Esto lo escribí en la playa este domingo mientras atardecia.
El último cafe...
- Voy a quedarme sentado a tu lado mientras estés triste.
- No lo digas por favor!... lo estropearas todo. Habían sido amigos toda la vida.
- Ire donde tenga que ir para rescatar tu sonrisa. Esa que llena mi corazón de alegría.
Navegare por todos los mares, volare por todo el mundo... si hace falta.
Hasta que encuentre esa felicidad, esa alegría que te han robado. Dejándote tan vacía...
Cuando la encuentre, entonces, solo entonces si tú quieres me quedare a tu lado... coseré tu felicidad a la mia. Ella intento hablar.
-Déjame terminar te lo pido...solo me iré si me dices vete... entonces solo entonces me iré. "Pero te amare el resto de mi vida".
Más de un sueño había enhebrado sobre esas aguas.
El mar y la brisa parloteaban alegremente.
Cuánta fantasía...cuantas declaraciones ficticias.
Cuantos cuentos le habían inspirado ese mar. "Fue más rica la fansía que la realidad, porque lo que se ve, pasa; mas lo invisible es eterno".
"Solo me iré si me dices vete... aquellas palabras se repetían en su cabeza. Entonces solo entonces me iré. "Pero te amare el resto de mi vida."
Miraba el mar. Ya nada sería como antes. El mundo entero parecía oscuro y meláncolico. Lloro hasta que no le quedaron más lágrimas. Él la amaba y ella no podía corresponderlo.
Aquellos ojos verdes llenos de bondad y alegría, ahora estaban llenos de tristeza.
- Tú... mereces algo más. Una princesa de cuento con un bonito vestido. Un mundo perfecto como tú.Una estrella que brille en un firmamento lleno de luz... para tí solo. Yo hace mucho tiempo que deje de brillar... vete, vete.
A veces pasa que nos invade una sensación de tristeza, que no podemos controlar. Aquel instante mágico, aquel silencio, aquella espera. Donde un si o un no puede llenar una vida de felicidad.
El día que me quieras...
lucy-a