Busqueda Avanzada
Buscar en:
Título
Autor
Cuento
Ordenar por:
Mas reciente
Menos reciente
Título
Categoría:
Cuento
Categoría: Sin Clasificar

La novia asesinada

Nadie sabe por que Lalo mato a Ana. Ana lo quería con una pasión desbordada que seria incapaz de engañarlo con otro hombre; una decepción amorosa no seria el motivo de su asesinato. El engaño quedaba descartado.

Todas las tardes después de salir del trabajo, Lalo visitaba a Ana hasta muy entrada la noche. Ana lo esperaba vestida con sus mejores trapos, y cuando él llegaba corría como loca por todo el patio de la vecindad topando con Lalo quien la recibía con los brazos abiertos.

Los que veíamos la escena, nos conmovíamos con tal suceso. Si no los hubiéramos conocido, sin dudar abríamos pensado que era una pareja que se había dejado de ver ya por un buen tiempo y que el destino los había vuelto a reunir.

La noche en que Toñita, la vendedora de pan, entro por la puerta trasera de la vecindad y hallo el cuerpo ensangrentado de Ana, grito con tanta fuerza, que hasta los perros y gatos empezaron a ladrar y maullar al oír su nítida y chillona voz con un tono de espanto y terror.

En un abrir y cerrar de ojos, en el lugar, que era un pequeño jardincito atrás de la vecindad, se encontraba el mundo entero. ¡Yo no se de donde salio tanta gente! Los policías, La cruz roja, los bomberos, la prensa, conocidos y desconocidos, agentes del ministerio público, niños, niñas y hasta un globero y un payaso que quien sabe de donde habían salido.

Una mujer sirvió de testigo. Para ser mas exactos, la señora de la tienda, doña nacha. Ella dijo ver visto a un hombre salir horas antes de dicho lugar.

Los demás, inquilinos de la vecindad, corroboraron el comentario y mencionaron que dicho hombre la visitaba todos los dias y se veían siempre a la misma hora y en el mismo lugar. Nadamás que nadie sabía por que la había asesinado.

Todo había acabado y el caso quedaba cerrado dijo uno de los agentes del ministerio publico. Al hacer las averiguaciones y presentársele los testimonios verídicos en ese instante, el caso quedaba resuelto y se había hallado a un culpable y responsable de dicho crimen.

– ¡Yo dije que aun no había pruebas suficientes para culpar a Lalo!...!Yo di…q…!

Todos se me quedaron viendo con un gesto de desprecio y enojo. Ante tal situación me quede callado. No dije nada más.

Hoy la prensa dice: Joven, en un arrebato de locura y desesperación le quita la vida a su amada. Este es el intermedio de la nota que mas me llamo la atención. El encabezado dice “La novia asesinada”

A esta hora, envuelto en la noche, me sigo preguntando yo, si Lalo mato a Ana y… ¿Por qué?

¿Se harían mas averiguaciones?.
Datos del Cuento
  • Categoría: Sin Clasificar
  • Media: 6.58
  • Votos: 40
  • Envios: 0
  • Lecturas: 4227
  • Valoración:
  •  
Comentarios


Al añadir datos, entiendes y Aceptas las Condiciones de uso del Web y la Política de Privacidad para el uso del Web. Tu Ip es : 3.145.45.223

0 comentarios. Página 1 de 0
Tu cuenta
Boletin
Estadísticas
»Total Cuentos: 21.638
»Autores Activos: 155
»Total Comentarios: 11.741
»Total Votos: 908.509
»Total Envios 41.629
»Total Lecturas 55.582.033