Capítulo 1: Un mundo paralelo
Había una vez un mundo mágico que era paralelo, al que se accedía por una cueva ubicada en un lugar de Reino Unido llamado Stonhedge. Una vez accedías por esas cuevas podías entrar a un mundo mágico. Era un planeta llamado Dorax. En él habían todo tipo de criaturas mágicas, desde licántropos hasta hechiceros. Aunque lo que más abundaban eran los hechiceros.
Los hechiceros convivían en perfecta armonía. Vivían en un mundo contemporáneo cómo en la tierra, pero entre mucha magia. Tenían su propia escuela de magos y brujas, Olsdoil. Olsdoil estaba en la cima de una gran montaña, se podía ir en dragón o se podía ir en un tren que llegaba hasta los pies de la gran montaña.
En esa escuela habían cinco cursos en el último hacían unas pruebas en las que se determinaban la clase de magos o brujas que eran. Eran pruebas físicas, en un laberinto. También he de decir que los magos de ahí no usan varitas, si no palabras y con sus propias manos ejecutaban los hechizos.
Pero no todo eran buenos magos y brujas, algunos se malograban cómo un malvado mago llamado Galbatian Tyranus. Tenía una larga melena rojiza y sus ojos eran cómo los de un gato, con la pupila alargada. Muchos le solían llamar el hombre gato. Era quien manipulaba a los seres de la oscuridad.
Ese mago llamado Galbatian Tyranus se apoderó del reino durante un tiempo pero hubo un niño que lo derrotó llamado Percival Stoner. Tuvieron un duelo y el joven ganó, y el resultado fue que exterminó a Tyranus convirtiéndolo en un espíritu incorporeo. Desde entonces todo el mundo conoce al famoso Percival Stoner, el niño que derrotó al malvado hechicero.
Con el tiempo, Percival se casó con Esmeralda Evans. Tuvieron tres hijos: Diego Stoner, Lilian Stoner y Jonathan Stoner. Se instalaron a vivir en una gran mansión situada a las afueras de Irisville, cerca del Bosque Prohibido de Charmed donde los centauros y unicornios lo custodiaban.
Un mal día, Galbatian Tyranus invocó a unos crueles espíritus que te absorvían la esencia. Eran los norkmos. Estos fueron a Stonerhouse y mataron a Percival, absorviéndole la esencia hasta terminar con su vida. Diego tenía cinco años cuando presenció aquello y su madre Esmeralda profetizó una vez estaban a salvo que un día un niño salvaría al mundo mágico de Dorax derrotando así al brujo Tyranus y a sus secuaces.
que bonito mito