Un grupo de adolescentes es llevado por unos monitores de convivencias a un viejo seminario. Llegaron de noche y el lugar tenía un aire fantasmagórico. Después de instalarse, se reunieron en la sala para contar historias de miedo. Los monitores les contaron la leyenda que pesaba sobre el seminario. Se cuenta que en las noches sin luna ronda por las instalaciones el fantasma de un monje muerto de forma misteriosa siglos atrás. Los chicos se rieron de ellos diciendo que eran ya lo suficiente mayores para creer en cuentos y los monitores decidieron darles una lección. Pero los chicos no se quedaron tranquilos y quedaron para averiguar si era cierto lo que contaban.
Se encontraron de madrugada para explorar la parte más antigua del edificio. Iban con linternas para iluminarse. Las paredes estaban cubiertas de moho y telarañas y olía a humedad.Llegaron a una especie de capila y en el suelo se encontraba la tumba del monje. Leyeron 1670, fecha de la muerte del monje.
-!Bah!-dijo un chico-. Esto es un cuento. Volvamos a las habitaciones.
Pero en ese momento una ventana se abrió de repente y empezó a soplar el viento. Se asustaron pero nadie lo reconoció. Siguieron caminando y empezaron a escuchar una especie de silbidos y ruidos parecidos a los de arrastrar cadenas.
-Será el viento-comentó alguien.
Todos estaban asustados. De pronto vieron a lo lejos una sábana flotando que venía hacia ellos. Salieron corriendo y gritando. Peo al mismo tiempo algunas personas se morían de risa. Eran los monitores que les habían gastado una broma. Los aullidos los imitó un monitor, la cadenas eran unas maracas que habían llevado para un juego y la sábana flotaba porqe estaba colgada del techo con hilo de pescar transparente. Los chicos procuraron creer en las leyendas poara no volver a repetir experiencia