Hoy, hoy empecé a vivir y nadie sabe nada.
Me siento tan bien...,tan segura aquí...,siento los latidos de mamá, lo que dice, lo que piensa y acá adentro, nado, juego y hasta pareciera que flotara. Ya hace un mes que existo y todavía no lo saben. ¡Cuando se enteren...por Dios!¡Qué contentos se van a poner todos!; papá,mamá,los abuelos...
Aún no soy muy linda, pero...siento que mamá está muy triste, como preocupada ¿Qué pasará? Está hablando por teléfono y llora...
Ella dice que no, que no puede ser, que tiene que haber un error...pero, ¿qué importa? cuando sepan que existo se van todas las preocupaciones y los nervios...¿quién no se olvida de los problemas cotidianos cuando va a venir algo tan cierto, como un bebé.
¡Estoy tan, pero tan apurada por nacer! Y me pregunto con quién o con qué jugaré cuando salga de la panza de mamá: con una muñeca que tenga el pelo de mi mami, o con la pelota de fútbol del cuadro favorito de papá.
Escucho palabras, una voz de hombre que le dice a mamá...¡Sí! ¡Se lo dijo por fin!! Mamá ya sabe que existo... ¡qué lindo, no!? Pero ella llora, llora y llora en los brazos de papá.
Ya hace dos meses y medio que estoy en la panza de mamá, crecí bastante y muy pocos saben que existo, todavía mamá está muy triste y siempre se pregunto lo mismo: ¿qué hago ahora?, ¿qué hago? Yo tengo ganas de gritarle: ¡andá, andá mamá, andá apurate, elegime un nombre!... y con respecto a papá no lo ví más desde que supo que yo venía en camino. Ni siquiera mandó a preguntar por mí, mucho menos por mamá, ¿qué raro no? ¡qué raro que es todo esto!...¿Por qué no vendrá papá?
Ahora mamá está discutiendo y grita, llora, se toca la pancita y ...¿por qué?, yo me pregunto por qué, qué pasa. Por favor pido dejen en paz a mamá, ¿qué nos hacen mamá, por favor? ¿por qué nos insultan y nos pegan? ¿Pero cómo, qué raro? ¡si son los abuelos!
Se que es de noche, mamá está en el dormitorio pero no duerme, llora, llora en silencio, le duele el alma, llora como nunca y pronuncia un nombre, el nombre de papá... ella sigue llorando, ¿qué hago para ayudarte, má? ¿Es que no soy alegría para vos? ¿Por qué pronuncias palabras como traición, engaño, odio? ¿Qué son esas palabras, mamá?
Mamá está acostada pero me parece que no es en casa es en la casa del hombre del guardapolvo blanco, también está la abuela y le da al Señor, varios papeles de colores, me parece que es dinero, pero no sé por qué, yo no entiendo mucho de esas cosas. Pero le da al señor varios papeles de colores. ¿Tendrán que pagarle para decirle que lo que tiene en la panza, que tiene sus mismos ojos y su misma sonrisa? No creo, si fuera así no le dirían que se relaje, mucho menos le pincharían el brazo.
Presiento que mamá se queda dormida, mientras que la abuela le repite que es lo mejor, que es lo mejor.
Y yo también empiezo a tener sueñito, mamá ya se durmió pero...pero ...¿Qué es esa pinza? ¡Ay, me están haciendo doler, todo es color rojo a mi alrededor, ¿será esto sangre? ¿Qué me quieren hacer? ¡Mamá, mamita, ayudame, por favor, tengo miedo, mucho miedo!
¡Ah! Ahora sí, ahora entiendo, eso era, por eso llorabas tanto, no me quieren, nunca me quisieron, pero... ¿a vos te parece má, que esto es lo mejor? ¡Qué equivocada que estás! ¿Estás segura de lo que hacés?
¡Estaba tan contenta, tenía tantas ganas de vivir, de crecer, de jugar, de ayudarte, de vivir, por sobre todas las cosas de vivir! Y vos, mamá, te tomás el derecho de matarme, tansolo porque papá te dejó, pero, si es un cobarde y a ése lo querías...
Despertá, mamá por favor, vamos a casa. Dale, má.
Claro... tenés razón... sos tan joven que no querés estar atada a mí... ¿Tanto orgullo crees tener? ¿Tanta vergüenza te da presentarme a tus conocidos? Pero si soy un bebé, má, soy tu hijo, y vos por orgullo y dignidad me matás. ¿No pensaste cuántas mujeres te están envidiando, di envidiando porque quieren tener un hijo y no pueden? ¿No pensás también que tal vez no vuelvas a tener uno?
¡No! ¡Vos no pensás, no pensás nada y me matás para seguir disfrutando de la vida! ¡Yo no tengo miedo, estoy serena y lo acepto! No puedo gritar, pelear, ni defenderme, pero sí sufro, sufro y también lloro, pensé que me esperaría un mundo con problemas pero con la alegría de un sencillo moisés y escarpines de colores, que estarían contentos cuando desparramara toda la sopa en la mesa o el orgullo tuyo o de papá cuando dijera las primeras palabras.
Pero de eso, nada pasará, todo quedará en el vacío inmenso de mi tan corta vida. Porque yo viví, má; yo viví porque soy alguien, siento, sufro, existo y vos, mamá me matás. ¿Sabés? No creo poder perdonarte, no, no lo creo y no lo voy a hacer nunca.
¡Ay!¡Ay!¡Ay! ¡Otra vez esa pinza! Ahora me agrattó el bracito, me lo está destrozando.
¡Mamá por favor! ¡Reaccioná! ¡Me duele, me duele mucho, má!
Má, mamita, yo te quiero, por favor no me hagan esto. Yo no tengo la culpa de nada. ¡Ay, mamá, mami! ¡Adios!
¡Ay! y no lo olvides, no lo olvides nunca... ¡¡YO TE QUERÍA!!