Una mañana muy temprano, cuando el sol recién comenzaba a entregar los primeros rayos del alba, yo me encontraba en un lugar muy hermoso, donde el cielo era mi casa y la brisa del mar entregaba a mi rostro la humedad y el brillo de las olas, caminando por la arena, pensando en tantas cosas; era sólo para mi aquel paisaje de aquella playa nortina en un silencio absoluto del bullicio del mundo, sólo el silvido de las olas que golpeaban mis pies y en el alto cielo las gaviotas entregadas a la inmensidad del oceáno.
De pronto en la distancia vi un gran barco; así derrepente, pero observando bien entre la bruma, ¡no era un barco!, sino una gran nave que subía veloz y bajaba nuevamente a las aguas, el mar se puso inquieto y las olas ya no mojaban sólo mis pies, sino que mi cuerpo entero, me alejé un poco de la orilla por temor a caer y escucho una voz desde la inmensidad que me decía.¡No te alejes.no te alejes!, te hemos observado desde hace tiempo; esa misteriosa voz venía de aquella nave que se fue acercando más y más.yo me quedé inmóvil por el impacto que me causó;y en eso aparece frente a mi aquella nave espacial envuelta en mis colores.se detubo el tiempo.se abrieron grandes puertas y un haz de luz se reflejó en mis ojos, esa luz traía las palabras que me decían; ¡ sube acá con nosotros!,te llevaremos a la inmensidad de nuestro planeta; caminé lentamente hacia la entrada, con algún temor y mientras me encontraba dentro de la nave, sentí la sensación de estar en otra dimensión.
Aquí estaban las personas altísimas se comunicaban con signos entre ellos y conmigo lo hacían a través de un rayo de luz donde yo percibía los mensajes.te llevaremos a que conozcas nuestro lugar allá en el infinito.y en eso hubo un movimiento giratorio y esta nave se elevó a gran velocidad para luego caer en las aguas; dentro de la nave me transportaron a otro lugar donde todo mi alrededor era de vidrio, esa luz nuevamente me traía las palabras diciendo.estás aquí para ir observando todo el recorrido y me fui dando cuenta que esta nave viajaba a través de las profundidades y veía un paisaje maravilloso, inexplicable, todo en colores tan nítidos, los peces, los cristales,las plantas,las estrellas de mar,todo, todo era una creación misteriosa; el agua transparente, era otro mundo; hasta que la nave llegó a un punto donde se detuvo y una luz se reflejó en mis ojos diciendo.¡ hemos llegado, conocerás a nuestra gente, nuestro trabajo y nuestro lugar.!. Se abrieron las puertas y me hicieron bajar.todo se veía normal; pero,..¡¡ para ellos!!, ahí estaban los grandes personajes en estatura y se intercambiaban miradas misteriosas y su comunicación a través de sus signos.yo parecía hormiga y me sentía acorralada, pero no me daba miedo, eran seres amables, cordiales, me mostraban lo que hacían referente al trabajo en medio de toda la vegetación; eran seres vegetarianos, cultivando frutas y verduras, la tierra era de color amarillo opaco y sobre nuestras cabezas estaba el mar congelado de color azúl verdoso.
En un momento desaparecieron todos y ahí me sentí en una soledad íntegra, quería regresar a mi mundo y no podía hacerlo, esperaba con ancias que la nave apareciera para saber si me traerían devuelta. En medio de la desesperación empecé a correr entre la vegetación, corría y corría pero estaba en el mismo lugar, no avanzaba; pero sí el paisaje iba cambiando de mil formas.y de pronto.aparece un túnel por el cual me deslizaba y un viento suave hizo remecer mi mente y me doy cuenta que esta odisea era sólo un sueño profundo de mi existencia.