Que gusto que estén creciendo bien las plantitas del huerto porque todas las anteriores han sido fracaso tras fracaso primero el sol las quemo porque la capa de ozono esta totalmente dañada y no soportaron las plantas recién germinadas; Después las cubrimos con mantas de las que pudimos conseguir y crecieron un poco mas pero al regarlas con agua del río que esta negra y putrefacta se secaron porque se intoxicaron con las grasas que contiene el agua producto de los desechos acumulados por tantos años y tuvimos que ponerles agua de la que destilamos para tomar y como ya no llueve porque no hay humedad en la tierra que atraiga la lluvia (cuando llega a llover se viene una tormenta horrible producto de la acumulación de contaminantes en el aire y viene la lluvia negra, asida pero aun así la juntamos lo mas que podemos porque esta menos sucia que la de los ríos.
Hemos tenido que idear complicadas formas para almacenarla y conservarla porque si la dejamos a la intemperie el sol la evapora rápidamente tenemos que escondérsela al sol para que nos dure un poco más.
Las siguientes plantas se nos secaron porque no las protegimos del frió de las noches, las plantas un poco más grandes pierden el calor del suelo y tuvimos que levantar unos pequeños muros para que el viento frío no las dañe.
Y así cada nueva siembra nos fue dando experiencia hasta que poco a poco empezaron a salir hiervas entre las plantas cultivadas algunos dijeron que teníamos que eliminarlas porque no permitirían el desarrolla de la hortaliza pero otros que era mejor dejarlas para que sirvan de abono a la tierra que esta escasa de nutrientes por la erosión de las lluvias asidas.
Poco a poco la hierva es más abundante y la estamos cultivando también porque ya grande la cortamos y la dejamos secar al sol y la mezclamos con la tierra para que sirva mejor a las plantas comestibles, no sabemos ni de donde salieron pero de ves en cuando brota algún arbusto que no lo dejamos directo a los rayos del sol asta que crece y se ve maduro para que soporte la fuerza del sol y los regamos continuamente para que no le falte humedad y hemos encontrado la sorpresa que a su sombra poco a poco están naciendo hiervas que dejamos crecer para que su semilla llevada por el viento ayude a poblar de verde otras partes como nos a tocado en suerte a nosotros, pero siempre tenemos la precaución de usar como abono las plantas secas que la tierra esta necesitada de nutrientes.
Ya podemos comer de los frutos que tanto tiempo y trabajo nos a costado y poco a poco la vida esta siendo más placentera porque con este oasis en el desierto es más cómodo vivir.