La primera: se quedó con el tigrillo e intentó por todos los medios cambiar su forma de ser (cosa que es prácticamente imposible, pues cada uno es como es y no va a cambiar para darle gusto a nadie, las personas pueden fingir pero en el fondo siguen siendo las mismas) o por lo menos convencerlo de salvar la relación, en otras palabras ella tuvo que renunciar a su orgullo de mujer, es más a su dignidad como persona para no hacerse la vida un infierno y poder perdonar todas las equivocaciones de su compañero, esto dio por resultado lo más esperado un total fracaso pues al intentar cambiarlo, el tigrillo se enfadó mucho e intentó lo mismo con la ratoncita lo que causó la discusión más apretada de los últimos tiempos llevando inmediatamente al rompimiento definitivo de ese noviazgo, realmente la ratoncita no se aguantó más esa presión por parte del tigrillo.
La segunda: el perro para ese entonces se había comprometido a viajar a un país lejano para un trabajo que se le había presentado, aún así la ratoncita le terminó a el tigrillo para poder vivir un poco de felicidad al lado de ese adorable perro, a los 2 meses este tuvo que irse pero aún así, la ratoncita se sintió satisfecha por que pudo aunque a última hora disfrutar de un poco de cariño sincero por parte de su pareja, el perro, era al contrario del tigrillo, un animal, noble, él podía perdonar muchas cosas, era justo y no se fijaba en lo que decían los demás, el solo prestaba atención a su gran corazón, y este precisamente era el animal que la ratoncita de esta historia buscaba, fueron felices y aún de lejos se siguieron queriendo.
La tercera: con ninguno, la ratoncita prefirió alejarse de los dos, no quería que ninguno se sintiera mal y por más que el tigrillo no la hubiese tratado bien, la ratoncita no le guardaba ningún tipo de rabia, ella prefirió quedarse sola, sus amigos la ayudaron, la animaban y no dejaban que nada la hiciera sentir mal y ella se pudo concentrar en las personas que quería, sin lastimar a nadie, y sin sentirse culpable o encarcelada.