A la orilla de un gran risco, el aire húmedo acariciaba mi largo cabello oscuro, cuidando con mis manos tiesas del ambiente frió, las palabras escritas en aquel puñado de hojas que describían la vida triste de esos días, donde encontraba la salida de laberintos que yo misma complicaba, y todos los recuerdos plasmados como vivos fantasmas dentro del alma.
Una hoja se escapo de mis torpes dedos, volando lejos de los altos pinos, me quede parada observando como se alejaba, creyendo quizás que una lluvia la bañaría, borrando las letras remarcadas de agonías. Di la vuelta, me senté en una alfombra verde de sácate y prendí mis audífonos, mientras escuchaba una canción acelerada me limpiaba la tinta de mis uñas; soñando en algún día volar mas allá del mar, me percate de que iba mas allá, y me detuve del viaje, de repente una idea se cruzo en mis pensamientos; el de compartir al mundo mi soledad.
Comencé a escarbar en frases propias: “para empezar tengo que entrar al mundo”, ¿cómo lo hago?... mi timidez no me deja avanzar, pero tengo que caminar; me decía constantemente, y pensaba como indagar entre la sociedad.
Después de mucho darle vueltas a lo mismo, se me paso esa idea e intente escribir, a mi mente se vino la intención de hacer un libro con esas palabras que tanto envolvía en mi existir, encontrando un lugar entre lo incierto, presentando a la bestia amarrada que destrozaba mi alma, que iba mas allá de la perversidad, implorando dar muerte en el sótano de la soledad.

Con ese loco afán e impulso de componer, con una prosa incendiaria para alejar mi locura hacia delicadas mentes, avanzaron días y días.
En los escritos vivientes dejaba volar mis pensamientos, y fueron libres por fin, cuando me tope con una persona que en el ayer,fue una especie en cautiverio como yo, encontrando salvación al escribir.
Le confié mi oscura luna, la soledad, mi mundo, y la encamino ante la multitud de redacciones competitivas, irónicas y absurdas complicidades; en donde el rechazo ya me era indiferente, nadie con los sentidos alertas, sintió mis escritos profanos, y así se me devolvió el anonimato.
Emprendiendo un claro descenso regrese al punto de partida, en donde nació la idea de salir de ese pozo, lleno con lagrimas de amarga tristeza, mares provenientes de mis ojos marchitos, desbordados de dolor incontrolable, con tanta agua se apago el fuego de mis ilusiones.

Revoloteando en mi cabeza me quedo el eco de mil noches de insomnio, donde recorría dentro de mis recuerdos, y cada uno encadenado dentro de mi, me interrogaban insistentemente y lo plasmaba en papel, para que al leerse volara entre los vientos desahogando el pesar del ser habitado en mi interior.
Me aturdía mi escribir involuntario como el latir del corazón, y parada en aquella orilla del risco, decidí borrar mi vida con un salto al vació.
De ahí proviene el camino que ahora reinicio, y contraataco en tu sueño; niña que duermes en la alfombra verde del risco, despertaras con tantas palabras, que refugio encontraran en el fondo de un tintero y al inicio de una pluma, tus manos desesperadas escribirán la vida que yo no cree, pero que si describo, imponiendo tu esencia en el destino abstracto de amaneceres y suspiros, prendiendo versos cada atardecer.

Escucharas las sinfonías de los miedos y de los muertos hasta que se nuble tu mirada, harás entender la razón de tu ausencia, a quien encuentre la hoja perdida que la lluvia aun sigue borrando, y será una presa en persecución del mundo solemne de realidades que nadie acepta, resguardando cosechas tormentosas para afianzar mas los principios del alma, una advertencia ante la humanidad te hará flaquear, te empujara al precipicio cuando digas tu verdad. Busca al cautivo, ayúdale a salir, exploten sus mentes creando otra alternativa para existir, comiéndose al lado claro de lo que yo no pude producir.
Mientras mi alma perdida, marchita, triste y amargada, seguirá acurrucada en este lugar donde todo carece de sentido, hasta la muerte y el olvido.
Un mensaje al viento me dirá cuando el presagio sea cumplido, mi manifestación revolucionara el infinito, se encontrara vida en los cielos oscuros, y podrán suspirar ese aire como un beso profundo mas eterno de miles de vidas que morirán, al llegar un mundo de palabras prohibidas, cambiando para no llegar al final.