~En un pueblo lejano y tranquilo al norte de Colombia, con verdes montañas y gente muy amable, mi madre Carmenza y yo, un muchacho alto, de piel trigueña, ojos negros y de muy buenos sentimientos, vivíamos muy felices, aunque crecí sin mi padre siempre me hice responsable de los oficios del hogar, mi madre me quería mucho y muchas veces, aguanto hambre por darme un bocado de comida, yo estoy enamorado de la muchacha más bella del pueblo Cleo, éramos amigos desde muy pequeños, Cleo es tan alegre y encantadora que para mí fue inevitable, enamorarme de ella. Cuando cumplí la mayoría de edad, mi madre Carmenza murió de vejez natural, minutos antes de su muerte me dijo “ Hijo todo lo que hice fue por amor a ti “ no entendí que quiso decirme con esa frase, pero a pesar de todos los ruegos y suplicas que le hice en vida, nunca quiso contarme como murió mi padre, pues muchas noches llore porque nunca lo conocí, en el fondo de mi corazón sabia que ocultaba algo pero nunca le dije nada a mi madre para no hacerla sentir mal. Tiempo después Cleo me propuso que nos fuéramos a vivir a un barrio muy lindo en Bogotá, yo por estar junto a ella acepte gustoso, ya instalados y buscando trabajo en Bogotá, una tarde estaba cocinando para Cleo empecé a sentir una presencia extraña, creí que eran impresiones mías, después de unos días se hicieron más evidentes y frecuentes, no entendía que estaba sucediendo.

Crei que estaba loco siempre caminaba conmigo y me hablaba pero nunca entendí lo que quería decirme, trataba de evadirlo a cada momento pero seguía ahí. Los vecinos notaban mis extraños cambios de comportamientos, pues hablaba solo y caminaba asustado. Cleo muy preocupada me preguntaba que me pasaba y porque estaba actuando de esta manera, yo muy atormentado decidí desahogarme y contarle lo que me sucedía, ella no sabía que aconsejarme y solo rezaba por la paz de mi alma, ya que era muy creyente. Una noche llegue muy cansado de buscar trabajo y soñé con un hombre alto y acuerpado se acerco a mí y me decía “ soy tu padre y quiero que conozcas la verdad, busca mi tumba en el cementerio del pueblo y encontraras pistas para saber lo que verdaderamente sucedió” me desperté muy confundido y asustado, me daba miedo buscar la tumba de mi padre, entonces quise buscar a una gran amiga de mi madre para averiguar, sobre mi padre, ya que mi madre nunca quiso darme información de él. Cleo la conocía y sabia donde vivía, ese mismo día fui a buscarla, toque en su casa pero salió su nieta y cuando dije mi nombre, me cerró la puerta en la cara pero yo no me rendí y fui de nuevo al siguiente día.

Hasta que por fin quiso atenderme, doña Teresa dijo “A que vienes, que necesitas de mi, tu madre murió hace mucho” y yo un poco asustado con su tono de voz dije “tú fuiste la mejor amiga de mi madre, yo se que sabes que sucedió con mi padre y exijo saberlo” ella soltó el llanto y en medio de lagrimas comenzó a relatar “Tus padres eran muy felices, pero un día al pueblo llego una mujer muy hermosa que se enamoro de tu padre, pero él nunca le prestó atención porque estaba muy enamorado de tu madre y de ti, tu madre era muy celosa y un día no aguanto cuando vio que esa mujer entro en una choza con tu padre, se lleno de rabia, cogió un hacha y fue los asesino a los dos, el cuerpo de esa mujer lo voto al rio con mi ayuda, y al cuerpo de tu padre le dio santa sepultura. Tu madre llena de remordimiento quiso también quitarse la vida pero el gran amor que te tenía ella y tu padre hacia ti se lo impidió, ya sabes toda la verdad, eso era lo que querías” yo aterrorizado porque toda mi vida viví con una asesina en ese momento todos los cuadros se cayeron, se apagaron las luces y se oyó una voz tenebrosa que decía “Maldita Teresa esta verdad era un juramento de amistad me has traicionado, les juro que esto no va a quedar en vano” doña Teresa sabia que hacia lo correcto y se quitaba de encima un gran remordimiento. Ahí tome la decisión de regresar al pueblo a buscar la tumba de mi padre, cuando llegue , yo consumado en el dolor tome la decisión de acabar con mi vida no podía seguir viviendo , sabiendo que mi madre fue una asesina, pero tampoco quería una muerte trágica y dolorosa, por eso compre un veneno y me fui en busca de la tumba de mi padre para morir junto a él, después de tanto buscar encontré su tumba , en un rincón, sin flores y rodeada de mucho pasto, en su lapida decía ”Te ame con el alma y me traicionaste” , destape el veneno pero antes de tomarlo hice una pequeña oración su alma y por la mía en ese momento mi padre se me apareció con un aspecto muy triste y me dijo “Hijo, yo te di la vida, no quiero que por los errores de tu madre, acabes con la tuya, tienes una vida por delante aprovéchala, para eso te traje al mundo para que seas feliz; ahora que sabes la verdad mi alma descansara en paz, recuerda que siempre seguiré cuidándote y protegiéndote, TE AMO” muy triste por lo quería hacer, me di cuenta lo bueno que era mi padre y lo equivocada que estaba que estaba mi madre, con gran alegría dije “Gracias papá” el sonrió y desapareció, me regrese a Bogotá en busca de mi felicidad.

Cleo me esperaba con una gran cena, en la casa y decidí expresarle mis sentimientos y confesarle mi gran amor por ella, le pedí que fuera mi esposa, ella muy emocionada con ese brillo en sus hermosos ojos dijo “Claro que si, toda mi vida te he amado”. Después de meses de organizar la boda Cleo me dio la sorpresa de que estaba embarazada, yo muy feliz una noche antes de la boda, la lleve al lugar donde nos dimos muestro primer beso y también un collar para que me recordara en los momentos que no estuviéramos juntos. Yo lleno de amor le dije “Desde que jugábamos juntos en el parque del pueblo, me enamore de tu sonrisa, tu mirada, tu inteligencia, tu bondad, todo tu ser, eres la mejor mujer que he conocido en mi vida, te amo demasiado y quiero darle a nuestro hijo todo ese gran amor que mi padre nunca me dio” ella sintió esa confesión como una despedida pero no quería dañar ese mágico momento y prefirió callar, los dos llorando se besaron bajo la luna.

Por fin llego el día de la boda y Cleo se quedo esperando en la puerta de la iglesia, pues el misteriosamente desapareció y nadie nunca más, volvió a verlo y ella quedo muy desolada. Doña Teresa en la puerta de la iglesia al lado de Cleo siempre supo que el espíritu de su amiga Carmenza se había llevado a su hijo, en venganza por descubrir la verdad, pasaron los años y el hijo de Cleo crecía muy feliz sin un padre a su lado, Cleo sentía que la presencia del gran amor de su vida, estaba con ellos cuidándolos siempre.