El final llego en una tarde de forma subita e inesperada. era un dia nublado y se encontraban en un apartamento modico y modesto color escoces en Alemania. sus operaciones en anteriores veces habian sido exitosas, y otras. bueno, con rencillas. que ellos a veces con incomodidad y tedio resolvian por la fuerza o disparos a diestra y siniestra. "te doy cinco minutos si quieres mudar de opinion" decian si el jefe o la banda a tratar ponia peros o bien, no trataban a la buena por principio. solo se encontraba Ana maria y las chicas, las cuales se ocupaban de acicalarse y aceitarse con ciertos jumentos comprados en madrid y se probaban negliges de Francia; si. el negocio seria algo malo, pero les daba para mimarse de vez en cuando. los hombres habian salido para procurar contactos y buscar influencias de traficantes alemanes, los cuales abundaban en la metropoli. ella estaba como siempre meditando ante la ventana. pasaron unas horas. cuando tocaron a la puerta color blanco. "quien seria? los muchachos salieron hace un rato" penso Ana. al no encontrar respuesta de las chicas para abrir fue hacia la puerta y abrio. eran unos hombres vestidos con gabardina color cafe y gafas oscuras. sin indagar a bien quienes eran pregunto:
- disculpen, señores: no hablo aleman pero si algo de ingles. ¿ about this? ¿Whom are they?
- somos de la embajada de Mexico en Alemania y buscamos a Jaime y sus complices.- leyeron en voz alta los nombres del acta.- estan detenidos todos por fraudes bancarios, mas trafico de drogas. le leerremos sus derechos ante el consulado.
- ¿ de que hablan ? quizas.- no respondio mas. sin saber como se dirigio hacia las mujeres y les dijo todo. no hubo mas remedio que esperar, bajo las ordenes de los aprehensores a los otros complices y ser detenida la banda. asi, los trasladaron en furgoneta hacia una estacion migratoria donde les dictaron los cargos y cada unod estinado a diferentes areas de deportacion cuando ya se les habia dictado sentencia. a ella casi le toca apelar, pues su sentencia no se la habian dictado a tiempo. pasaron unas ocho semanas. ya sus ex- compañeros, cada uno sentenciado entre 8 y 20 años en prision ya habian sido trasladados a mexico: Jaime se encontraba como ella en espera de resolucion pero en otro separo en Munich. aunque ya no parecia importarle. victima de vacios estomacales y mal sueño habia tenido que responder a preguntas, en ingles y español visibles ante la embajada. ¿ en que lugar nacio usted? ¿quien la indujo? ¿ fue involucrada en.? etc, etc. ahora en unos dias le habian dejado en paz. "esta gente. esta gente que no respetan la madre ajena" decia para si en forma despectiva. y asi culmina la historia grafica de una traficante. al dia siguiente, ya mas presentable fue llevada ante el centro de deportados; de Jaime sabia que lo habian trasladado mientras ella era interrogada.
- Ana Maria Diaz Arciniegas.
- si, señor.
- acusada de delitos contra la salud complicidad delictuosa con traficante desaparecido, de un cartel desde Mexico, tijuana hace 10 años.
- yo respondo.- hubo un breve silencio y la voz del juez, con algo de sitorsion alemana sentencio:
- la corte le sentencia, por medio de la embajada de su pais a. cadena perpetua. los cargos seran pasados hacia la justicia mesicana para asignarle posteriormente sentencia en una penitenciaria de su lugar de origen. -concluyo. ella no protesto. con los pies bajos y la cabeza abatida se dirigio hacia deportacion para regresar a mexico. mientras sentia el viento ario en surostro al despegar el avion, pensaba en quien habia sido, antes de ser traficante. "solo. solo una lugareña sin otra herencia que el norte." dedujo con humor amargo. asi, al llegar hacia mexico fue llevada a la capital porque en guadalajara no habia espacio para ser sentenciada en su estado y fue a la capital. ahi le dictaron sentencia en la prision femenil de Santa Martha Acatitla, tras ser derribada hacia tiempo la federal de Lecumberri. no se supo mas. asi, cuando la spresas le decian que si no haci aalgo por apelar ella decia: ¿ ya pa´que? afuera nadie me espera. naiden." no sabia si lo decia por su familia, hace tiempo desterrada de su vida y no sabian de ella mas, o de Anselmo. ¡que importaba ya! suspiro, y siguio leyendo un libro de cornicas penitenciarias de la prensa, relativo a lecumberri. "la mansion del delito" asi le decian. y la vida sigue. pocos se acuerdan de este tipo de crimenes muy sonados en los ochenta o finales, cuando el narcotrafico alcanzo su apogeo en todo el mundo y como la vida no se sobrelleva, al menos asi. Fin.