Una tarde de marzo estaba Carolina sentada bajo el nudoso tronco del árbol de su jardín, ella leía una revista que había sacado del cajón del escritorio de su madre, no entendía mucho lo que intentaba expresar los escritos de esa revista, pero luego de un momento se dio cuenta que lo allí expresado, era exactamente lo que sucedía con sus padres.
Esa noche la niña se fue temprano a la cama, luego de dar el beso de buenas noches a sus padres, subió a su dormitorio, cerró la puerta, y se quedó dormida.Luego de entrar en un sueño profundo, despertó al oír ruidos procedente del piso de abajo,se levantó sigilosamente, abrió la puerta, y se dirigió a la escalera para poder oír lo que sucedía en ese lugar, después de un momento reconoció la voz de sus padres, los cuales conversaban cada vez un poco más despacio, se acercó un poco más y comenzó a escuchar, su madre decía:-Mauricio, creo que es hora de que nos separemos-,y su esposo contestó:-Evelyn, tienes razón, nuestra relación ya no da para más,mañana mismo conversaré con mi abogado para hacerte llegar los papeles de la anulidad-.
Luego de un mes Camila se sentía ya un poco mejor,esa noche ella y su madre comieron juntas y conversaron sobre el divorcio, y se despidieron Camila un poco más feliz suvió a su alcoba y cerró la puerta.
En la primera mañana de abril, su madre subió a despertarla y cuando abrió la puerta su mundo se vino abajo, el cuerpo sin vida de la pequeña Camila se encontraba en el piso junto a una caja de pastillas.
Al día siguiente los médicos forences indicaron a la destrozada madre que su pequeña Camila se había suicidado por intoccicación al tomarse una sobre dosis de píldoras para dormir, que ella bebía habitualmente para tratar su depresión


FIN.