¿Te paso alguna vez que esperas tanto un día? ¿Que estas segura que lo que tanto ansiabas se iba a volver realidad? ¿Qué llega ese día tan especial, y todo lo que esperabas no salió como tu querías?

Bueno, a mi si me paso...

Me dijeron tantas cosas... me hicieron ansiar ese día cada vez más... Al parecer sería un día muy feliz... Ese día, mi gran amor volvería a estar junto a mí...

***

Aquella vez el me dijo “ Regresare pronto, volveremos a estar juntos y esta vez unidos para siempre, nada nos separará”. Y con lagrimas corriendo por mis ojos el se marchó, se marchó sin saber lo que ocurría dentro mío, sin saber que el amor que sentíamos dio un fruto, un fruto que nacería 9 meses después. Pero yo no se lo dije, no quería que el cancelara su viaje por mí, aunque si tuviera que hacerlo nuevamente, no lo dejaría escapar, no tendría la seguridad de que él regresaría. Pero en aquel entonces, el amor que sentía por él, me cegaba completamente, yo solo veía en sus ojos todo el amor que él sentía por mí, ese amor que solo podía estar en mi imaginación, mas yo no lo podía ver.

***

Ya faltaba muy poco, en cualquier momento el bajaría de aquel avión, bajaría y volveríamos a estar juntos. Solo quedaba 1 mes para que nuestro hijo naciera, yo no le había contado nada, cuando el me escribía le hablaba de muchas cosas, pero nunca de nuestro hijo. Hoy quería darle una sorpresa, quería que me vea y que supiera que yo esperaba un hijo de él.
Fui sola a recibirlo. Aún no podía explicarme porque el no me aviso que llegaría, me entere que el regresaba mediante su hermana, ella me lo contó. Pero eso en ese momento ya no me importaba, yo pensaba que el me quería dar una sorpresa, que quería llegar a mi casa y sorprenderme inmensamente.

El avión llegó, y yo solo esperaba que llegue a mis brazos.
Cuando los pasajeros empezaban a salir y encontrarse con su familia, yo me oculte tras una puerta que daba a un café, pero perfectamente podía ver las personas que salían.

Lo pude ver recogiendo su equipaje, me dieron muchas ganas de salir a su alcance, pero no, yo le quería dar una sorpresa.
Él caminaba directo hacia la salida, y en el momento en el que me decidí salir, algo me detuvo, y esperé un momento.

Pude ver lo que nunca imagine, mi bebe me patio, no podía creer lo que veía. Ahí estaba Enrique, abrazado de una mujer, una mujer que nunca antes ví. Talvez era pariente de él, no podía sacar conclusiones tan rapidamente. Hasta que vi lo que lo delato. Él la abrazó y le dio un beso en la boca, en ese momento casi me desmayo, no podía creerlo, no podia verlo traicionándome.
No aguante más y me acerque hacia el, lo mire y le di una bofetada. Él no pudo decir nada, solo miraba mi panza, aquella panza en la que estaba su hijo.

- Luz, yo te puedo explicar todo esto. No es lo que tu crees.
- Como pudiste? Ya solo falta un mes, un mes para que nazca y tu haces esto?
- Luz...
- Adiós.

El me siguió, trataba de explicar lo que ya no era necesario.

Salí de aeropuerto, y camine, camine mucho... No lo podía creer, él me había engañado con otra, mi hijo... mi hijo no tendría padre... sería una madre soltera, no podría estar con Enrique, esa persona que robo mi corazón, que lo utilizo y lo arrojo sin la menor importancia...

Me senté en la arena, mirando como siempre en mar... Llore y llore.... no lo aceptaba, estaba tan sola, de un momento a otro la felicidad que me embargaba se había ido, ahora estaba tan mal...

Regrese a casa, y él estaba ahí esperándome, lo mire a los ojos y me fui a mi habitación, pero el me siguió y entró...

- Luz, perdóname... se que me equivoque, fue solo un tropiezo.
- Es muy fácil decirlo no?
- Yo se que hice todo mal... Quiero que tengamos a nuestro hijo y olvidemos todo, todo se borrara, hay que olvidarlo...
- Ya te lo dije, es muy fácil hablar....
- Luz, por favor...
- Solo te haré caso por mi hijo, no quiero que nazca sin un padre.
- Gracias amor.
- No me hables así, ya te dije que es solo por mi hijo. Contigo yo ya no quiero nada.

Me tapé con el edredón y el se marchó, en el momento que hablamos me dio muchas ganas de decirle que lo perdonaría, que yo lo seguía amando, pero no, tenía que ser fuerte con él.

Me pude enterar que iba a ser niña, iba a tener una niña muy linda, una niña que fue fruto de el amor que talvez mas que amor fue solo una ilusión.

Todos los día el me visitaba, me traía chocolates, ropa para nuestro hijo, y muchos regalos, pero nada sanaba la herida que me había dejado.
Un día el llegó, y tuvimos una larga charla, una charla que pudo solucionar todos estos problemas.

- Luz, mira este roponcito, que lindo.
- Si, esta bien.
- No te gusto?
- No necesito que le compres nada a mi hija.
- Es nuestra hija, por favor, yo quiero que volvamos a ser aquellos jóvenes locamente enamorados que caminaban sin rumbo alguno, solo para encontrar la felicidad.
- Eso ya no es posible, clavaste una espina muy grande en mi corazón.
- Déjame sacar aquella espina.
- Eso ya no es posible.
- Yo lo haré posible, volveremos a ser los que éramos antes.
- No lo se.
- Por favor, quiero que seamos felices.
- Ya veremos con el tiempo.

Me abrazó, y pude sentir el amor que el sentía por mí, y también lo abrazé y lo perdoné, estaba segura que volveríamos a ser felices.

***

Ya nació nuestra hija, Enrique y yo estamos mas unidos que nunca. Aún me duele lo que me hizo, pero creo que tengo que hacer un esfuerzo por nuestra hija.

Algún día se borrara la mancha que dejo en mi corazón, espero que él la borre. Creo que aún lo sigo amando, y estoy, ahora si, estoy segura de que el me ama, y que esta dispuesto a dejar todo por su hija. Yo se que llegaremos a enfrentar todos los problemas que se nos presenten, el amor borra y sana todo...

***

¿Te paso alguna vez que esperas tanto un día? ¿Que estas segura que lo que tanto ansiabas se iba a volver realidad? ¿Qué llega ese día tan especial, y todo lo que esperabas no salió como tu querías?

Bueno, a mi si me paso...

Me dijeron tantas cosas... me hicieron ansiar ese día cada vez más... Al parecer sería un día muy feliz... Ese día, mi gran amor volvería a estar junto a mí...

Talvez el día no fue feliz, pero si en realidad crees que estas enamorada y él siente lo mismo por ti, trata de hacer crecer el amor en los dos cada día más, puede que se presenten pruebas en tu vida, pero si es un verdadero amor, lograras cruzarlas, nunca te rindas. Yo acepte que el curara mis heridas, y las curó... él si es mi verdadero amor.