama que todo el vecindario adora!La ovejita santa que se le conoce como la gran señra, la esposa fiel, dedicada, inteligente.
Pero no me interesa hablar de ella, sino de mi historia.
Este vino está rico y la música genial. Me encanta Danny Rivera y su Amada amante. Paso horas y horas escuchando sus canciones. Es genial.
Me encanta"MI viejo""Yo soy un trabajador". Esa música llega al alma, no es como la basura que tenemos que escuchar por todas partes.
Bueno, así que desde el mismo día en que nací la miseria se hizo mi mejor amiga. A los ocho años me pusieron en un hogar, pues mi padre me amarraba y me tenía encerrado días sin comer, Me golpeaba tanto que cuando no lo hacía me hacía falta. Los golpes de mi padre los pagaban los animales. Echaba los sapos y los gatos en un saco, los guindaba de un árbol y los golpeaba sin piedad con un gran bate. Luego me sentaba en el piso para mirar como la sangre caía gota a gota.
Mi madre me llevó al siquiatra y mientras hablaba en privado con él, aproveché la ocasión para ahorcarle una pequeña perrita que dormía placentera debabo de su escritorio.
Pero gracias a Dios y a ese siquiatra mejoró mi condición y llegué a querer a los animales más que a mi mujer. Dejaba de comer para alimentar a mis gatos y perros.
Así que aquella vida de violencia se convirtió en una de amor, de piedad, de misericordia. Pude perdonar a mi padre antes que se fuera para las pailas del infierno, mi madre murió seis meses después de su muerte y quedé huérfano a los 20 años.
Me casé a los 25 con Laura, si con Laura la misma que hace tres días permanece en ese sofá sin emitir una sola palabra. Es muy duro, es asqueante que una mujer ignore de esa manera su marido. Si fuera que he sido un mal esposo, pero ella sabe que estos 25 años que he pasado junto a ella, jamás le faltó algo. La he tratado como a una reina, le he dado todo mi amor, me entregué a ella y jamás he puesto mis ojos en otra mujer. El hombre debe ser marido de una sola mujer me decía mi santo padre.
Tengo tres trabajos, y dos de mis tres cheques se los entregaba. Nunca le pregunté para qué los usaba, nunca pedí cuenta alguna, nunca le he reprochado nada.
Sin embargo, comencé a notar que ella era muy fría,apenas se dejaba amar, ya no me preparaba la cena como antes, salía mucho y no me decía para dónde iba. Pero nada de eso me importaba porque la amaba y no iba a permitir que el diablo sembrara la cizaña en mi mente. Los celos son como las ratas que deboran poco a poco.¡Dudar de mi reina!¡Nunca!
Ahora la contemplo. Viste un traje verde, sus piernas son exquisitas, sus ojos negros, su cabello largo. Permance en silencio, sentada, inmutable. Me pregunto qué estará pensando, si es que lo está haciendo.
Usted ve lo que le digo, he sido un miserable toda mi vida. He sido bueno y ella me paga con su indiferencia, a veces se burlaba, pero al verla reir la perdonaba.Su perfume me enloquecía, su caminar, su voz suave y dulce. Es una mujer sensual y a la vez recatada.
Perdone pero debo levantarme y caminar por la caa un rato. Hace tres días y noches que no he podido conciliar el sueño. No he podido asistir a mis trabajos y tampo he probado la comida. sólo he bebidio varias copas de vino.
Sabe jamás pensé que una invitación de mi jefe a mi casa me iba a causar tantos sufrimientos. Ese día estuvimos compartiendo casi toda la noche. Mi jefe quedó encantado y nos invitó a su casa de campo. Era una hermosa mansión, tenía una enorme piscina, un yate moderno, una hermosa motora y varios caballos de paso fino. Mi mujer se volvió loca de alegría. Desde entonces ella empezó a cambiar conmiigo.
Hace tres días pasó lo que debía pasar. Siempre el cabrón es el último en enterarse. Algunos compañeros habían tratado de alertrme, pero nunca le di importancia.¿Qué razón había para dudar de la mujer que había estado a mi lado por 25 años? Pero sepa usted que la verdad tarde o temprano sale a relucir. Nadie escapapa de la verdad. El engañ, tarde o temprano es descubierto.
Hace una semana mi jefe me comunicó que deseaba ampliar la compañia en otro país y que estaba contando conmigo para que fuera en su representación, ya que él no podía.
Cuando consulté con mi amada esposa, se volvió loca de alegría.
"Esta es la oportunidad para que tu progreses en la compañía" Así que decidí aceptar la propuesta de mi buen jefe.
Salí de viaje, pero algo parecía no cuadrar. La duda se apoderó de mí. No subí al avión y regresé sin avisar a mi casa en la noche.
¡Sorpresa!¡Allí estaba mi mujer en la sala de mi hogar pasándolas de maravilla! Esperé y volvi al aeropuerto. Logré encontrar otro vuelo.
En la amdrugada llamé al jefe para notificarle que el viaje había sido muy satisfactorio.
Sabe, cuando llegué a mi casa, mi esposa me recibió como nunca. La llevé al sofá. Le dije cierra los ojos, te traje una sorpresa.
Varias lágrimas brotaron de mis ojos cansados! Tomé el cojin del sofá, saqué mi pistola 45 y le maté.
Ahí está en el sofá, hoy se cumplen tres días. Ahí está silenciosa, ignorando mi presencia.