En la clase de ingles por fin empezamos a trabajar y a hacer lo que no hicimos en las vacaciones.Ya en la salida, le dije a Carlos que le decía mañana lo de mi sueño.
Al día siguiente, en el recreo Carlos directamente me pregunto de mi sueño, yo empecé así
- Un día tuve un sueño muy raro, así era. Habían dos niños llamados Sean y Paul a los que les gustaban las cosas que tenían que ver con Egipto porque su padre, Harry, era arqueólogo muy reconocido en el mundo, su principal trabajo era excavar y encontrar momias enterradas. Sean tenía 12 años y cursaba sexto año y Paul tenía 14 y cursaba segundo de secundaria, ellos nunca habían estado en Egipto pero su padre les daba muchas fotos de sus expediciones.
A el mejor amigo de Sean, George, no le gustaban las momias y criticaba a Sean a escondidas por sus gustos que según el eran inmaduros, Paul que sabía lo que pensaba George, quiso decirlo a Sean pero el no lo escucho y siguió hablándole a George de momias.
Un día Sean quiso invitar a George a su casa, a la hora de la comida Harry les dijo a Sean y Paul que se tendrían que ir a vivir a Egipto por cuestiones de trabajo y George, olvidando el disgusto que le tenía a las momias, decidió estudiar y conocer de ellas mejor en honor a Sean.
Se irían el próximo 13 de febrero, el día del anunció fue el 7 de Noviembre, así que le quedaba poco tiempo a Sean de hablar con sus amigos y convivir por última vez con ellos. A Paul por su lado no le interesaba cambiarse o no, el de costumbre no tenía casi amigos.
El día en que se cambiaron, George le dijo a Sean esto:
-Un día, Sean, un día podremos volvernos a encontrarnos, no se si hoy no se si mañana lo único que se es que nos volveremos a encontrar.
Así se despidió Sean de George y se encaminaron hacia el aeropuerto en donde, de nuevo, George lo estaba esperando. El no podía irse sin darle a Sean un regalo de despedida con el que siempre lo recordaría, se trataba de una momia en miniatura que Sean le había comprado a George en su excursión de paseo a “El mundo de la momificación”, en Toronto.
Al irse Sean, George siguió viendo con su mirada a ese avión que le había arrebatado al mejor amigo que el había tenido aun cuando el lo criticaba de su gusto por las momias, pero las momias ahora eran su máxima fascinación.
Cuando el avión desapareció en el aire George su fue del aeropuerto, durante casi 2 meses George y Sean se habían extrañado mutuamente hasta que……..
La campana de formación había tocado.
Durante La tarde Carlos me habló a la casa para decirme que:
-Salim, termina de contarme la historia
-Recibió George la noticia de sus padres de que se irían a vivir a Grecia porque las olimpiadas estaban cerca. Y cada vez que ellos podían irse de viaje se iban pero a mudarse, en este caso sería por las olimpiadas. La esperanza de que George fuera a vivir a Egipto era cada vez más nula.
Intentó convencerlos de que lo mandaran a vivir a Egipto con los tíos que tenía ahí, pero sus padres no accedieron.
Sean recibió la noticia cuando George ya estaba en Grecia, eso fue hasta 3 meses después, durante ese tiempo Sean todos los días pensaba en George, también su hermandad con Paul se fortaleció y todos los días pasaba tiempo de calidad con el. Pero Paul no reemplazaría la amistad que George le había brindado durante 3 años.
Egipto no era lo que Sean imaginaba junto con George, pero estaba bien para pasar tiempo de calidad con se hermano, por otro lado Sean ya casi no veía a su padre, solo en los fines de semana y eso era cuando mucho 2 o 3 horas. Harry estaba en su expedición más reciente de la que ellos no sabían casi nada solo que era una momia muy importante.
Un día Harry llegó temprano del trabajo anunciando que Sean y Paul irían con el para abrir el sarcófago que se había encontrado. Al llegar al laboratorio estaban esperando los compañeros de trabajo de Harry, el sarcófago era de 2 metros de largo y de aproximadamente 1.20 de ancho. Era de oro con decoraciones de cristal color azul y jeroglífico que ellos no habían visto nunca forrados de bronce puro, la cabeza del sarcófago tenía los ojos brillantes con material de plata pura.
Lo que más impresionó a los arqueólogos fue el extraño vidrio que el sarcófago tenía a la mitad de la frente, era color negro y con forma circulada. Ese cristal era uno que solo abundaba en América y que nunca se había encontrado en Egipto, era obsidiana.
La primera pregunta que se le vino a la mente a Harry fue: ¿Qué tenía que hacer un cristal que solo abunda en América en Egipto?
La respuesta no la conocería, la que la conocería serían Sean, Paul y George en el futuro. Mientras tanto, en el laboratorio Carl, el ayudante de Harry, se disponía a abrir el sarcófago.
-Señor, creo que a llegado la hora de lo abramos,- continuo Carl, - si me lo permite lo abriré.
Harry le respondió-Si, yo también creo que a llegado la hora
Y dicho esto Carl tomó con la mano izquierda la tapa del sarcófago, luego prosiguió con la derecha, pronto la tapa del sarcófago se movía muy lentamente
- Señor, la tapa del sarcófago tiene un material que no se que s que me impide abrir el sarcófago- dijo Carl
- Justin, ayuda a Carl dándole alguna herramienta para que el sarcófago se abra,- respondió Harry
Justin abrió una pequeña caja de forro azul y saco una especie de herramienta cuadrada y la entregó a Carl. Carl tomó la herramienta y la colocó en el orificio que había entre la tapa y el sarcófago y la fue rotando por todo el sarcófago.
- Salim, termina de contarme el Lunes porque me tengo que ir- me dijo Carlos
Colgué el teléfono y me puse a jugar “Age of Mythology”.
Durante el fin de semana renté películas y fui al cine, el Lunes en el recreo
Carlos me preguntó de mi sueño.
- Carl quitó la tapa del sarcófago y la sorpresa que se llevaron fue que en el sarcófago no había nada, estaba vacía y putrefacta por dentro, lo que parecía el mayor descubrimiento de Harry se había convertido en su mayor fracaso. Todos los arqueólogos de la expedición estaban frustrados con ellos mismos y más con su jefe que los había arrastrado a vivir a Egipto para una expedición que no vino al caso cuando En EE.UU. ellos estaban felices.
Carl, que era el más joven de los arqueólogos con tan solo 20 años, camino hacía la entrada del laboratorio como zombie, cada paso que daba era como una punzada en el corazón y al llegar a la puerta del laboratorio reaccionó y se quedo mudo por un momento.
-Una momia,- dijo aturdido después de un rato,- una momia
- ¿Perdón?,- le contestó Justin
- Una momia,- repitió Carl
La cara de Carl era más pálida que la de un muerto, tenía la cara más horrorizada que Harry había visto en su vida. Los arqueólogos se dirigieron a la entrada y que sorpresa se llevaron, una momia con casi nada de vendas alrededor y con la carne podrida. Los arqueólogos se pusieron atónitos y no podían ni hablar. ¿Cómo había llegado esa momia ahí? Nadie lo sabía. Volvieron a abrir el sarcófago y en el habían artefactos del antiguo Egipto y unos jeroglíficos que fueron descifrados rápidamente ya que ellos no los conocían, pero lo que decían aun era un misterio.
Sean y Paul se acercaron a la momia y vieron que adentro tenía algo pero no sabían que era, era como un cristal negro rato en muchos pedazos. Llamaron a su padre, sacó uno de esos cristales, era más obsidiana. Pero ¿Qué significaba la obsidiana? Eso causo más estragos en la mente de los arqueólogos, ahora esa expedición de Harry se había convertido en la mejor de su larga vida.

Le hicieron muchos estudios a la momia 3456, que fue el nombre que le dieron, y los estudios no rebelaron nada de su origen ni de que era. Los jeroglíficos seguían sin descifrarse después de 2 meses, se encontraron también restos de veneno de cobra.
Mientras tanto George, el mejor amigo de Sean, seguía viviendo en Atenas Grecia, el todos los días pensaba en el día en el que ese avión se había marchado de EE. UU. Con su mejor amigo, Sean.
El padre de George había muerto en un asalto, y George vivía solo con su madre y su hermano, Jack, las momias seguían apasionando a George igual que hacia 2 años antes cuando Sean se habían ido a vivir a Egipto.
Una llamada inoportuna dejo a George completamente sorprendido………
La campana de formación había tocado y de nuevo la narración de mi sueño fue inconclusa, en la clase de español hicimos un trabajo de equipo, vimos un tema nuevo de matemáticas y nos dejaron tarea extra por tener 10 rayitas, la miss Tere nos pone una rayita en el pizarrón cuando hacemos mucho ruido y cuando llegamos a 10 rayitas nos dejan tarea extra.
En el recreo del martes de nuevo Carlos me pregunto de mi sueño y le dije
- La llamada que había recibido George le había dado una noticia increíble, Sean y Paul iban a ir de viaje a Atenas para una convención de Harry acerca de la nueva momia que se había descubierto hace 1 año.
En la convención George estaba buscando el estante en donde estaba Sean, y lo encontró platicando con su hermano acerca de el.
- ¡Sean, Sean!,- grito entusiasmado George
Sean volvió la cabeza e hizo una expresión de alegría
- ¡George! Que gusto me da verte de nuevo.- respondió Sean
- A mi también me da gusto verte, pero cuéntame de la expedición y de la nieva momia de tu padre,- contestó George
Sean le contó todo lo que había pasado.
Justo en el momento en que Sean menciono a la momia la momia que estaba junto a ellos se empezó a mover de una manera muy extraña, se levantó y un destello que alumbró todo el lugar cautivo la atención de todos los presentes. Pronto se oyeron ruidos no muy agradables provenientes de la tierra, después de un tiempo muy largo de ruidos y de destellos y demás cosas, al fin paro y entre mucha gente la destruyeron.
Todos culparon a Harry, aunque ellos sabían que había sido algo sobrenatural. Harry fue a dar a la cárcel y George, por su parte, se sintió0 culpable.
Los años pasaron y Sean, Paul y George aún recordaban aquel suceso terrible en el que esa momia había desatado una clase de poderes malignos y esos poderes habían matado a casi 10 personas. Sean, Paul y George ahora eran arqueólogos, hacían sus viajes y expediciones juntos en memoria de Harry, el padre fallecido de Sean.
El misterio que encerraba la momia no se había revelado, las fotos que se tomaron de los jeroglíficos aún no rebelaban nada. Las muestras de obsidiana que habían obtenido mostraban una cantidad no muy grande de veneno de cobra.
Ellos escucharon a un hombre en la televisión que estaba traumado porque había visto una criatura que tenía vendas pero muy pocas...