Hoy me despertó el monótomo sonido del teléfono.
La voz enérgica de mi abuela, pendía del otro lado del aparato.
- ¿Cariño te vienes a comer hoy? Voy hacer arroz- me dijo...
Medio dormida, sonrei... - Vale yaya, alli estaré.
Me levanto, y un hilo de tristeza crece dentro de mí, hoy no será un buen dia. Sin saber porque... me siento triste, hoy es un dia en el que las lágrimas me visitaran sin avisar, en el que el cielo esta nublado y el viento abofetea mi cara.
Camino por la calle, con un ritmo lento y pesado, hoy las flores no parecen tan bellas como de costumbre y el sol apenas deja ver sus radiantes rayos, hoy el viento se burla de mi...
El sentido de mi vida, hoy juega a las escondidas...
Y de mi mano no van las sonrisas...
Dentro de mi pecho hay un nudo, que se niega a deshacerse, hoy los sueños los perdí...
No me encuentro en mi camino al anciano de ojos azules, que con sus miles de arrugas, me regala unos buenos días, al pasar por su lado, ni su inseparable amigo, ese viejo y fiel perro, que hace que su vida tome sentido.
Hoy no tengo ganas de de nada, solo de quedarme en casa, tumbada , dejando morir este día que me llena de amargura, sin saber el porque...
El camino se me hace largo... el paseo, como siempre, esta lleno de gente, hoy me parecen seres inertes... las palomas no levantan el vuelo al escuchar mis pasos... Hoy los árboles, se rien a mi paso...
El trabajo me harta, no quiero ver a nadie , y me tengo que esforzar por sonreir, no quiero hablar, no quiero comer, solo quiero llorar...
Vuelvo a caminar por las calles...
Al llegar cerca de casa de mi abuela, me viene un olor familiar. Restos de un amor perdido, aun cuelgan de ese viejo edifico, su nombre y el mio con un corazón en el centro, aun perdura en el tiempo, ese recuerdo... El paso del tiempo borro el amor de nuestros corazones, pero para que no olvidemos conserva casi intacto, lo que mi primer amor escribió una tarde de verano...
Y mi primer beso, a escondidas, en este portal que me ha visto nacer, crecer y marchar. Que escucho mis risas y mis llantos, que fue testigo de mi primer cigarro...
Me recibe la sonrisa de mi abuela, con su viejo delantal, y el olor a comida me abre el apetito.
Me encanta el aroma de su casa, me llena de recuerdos, las risas con mi hermano, los juegos... los besos y abrazos de mi madre. Las tardes de invierno reunidos junto al brasero, la noche de reyes, los cumpleaños...
La casa de mi abuela... donde viví... mi refugio... aquí se para el tiempo, nada ni nadie te puede hacer daño entre estos muros. Mis muñecas y muchos de mis libros aún estan en esa habitación, donde nos reuniamos al salir del colegio, mis amigas y yo y jugabamos a ser mayores. Donde vino el amor, donde se quedo el primer desengaño... Donde lloré por la traición, donde reí por el triunfo. Sus paredes estan llenas de confidencias, de momentos felices, de buena amistad, de mucho amor fraternal. Es donde mi madre se sentaba junto a mi cama, y me acariciaba el pelo, y me ofrecia sus consejos.
Hoy la miro y me invade de recuerdos...
Mi primer carmín, mi primer beso, mi primer amor, mis juegos, mi amistad, mis desengaños, mis dias llenos de sol, mis noches llenas de estrellas, mis nubes, mis sonrisas... Todos los que quiero, estan presentes en esta casa que me llena de recuerdos...
Una sonrisa se dibuja en mi cara, el sol brilla con fuerza, mi paso es ligero, el sentido de la vida lo encontre, no se sabe esconder, las lagrimas no llegaron, la gente que pasa a mi alrededor rien y hablan, las flores son bellas, los árboles me saludan... Se acabó el mal dia...