Unas cuantas palabras mas para mi colección... veo pasar las horas frente a mi, mientras un sentimiento de culpa me paraliza, mis sentidos empiezan a dudar y el paso de los minutos esta a la orden, sin razón empiezo a llorar... una pequeña lagrima rueda sobre mi mejilla mientas mis ojos se hacen de miles de ellas apretándose para no salir...
El llanto es incontenible y mientras tanto no podía dejar de ver aquello que me aterraba tanto, la sangre estaba por doquier y aquel cuerpo tendido sobre la alfombra me aterraba cada vez mas...el sonido inconfundible de la ambulancia se hacia oír, paramédicos corriendo por todas partes es todo lo que recuerdo, después creo haberme desmayado.
-Bueno es todo por hoy Lena... la siguiente cita es para la semana próxima, te espero a las 4:30 ya que la Sra. Rossel vendrá a verme por que a seguido con problemas de alucinaciones, no olvides tomarte tu medicamento.
El doctor William era ya un hombre maduro pero al contrario de todos los doctores que había visitado era un buen hombre. Después de mi consulta semanal me retire a mis habitaciones, tenia ya año y medio internada en un hospital psiquiátrico y aunque al principio me fue muy difícil me he ido adaptando, aunque aun me cuesta trabajo tratar con gente de verdad enferma, en lo que a mi concierne “Estoy en buen estado y nunca debería de haber ingresado aquí”, mi madre y representante se empeñaron en encerrarme aquí... siempre sospeche que había una relación entre ellos y creo que lo hicieron para quedarse con mi dinero. Aunque no mucho, me hice de algo de dinero en mis días de escritora, lo tomaba como pasatiempo ya que para mi no era ningún trabajo, solo me sentaba frente al monitor y las palabras salían solas seguidas de historias fascinantes.
Mi madre siempre dijo que aquel incidente con Ira Parker me había marcado. El era mi mejor amigo y hacia tiempo que me había mudado con el a un departamento al centro de la ciudad, era como un hermano para mi. Un día llegue a casa como de costumbre después de hacer unos mandados, quede petrificada al ver su cuerpo tendido sobre la alfombra, fue todo un shock para mi...al parecer todo se debió a un ajuste de cuentas por una suma bastante elevada que debía a unos amigos. Afortunadamente detuvieron a los mal vivientes, esa ves seria la ultima que lo vería, al llegar su cuerpo ya estaba sin vida y la verdad aun no puedo superarlo. Tiempo después sin razón alguna mi madre me hizo ingresar aquí a la fuerza, y desde hace unos meses atrás nadie viene a visitarme, pase mi cumpleaños numero veintidós sola...
Hoy muy temprano por la mañana llego una camioneta con una inquilina nueva, al parecer esta bastante mal aunque su apariencia no lo demuestre, a sido traída a la fuerza por unos hombres al parecer de algún otro hospital. Rato después de haber salido del consultorio del Dr. William me la tope en el pasillo, al parecer esta algo desesperada de estar aquí, quise saludarla pero ni siquiera me lo permitió, salió corriendo con dirección al jardín. Creo que este será un día largo, ya que es día de mi terapia con Sussi, ella es una clase de orientadora, la verdad no se como describirla, pero sus clases por así decirlo son muy divertidas.
En ocasiones salimos del edificio y junto con algunos enfermeros vamos a pasear todos juntos, al principio me daba vergüenza que me vieran con ellos pero he llagado a aceptarlos, la ultima vez fuimos a comer un helado y a la pista de patinaje, si mal no recuerdo creo que hoy iré de nuevo, mas no se a que nuevo lugar nos llevaran hoy.
De nuevo la chica nueva... me a tocado de pareja para la ida a pasear, se ve que es algo alocada, y por lo que he podido darme cuenta su ingreso fue por conducta. Me ha planteado la idea de escapar en esta salida e irnos por nuestra cuenta, ya que sabe bien que nos encontraran pero valdrá la pena la escapada por el momento.
Las 3:20 eran ya y todo estaba listo para nuestra salida, los enfermeros nos dijeron que esta vez regresaríamos temprano ya que vendría Sussi. Las 3:30 ya... y las puertas del instituto se habrían para dar paso a nuestra distracción, subimos al autobús e íbamos en dirección a la plaza Kidman esta vez, al llegar Mischa ( la chica nueva) pidió permiso para ir al baño y así poder escabullirse, cosa que también hice yo. Salimos disparadas directo a la carretera, ahí Mischa pidió un aventón, no se ni como fue que terminamos en un bar... había muchos hombres de mala apariencia y era una clase de motel de mala muerte, la verdad en ese momento me arrepentí de haberle seguido el juego a alguien que posiblemente estaba mal de la cabeza. Sin embargo no puedo negar que es una chica muy divertida, llevaba algo de dinero y con eso compramos varios tragos, estábamos algo agotadas por el viaje así que decidimos rentar una habitación para descansar. Algo tomadas ya, caímos en la cama al instante, empezamos a platicar sobre de donde era, a que se dedicaba, entre otras cosas... su familia era de Filadelfia pero ella había decidido irse a vivir a Francia, al parecer su padre con sus influencias la había ingresado desde meses atrás a varios institutos como en el que yo estaba, pero debido a sus continuos escapes había ido a parar hasta a este. La razón no me la quiso decir, pero por locura no era, seguía con mi hipótesis que era por su conducta y tal vez no estaba tan equivocada.
El clima empezaba a empeorar, afuera se escuchaban truenos, relámpagos y un fuerte viento, por precaución decidimos pasar la noche ahí, al fin y al cabo de un regaño no nos salvábamos.
Eran las 11:27 y aun no podía dormir, Mischa hacia rato que se había quedado dormida y yo como de costumbre con mi insomnio... pasaron las horas y era ya la 1:00, aun seguía sentada frente a la ventana viendo a lo lejos el cielo nublado, esperando que la luz de alguna estrella pudiera brillar entre las nubes... era una perdida de tiempo así que me dispuse a intentar dormir, aunque sabia que solo daría vueltas en la cama. El techo era ya como un viejo amigo para mi, era mi fiel compañero en mis noches de desvelo y esta vez no seria la acepción. Mischa estaba en un profundo sueño, solo de verla la envidiaba... y de nuevo la lluvia, parecía que iba a ser una noche larga...
Un nuevo día, y al parecer había dormido unas cuantas horas después de dar vueltas sobre aquella cama, la mano de Mischa me abrazaba, al parecer alguien había tenido miedo en la madrugada. Nos preparábamos ya para partir sin rumbo fijo aun, por que para ser sincera no sabíamos ni donde estábamos, la gente del hospital a de ver pasado una larga noche buscándonos, y no era para menos, quien estaría tranquilo con dos enfermas mentales vagando.
Al salir de aquel lugar todo parecía desierto sin ningún alma a la vista y con solo el ruido de los carros pasando por el pavimento, habría que encontrar una manera de salir de ahí. Mischa como siempre encontró la manera... aunque nada segura como el resto de sus ideas pero serviría de algo. La idea consistía en escondernos en la parte trasera de alguna de las camionetas de carga que van a la ciudad, pero si nos llegaban a encontrar nos meteríamos en serios problemas. El peligro había pasado ya, nos encontrábamos arriba de una camioneta y con destino seguro a la ciudad de nuevo, al parecer nos habíamos alejado demasiado ya que era la tercera caseta que pasábamos y al parecer nos faltaba gran camino por recorrer....o, ¿es que acaso íbamos en la dirección equivocada??... preferiría no pensar eso...
Mischa dormía de nuevo, pareciera como si estuviera bajo el efecto se un somnífero, esta chica en verdad que dormía. Su cabeza estaba sobre mi hombro y me molestaba un poco, nunca he sido muy afectiva así que era algo incomodo para mi, cada ves se acomodaba mas y ya no aguantaba la situación, así que me quiete de ahí dejándola caer en un pequeño cerro de paja. Al caer despertó y al parecer algo aturdida...
El camión se detuvo y alguien se dirigía hacia la parte trasera donde nos encontrábamos escondidas, así que de prisa salimos corriendo sin importar si nos veían o no, nos adentramos en un espeso camino lleno de árboles y decidimos seguir por ahí para no ser vistas, al parecer la suerte estaba de nuestro lado, encontramos un pequeño refugio, mas bien parecía una cabaña algo descuidada y vieja al juzgar por su aspecto, echamos un vistazo a ver si alguien nos podía ayudar, pero oh sorpresa la nuestra, estaba abandonada. Era ya medio día y no teníamos nada en el estomago, el sol estaba muy fuerte y al parecer nos empezaba a afectar un poco, decidimos entrar y echar un vistazo dentro de la cabaña, todo estaba cubierto de polvo, al parecer no era visitada muy seguido, limpiamos un poco y nos acomodamos para pasar el día ahí, mientras un suave remordimiento a culpa pasaba por mi cabeza, me preocupaba el hecho de haber escapado, no era nada común en mí estos comportamientos, pero habría que hacer una excepción esta vez.
Salimos en busca de un poco de comida, aprovechando nuestra racha de buena suerte partimos en busca de alimento, encontramos un pequeño arroyo y aprovechamos para darnos un baño, era un poco vergonzoso ya que estábamos al aire libre, sentía como si todos me mirasen a pesar de que no había nadie... solo el dulce sonido del agua y el movimiento de los árboles se escuchaban alrededor. Al estar ahí tratamos de atrapar algunos peces, cosa que nos fue imposible, éramos muy civilizadas para tal labor, ese día comimos solo fruta que pudimos bajar de los árboles ya que resultamos pésimas pescadoras... la noche había llegado de nuevo y nosotras fuera del instituto todavía, cada vez me preocupaba mas, los doctores se han de encontrar vueltos locos buscandonos, sin duda estaríamos en un grave aprieto al ser encontradas.. este asunto ya se había salido de mis manos y para el colmo no sabia donde estábamos... (cOntInUarA...)