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Categoría: Hechos Reales

Quien no te fallara nunca?

Aún recuerdo como si fuera ayer aquel día en el que nos conocimos. Los problemas que tubimos para enviarnos una simple foto. Quien nos diria a ti y a mi que después de una simple conversación iba a nacer entre tu y yo aquella gran amistad. Más de una vez di grácial al destino por haberte traido hacía mi. Te convertíste en un gran confidente para mi.
El primer tio en el que sabía que podía confiar y que nunca me dejaría de lado. Tu eras para mi como el hermano mayor que nunca tube y el tio perfecto a la vez. No me fue muy difícil conocerte. Eras tan sincero cuando me hablabas...
... me dejaste entrar en tu corazón.
Nos conocimos en una época bastante difícil para los dos. Tu estabas triste ya que de quien te habías enamorado nunca tubiste el valor necesario para decirselo y ella se fue con otro.
Y a mi, el tio del cual yo estaba enamorada me dejó de hablar al demostrarle mis sentimientos.
Yo fuí tu pañuelo de lágrimas y tu el mio. En ti encontré suguridad y la persona que necesitaba para salir de aquel gran bache.
Tu a mi me ocultaste lo que sentias. Te pensabas que ocultando tus sentimientos parecias más fuerte. Como si ocultando tus sentimientos la gente no pudiera encontrar tu punto débil.
Pero al empezar a hablar contigo me di cuenta de que tu punto débil. Hay cosas que por mucho que las intentes cambiar, siguen ahí. Y hasta que no las resuelvas seguiran detras de ti.
Lo que más me dolía era oirte decir que no te importaba vivir. Oir aquellas palabras me mataba por dentro. La idea de perderte no entraba en mi cabeza. Nunca me había apegado tanto a una persona, y menos a un tio. Más de una vez estubimos hablando sobre ese tema, más de una vez te pedí que no volviéras a pronunciar esas palabras. Que te quitaras esas ideas de la cabeza, esas ideas no servian de nada. Solo nos dañaban a ti y a mi.
Pero bien sabemos todos que cuando tenemos una cosa en la cabeza es muy dificil sacarla, y menos cuando sentimos algo así.
Pero creo que él consiguió olvidarlo el día en el que yo le conté el mayor secreto de mi vida.
Simplemente me salió, quería demostrarle que lo que decía era una tontería y el dolor que podía causar a todas las personas que de verdad le querían y le apreciaban. Que las cosas no se arreglan desapareciendo, que las cosas hay que arreglarlas. Explicarte esa parte de mi vida oculta nos unió más de lo que lo estábamos.
Parecía como si te conociéra de toda la vida, era capaz de contarte cosas que no había sido capaz de contar a ninguna de mis amigas.
Poco a poco me iba enamorando de ti.
Me encantaba hablar contigo, las horas se me pasaban volando. Contigo era tan fácil soñar mientras hablabamos.

El día que te dije que me había enamorado de ti, tu no te lo creíste. Creías que estaba confundiéndo amor con amistad. Y aún que soy joven, sé la diferéncia entre esos dos conceptos. Aquello nos unió aún mucho más.

Después de tantas veces de haberte dicho que quería conocerte tu aceptaste. Viniste a verme un miércoles por la tarde. Recordaré aquella tarde como una de las mejores de mi vida. Lo que daría por volver a repetirla.

Pero un día llegó lo que tanto temíamos, nuestra primera pelea. No sé porque ni quien empezó. Lo único que me acuerdo fuéron tus últimas palabras:
" Me voy ya que se me estan llenado los ojos de lágrimas."
Y seguidamente te desconectaste. No podía creer que tu estabas llorando por mi culpa, me sentía muy culpable por lo que estaba pasando.
Te llamé para hablar contigo de lo sucedido. Quería aclarar las cosas, pero tu no fuiste capaz a cojerme el teléfono. Seguidamente te envié un mensaje, diciéndote que te conectaras para aclarar las cosas. Que si no lo hacías no volverías a saber nada más de mi.
Sé que me pasé, que no sentía lo que ponía en ese mensaje. Pero era la única manera de que te volvieras a conectar y aclarar las cosas.
Y así fue, te conectaste y acacabamos pasándonos toda la noche hablando. Lo mejor de nuestras peleas era cuando se aclaraban las cosas.

Cada día que pasaba me iba enamorando más de ti.
Me conformaba con tener tu amistad, ya que tu a mi no me querías, por lo menos de la misma manera. Eras mi mejor amigo, y por nada del mundo quería perderte. Te necesitaba demasiado y a la vez eso no me gustaba sentirlo.

Nos pasabamos noches enteras hablando, y no sé como siémpre teníamos algo de que hablar. Cuando nos quedábamos sin ideas recurríamos algunos temas secundários.
Pero lo que tu nunca querías oir era el tema del cual yo si quería hablar. Lo que había entre nosotros.
Habían cosas de ti que se me habían metido en la cabeza.

El segundo día que quedamos fue mejor que el primero. Fuimos a mi casa a ver una película, pasamos una buena tarde. Lo que más me gustaba era la cara que ponias al decir la palabra " porsupuesto". Eras tan mono...
Cuando te acompañé al tren me dijite hasta la próxima vez que nos veamos.
Y yo me lo creí.

El tiempo iba pasando y más a ti me iba juntando. Pasamos tantas cosas juntos, no olvidaré jamas nada de lo que nos pasó.
Pasabamos la gran parte del día hablando, muchisimas horas. Y noches enteras contándonos mil histórias y conoiéndonos el uno al otro.
Te conocía como la que más, cosa que tu a mi aún no has llegado a conocerme del todo.

Poco a poco te ibas abriéndo a mi, poco a poco me ibas mostrándo el mundo en el cual tu vivias.
Te quería por como eras, por como te comportabas, no por tu aspecto, como muchos se pensaban.

Las peleas entre tu y yo eran siémpre por el mismo tema. Yo te quería y tu a mi no. Vaya metedura de pata la mia. Pero las cosas son como son y vienen como vienen.

Volvímos a quedar, me dijíste que alomejor te quedabas durmiendo pero que esperabas que no ocurriera. Yo fuí puntual en la estación, esperánote, una hora bajo la lluvia. Pero tu no apareciste.
En ese momento me sentí la tia más desgraciada de todo el mundo. Me quedé llorando toda la tarde de rabia. En aquel momento huiera querido desaparecer o que ese día se hibiera escapado del calendario. Tu estabas esperando a que me conectara, pero yo no me conecté hasta las diez pasadas de la noche. Aquella noche la bronca que tubimos fue la peor de todas. Tu tomaste la decisión de no volver a vernos nunca más. Pensabas que así no nos volveríamos a hacer daño y las cosas serían mejor. Pero con aquella decisión puso una barrera entre los dos.
Volvimos a hacer las paces y a seguir siendo amigos como siempre, el tiempo iba pasando y las cosas entre nosotros iban viento en popa. Hasta que llegó el verano y yo me tube que ir de vacaciones con mi familia. Yo sabía que en ese mes que iba a estar fuera él me iba a olvidar. Se lo dije y el me lo negó, pero yo tenía ese presentimiénto rondando por mi cabeza.
Y la verdad es que se me hizo difícil el verano sin hablar con él. Sentía que algo me faltaba y era él. Por fín llegó el día de la vuelta me conecté para hablar con él y estubimos hablando toda la noche. Yo había conocido a alguien especial en ese verano. Pero en mi corazón seguía ese espacio tan enorme con nombre incluido, su nombre. No fue mucha la sorpresa que me llevé cuando me dijo que había conocido a una chica y que se había enamorado de ella a no poder más.
Eso se me clabó como una flecha en el corazón y cuanto más me iba hablando de ella, más se mi iba clabando. Y yo no era capaz de decirle que callara porque le veía feliz y no quería amargarle. No me costaba nada callar y aguantar. Las cosas entre él y yo fueron empeorando cada vez más. Veía que estaba perdiendo a mi mejor amigo, que yo estaba haciendo todo por no dejarle marchar pero el se empeñaba en irse y no me dejaba estar a su lado. Él había cambiado y tenía una vida mejor, una vida en la cual no me había hecho un sitio para mi. En cambio yo a él en mi nueva vida si que le había hecho un sitio y bastante importante. Él se ha olvidado de mi, ya que tiene novia, ya no se acuerda de las cosas que hicimos juntos ni de ningunos de los recuerdos que nos han marcado. Solo esta pendiente de su novia y a mi me ha olvidado. Lo nico que me une a él es un anillo que le di la última vez que nos vimos. Ahora lo único que hago es maldecir al destino que me lo ha quitado y esperar que algún día se de cuenta de lo que ha perdido y que vuelva a mi, ya que yo le sigo queriendo y esperando.
Datos del Cuento
  • Autor: Neila
  • Código: 554
  • Fecha: 06-11-2002
  • Categoría: Hechos Reales
  • Media: 6.09
  • Votos: 104
  • Envios: 4
  • Lecturas: 4843
  • Valoración:
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Comentarios


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1 comentarios. Página 1 de 1
jessica
invitado-jessica 24-12-2002 00:00:00

me a gustado mucho me e sentido + o - identificada cn la historia.Yo cn 13 años me enamore x el chat d un chico d 15 años yo viva en badalona y el en barcelona mira k estabamos cerca pero nunca nos vimos en los 5 y medio! y despues me puso los cuernos...no ay k confiar mucho d las personas k no tienes a t lado..ahora ara un mes o dos tuve otro novio x el msn me duro 4 meses tp lo vi solo en foto...tb me dejo x otra!ahora e tomado una decision no tener cibernovio nunca mas!pero es dificil...pero lo intentare!haz t lo mismo y seguro k encontraras a ti principe azul!todo el mundo tiene a su principe azul srguro!bueno me voy y recuerda lo k te e dicho!:)dew wapa suerte

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