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Paloma ep ult.

las vueltas que da la vida. a los tres meses aproximadamente, fallecio el Tio: Don Trinidad, de achaques de la vejez. mas tarde, Su Hija Lupe, por las ideas que se le habian atiborrado ala mente en su escuela comercial un dia se fue de su casa, decidida a buscar una nueva forma de vida. y asi de sus pasos adolescentes y su aspecto casi nubil, virgen: fue a dar al oficio mas comodin y a la vez vilipendiado por las "gentes de buena conciencia." un lupanar. que, aunque moderno no era un lugar para jovenes sino un sitio de vicios y virtudes profanas. aun y ya habituada a esa vida que ya esta vez adulta le daba conocer los lujos del dinero barato, recordaba las ultimas palabras de sus padres, al unisono, cuando con la mano en la cintura ella les replico que ya no queria ser mas hija de familia; "para ti, haz de cuenta que no existimos. tu ya no tienes a nadie." palabras que, aunque le dolian, a veces las juzgaba mal cuando reflexionaba, esperando clientes y fumando cigarro. pues ella siempre habia considerado que en su hogar tenia carencias. por ello, al ser aceptada en ese lugarejo no puso objecion. pues, ¿cuales habian sido esas carencias? despues, regresando con la familia sucedio el golpe bajo; A Artemio le quitaron el taller mecanico, pues no siempre pagaba la manutencion a la Secretaria del consumidor y ya muchos de sus ayudantes lo habian abandonado por buscar algo mejor. todo se vino abajo; despues de la fuga de su hija mayor, los chiquillos salieron del centro escolar por falta de recursos para seguir pagando su educacion; ellos, en su infancia inocente y casi ignorante deambularon por las calles de su barrio, como almas libres. y un dia, ni Maria Josefa ni su esposo supieron mas de ellos; la ciudad populosa se los habia tragado, en un sentido pasando de desposeidos a niños de la calle. su mujer, a poco de lo de sus hijos, y al ver el vano interes del esposo hacia ella. lo empezo a engañar con otro hombre; un Herrero que era de otro rumbo a la doctores. el no lo sabia, y se limitaba a ver la cara de su esposa sirviendole comida o atendiendolo mientras el buscaba otra vez la vida. si, tal vez no habia mas que reveses; "de menos, aun tengo a mi vieja y si encuentro a mis hijos." acertaba a pensar. pero estaba engañado. quiso unirse a los obreros de nuevo en 1979 pues ya se demandaban mas mejoras en el sindicato para los obreros y un porvenir sino remunerado, al menos de provecho. pero al rebelarse esta vez contra el gobierno fueron detenidos todos, entre ellos Artemio. estuvo 8 años en Santa Martha; por vandalismo y proselitismo ominoso. en esos años, se entero de la aventura de su esposo con el hombre, pero ya no le importo. ¿de que le valia aun hombre que lo habia perdido todo o casi todo? los años en prision pasaron como agua; a excepcion de que en una contienda con un tipo del bando opositor al que habia estado cuando era libre, habia sido herido; con un ojo maltrecho y cegaton; pero la adversidad se habia portado bien con el; pues solo ese altercado tuvo. al salir, decidio dar un paseo por su antiguo barrio; caras nuevas, sitios no vistos y un mundo menos reprimido y mas tolerante estaba a sus ojos del que habia salido por encierro. pero ya que era un mundo diferente a su pensar, si ya no estaba su familia. paso el tiempo. ahora solo un pordiosero de barba rala, quien una vez creyo ver a su hijo Julio, el desterrado cruzando la calle, pero bah! solo delirios de su mente embotada y extasiada del alcohol. lo cual, suspiro y siguio bebiendo. unos chiquillos, como otros y en veces, exclamaban; ¡miren, ahi viene, ahi viene el teporocho de la obrera! entre corriendo y gritos. pero a el ya no le importaba. considerandose ya olvidado del mundo.seguido por animales de su misma suerte y comiendo a sabiendas; puesto que se emborrachaba con cervezas que le otorgaba un repartidor en un deposito de cervezas con quien habia trabado amistad al salir de prision y en el otro rumbo Vecino; el obrero mundial. este señor era Don Marcos, un hombre mediano de unos 37 años y que era algo borracho, avaro en ocasiones. asi, el mendigo asomo al cielo y se levanto; lloveria esa tarde y debia buscar un refugio en la carretera que se alzaba al oriente. asi pues, dejo la cerveza despatarrada en el pavimento y se retiro a la fachada baja del puente con otros mendigos. para colmo de males y poner fin a esta trama social, un dia de nero y apenas reponiedose de la cuesta en ese año que se celebraba; 1989. llego el hijo desterrado; Julio, ya un hombre maduro pero aun joven y retirado del ambiente publico, en una palabra. decidido a perdonar y ser perdonado, para unirse de nuevo a su familia y compartir con ellos los honores que le habia dado su ocupacion militante en otros lugares que no solo tenia la fortuna de conocer, sino sentirlos y verlos. llego al viejo domicilio, casi derrumbandose y miro varias veces el numero de la vecindad. un señor que pasaba al verlo, de corta estatura y anteojos grandes le pregunto a Julio:

- disculpe, joven, ¿puedo ayudarle? veo que esta norteado o algo asi.

- oh! no señor; deseo ver a mi familia. pues acabo de regresar al pais y creo que aun viven aqui. ¿conoce usted a los Martinez Cruz? - replico Julio, afable y seguro.

el hombre se quedo viendole unos instantes y al fin respondio:

- me parece que no los conozco. me mude como hace dos años. pero creo que doña Finita, la portera si lo puede orientar. a la entrada la divisa.

- gracias, señor.- dijo, sin expresion en la voz y fue adonde la portera;

- si, hijo. conoci a tus familiares. de hecho, cuando mi hermana mayor se retiro por circunstancias ajenas al negocio yo lo administre y pagaba renta en ese cuarto de los Cruz: el 23. pero se esfumaron, no se que paso con ellos, despues de.

- despues de que? ¿acaso se accidentaron o que paso? ¡digamelo, señora!- dijo Julio, impaciente por la interrupcion brusca de la vieja portera.

- no, joven. nada de eso. solo que. primero les llovieron las desgracias. a tu padre le quitaron su taller y fue a dar al bote con unos revoltosos, que se yo. poco despues su mujer se fue detras con un herrero, cuando apresaron a don artemio. y no se mas. ni los chiquillos sabemos si se los trago la tierra.- termino de decir la señora, algo quebrada la voz al saber a quienes se referia ese joven perdido.- ¡no te imaginas la alharaca que hubo cuando a Don Artemio lo subieron a la furgoneta de detenidos!
el ya no quiso saber mas. estba desconcertado. sabia, por bocas anomnimas mientras el estuvo militando que su padre tenia ese oficio por su poco exito en la fabrica, ahora un edificio abandonado hacia años; pues por las revueltas se habian cambiado de metropoli y ahora era un edificio viejo. pero no sabia nada mas. asi, se retiro de esa casa casi derruida con sus recuerdos dentro de ella. no quiso saber mas razones y camino por las calles largo rato, sin rumbo fijo con pensamientos dolorosos. ¿porque, en ese instante que el veia de reconciliacion se tornaba nebuloso? asi, al apurar sus pasos enocntro un hotel de 5 estrellas pero que le permitiria pasar la noche, o no lo sabia. con el dinero posible de la pension del ejercito le pago al hotelero y entro al cuarto; no habia mucha labor en el hotel ese dia. reposo las horas del viaje. eran ya las once de la noche, un joven hombre de unos 30 años; macizo, fortachon y bien dado con facciones humildes en el rostro, fumaba una caja de puros; recuerdo de su paso de la marina en Cuba y de su paso por la Rusia Comunista. pero eso no le importaba ahora. se interrogaba ¿valia la pena haber vuelto? ¿que le deparaba el destino, al empezar sin remedio de cero y vivir ese tiempo solo, mas que desterrado? ¿acaso les buscaria? estas y otras interrogantes se hacia el hombre arrepentido que a la luz de la la luna tenue fumaba lentamente un puro hasta nublarle la vista. habia mucho que hacer. fin.

moraleja; espero les haya gustado el relato. ahora, la frase principal es; no dejes tdo de ultimo momento, pues no hay vista atras. o bien, el afecto de tus seres queridos es invaluable e intangible, no los dejes por otros motivos, si no sera despues muy tarde para volver la vista atras. por ultimo, el valor que mejor se aprecia en los pobres es la humildad y la union en las buenas y malas. aTte. dulce. k. miranda Aguilar. gracias por el sitio. y hasta pronto.
Datos del Cuento
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